El diario neoyorquino señala que “para frenar el tráfico, Uruguay considera adueñarse del negocio” y apuntó que crecen las políticas para combatir al narco y no a los consumidores
La producción agrícola de este país incluye arroz, soja y trigo. Pronto, sin embargo, el gobierno de José Mujica podría “ensuciarse las manos con una cosecha mucho más complicada (que las tradicionales): la de marihuana”, indica el diario The New York Times en un artículo titulado “South America Sees Drug Path to Legalization” (en su versión en castellano, la nota fue titulada “Para frenar tráfico de marihuana, Uruguay considera adueñarse del negocio“).
Para el rotativo, la iniciativa es parte de un “creciente movimiento en esta región para crear alternativas a la guerra contra el narcotráfico encabezada por los EEUU”.
El presidente de Uruguay incluyó en el plan de seguridad difundido el mes pasado la decisión de legalizar la producción de marihuana de una forma “regulada y controlada“, recuerda el rotativo. Y agrega, además, que “en toda Latinoamérica, líderes preocupados por la propagación de la violencia relacionada a las drogas están considerando políticas que hasta hace poco habrían sido inconcebibles”.
El diario señala que de lo único que se habla en Uruguay es del impacto que podría tener un mercado formal para lo que Ronald Reagan describió como “probablemente la droga más peligrosa en América”.
“Es un cambio profundo”, le dijo al rotativo Sebastián Sabini, uno de los legisladores que actualmente trabajan en la controversial propuesta revelada por el presidente José Mujica el 20 de junio. “Queremos separar el mercado: los usuarios de los traficantes, la marihuana de otras drogas como la heroína”.
El diario menciona que desde Brasil y Argentina se piensa que la mejor manera de ayudar a la policía a “concentrarse en los traficantes y no en los usuarios” es la despenalización de todas las drogas. Asimismo, señala que el presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, a quien describe como “un ex general directo y firme“, llamó a considerar “este tipo de enfoque”. Lo mismo hicieron los líderes de Colombia, México, Belice y otros países, “que también exigen un debate más amplio de las leyes punitivas contra las drogas“, agrega la nota.
“Uruguay ha llevado la experimentación a otro nivel“, asegura el diario, que además informa que “funcionarios de la ONU dicen que ningún otro país ha considerado seriamente un establecimiento legal manejado por el Estado sobre la marihuana o cualquier otra sustancia ilícita prohibida por las Naciones Unidas“.
La publicación señala que, de concretarlo, “Uruguay se convertirá en la primera república marihuanera en el mundo”, sumándose a Holanda, que desde 1976 liberó el consumo de marihuana oficialmente, y a Portugal que derogó todas las penas criminales por el uso de las drogas en 2001.
En Uruguay, “por el contrario, nacería una nueva industria manejada por el Estado, creada por burócratas gubernamentales convencidos de que la oposición a la marihuana es simplemente obsoleta“, indica la publicación neoyorquina.
El rotativo asegura que a pesar de todo, “la propuesta del presidente (Mujica) ha sido recibida con una ráfaga de oposición”. Asimismo, se destaca que “rivales políticos, consumidores de marihuana y funcionarios en temas de seguridad han expresadopreocupación sobre cómo se manejaría la marihuana y sobre si la legalización, o algo cercano a ello, aceleraría el agravamiento del problema de adicción y criminalidad”.
La semana pasada, Mujica anunció que si la mayoría de los uruguayos no entendían el valor de la legalización suspendería el plan mientras afinaba los detalles y conseguía el apoyo de la ciudadanía. “Si el 60% no entiende la iniciativa, nos vamos al mazo“, dijo el presidente uruguayo luego de que una encuesta revelara un amplio rechazo al proyecto del Gobierno.
Fuente Infobae