Luego de revolucionar al mundo, la ley que regula el expendio y uso de cannabis en Uruguay sigue con su propia revolución.
La demanda de los usuarios y las nuevas inscripciones van en aumento, lo cual produce problemas en la oferta.
La distribución de cannabis recreativo en farmacias le reportó al instituto de regulación (IRCCA) más de 20 millones de pesos en 2018 (casi medio millón de dólares). Al mes de abril existían 35.744 adquirentes registrados a través de 17 farmacias adheridas a la red de distribución.
Pero ese número ha quedado corto.
Ahora, un total de seis empresas quedaron habilitadas para competir por las tres nuevas licencias que el Poder Ejecutivo decidió otorgar para la producción y distribución de cannabis de uso recreativo y su dispensación en las farmacias.
Así termina un proceso iniciado el 11 de febrero, cuando abrieron un llamado a interesados, fundamentado en el “aumento sostenido” de los habilitados a acceder por esta vía legal a la sustancia.
Los tres nuevos permisarios se sumarán a los que ya se encontraban habilitados desde la puesta en vigencia de la regulación. Podrán también producir y distribuir hasta dos toneladas anuales de cannabis por un período de cinco años, según señala el portal Ecos.
El Instituto de Regulación y Control de Cannabis (IRCCA) conformará a su vez una lista de prelación con los oferentes que hayan superado el puntaje requerido y que nunca resulten adjudicatarios en primera instancia.
La lista tendrá validez por tres años, ante el eventual otorgamiento de nuevas licencias en un futuro.
Para la adjudicación, será decisivo el informe qué deberá elaborar la Secretaría Nacional Antilavado (SENACLAFT) sobre cada uno de los oferentes.
El año pasado fue el primero en el que el IRCCA obtuvo ingresos genuinos a partir de la aplicación de la ley, superando los aportes estatales.
La industria crece al mismo tiempo que los usuarios. Hace un mes se anunció la primera exportación de cannabis producido en Uruguay. Este año la empresa Fotmer dispondrá de seis toneladas de producción; la segunda etapa será de 10 toneladas y el objetivo es llegar a 400.
Con las ventas de cannabis con fines terapéuticos al exterior, Uruguay termina de concretar su apuesta por la legalización total de la planta. Fotmer, empresa de capitales estadounidenses y uruguayos que instaló 18 invernáculos –casi 30.000 m2 techados-, prepara su primera exportación que será a Alemania, luego Canadá y Australia.
Entre cinco y 10 minutos por persona” para ser procesada
“Acá estamos. Cortando marihuana. Esta es la extracción de flores. Una planta tiene que llevar entre cinco y 10 minutos por persona” para ser procesada, explicó a la AFP Santiago Bardanca, de 33 años, supervisor en Fotmer. La producción, cortada y secada, será preparada para exportar a Europa, Canadá y Australia.
Uruguay “ha sido visionario” y ahora “el mercado está creciendo”, por eso el país –donde la droga de uso recreativo se vende en farmacias-, puede hacer punta en producción de cannabis medicinal, explica el empresario.
Según datos de Naciones Unidas a 2016, el club de exportadores legales de cannabis lo encabezaban Reino Unido (67,7% del total), Holanda (16,4%) y Austria (8,7%). Sin embargo, Israel y Colombia prometen cambiar esos guarismos. También Uruguay, claro.