De acuerdo con el Centro Analítico del Ministerio de Industria y Comercio (ACVT), la exportación de cáñamo y sus productos se ha multiplicado por cuarenta desde 2015.
La industria mundial del cannabis está creciendo rápidamente y crecerá en los próximos años, predicen los analistas. Rusia no se queda atrás: la exportación de cáñamo y sus productos ha crecido 40 veces desde 2015, informaba la prensa local.
Los productos procesados con cáñamo se pueden usar para alimentos, energía, industria textil y papelera, medicina y cosmética. Los productos textiles de larga duración como la arpillera se producen principalmente en combinación con otras fibras y otros textiles también producidos en Rusia.
Un cultivo muy rápido
El cultivo de cáñamo puede alargarse hasta cuatro o cinco meses. De él se obtienen fibras delgadas y uniformes inmaduras, explica un experto independiente Albert Popov. Aunque en en Rusia, el cáñamo se cultiva aún más con fines alimenticios, obteniendo semillas y aceite. Por lo tanto, el aceite de cáñamo se considera un excelente producto dietético único, que contiene una gran cantidad de vitamina E y ácidos Omega 3, 6 y 9. La temporada de crecimiento para tales variedades de cáñamo es de 120 a 150 días, dependiendo de la región de cultivo y, en consecuencia, del clima. De acuerdo con Popov.
En 2019, según el Ministerio de Agricultura, los cultivos de cáñamo aumentaron de 2.500 ha, a 10.200. Según la Asociación de productores de cáñamo, el cáñamo se ha sembrado en grandes áreas, casi 15 mil hectáreas. Ahora el cáñamo se cultiva en seis regiones: Oryol, Penza, Kursk, Nizhny Novgorod, en las repúblicas de Adygea y Mordovia. Con un período de crecimiento relativamente corto (120 días) hace que el cáñamo sea un cultivo efectivo y rentable. Además, el cáñamo es mucho mejor en calidad de fibra que la madera.
“Las variedades técnicas de cáñamo cultivadas en el país en términos de cantidad y calidad pueden competir eficazmente con productos europeos similares. Los detalles de las plantas de cáñamo en crecimiento permiten, a un costo más bajo de diversos recursos, incluido el agua, obtener un rendimiento significativamente mayor que cuando se cultiva cualquier otro cultivo” – dicen desde el Ministerio de Agricultura ruso.
Las exportaciones van a crecer
Por ahora, sus exportaciones son bastante pequeñas. Según el Ministerio de Industria y Comercio, en 2019 fueron 60.1 toneladas aunque esto es 7.4 veces más que en 2018 y 40 veces más. que en 2015. Las altas tasas de crecimiento de las exportaciones están asociadas con una base baja, pero las perspectivas para la producción industrial de cáñamo son altas, dijo Yulia Divnich, presidenta de la Asociación de Cultivadores de Cannabis.
Ahora el cáñamo y las semillas es legal en país y se exportan principalmente, según el ACVT y representando más del 96.5% del ingreso total. Los productos de cáñamo se suministran principalmente a Bielorrusia y Kazajstán.
Los productores de cáñamo rusos, según Divnich, ya están produciendo productos alimenticios, telas, papel y pulpa. La planta pulverizada se utiliza para celulosa de cáñamo. También, se fabrican medicamentos e incluso plástico biodegradable muy fuerte. Y además de biodiesel que está hecho de pulpa de cáñamo.
Rusia y como antaño, también quiere ser una gran potencia mundial en la producción de esta magnífica planta.
