El CBD es un fitocannabinoide extraído de la planta del cannabis con diferentes efectos en la salud humana, y uno de ellos provocaría que la presión arterial bajase.
Si bien hasta ahora, la investigación todavía solo se realiza en animales para la mayoría de las afecciones, un estudio humano muy importante realizado en 2017 analizó específicamente los efectos del CBD en la presión sanguínea.
Resumen del estudio publicado por American Society for Clinical Investigatión “Una dosis única de cannabidiol reduce la presión arterial en voluntarios sanos en un estudio cruzado aleatorio”
Antecedentes
El cannabidiol (CBD) es un fitocannabinoide no psicoactivo utilizado en la esclerosis múltiple y las epilepsias intratables. Los estudios preclínicos muestran que el CBD tiene numerosos beneficios cardiovasculares, incluida una respuesta de presión arterial (PA) reducida al estrés. El objetivo de este estudio fue investigar si el CBD reduce la PA en humanos.
Métodos
Nueve voluntarios varones sanos recibieron 600 mg de CBD o placebo en un estudio aleatorizado, controlado con placebo, doble ciego, cruzado. Los parámetros cardiovasculares fueron monitoreados usando un finómetro y láser Doppler.
Resultados
El CBD redujo la presión arterial sistólica en reposo (–6 mmHg; P <0.05) y el volumen sistólico (–8 ml; P <0.05), con un aumento de la frecuencia cardíaca (FC) y un gasto cardíaco mantenido. Los sujetos que tomaron CBD tuvieron una presión sanguínea más baja (–5 mmHg; P <0.05, especialmente antes y después del estrés), aumento de la FC (+10 lpm; P <0.01), disminución del volumen sistólico (–13 ml; P <0.01) y respuesta del flujo sanguíneo de la piel antebrazo roma al ejercicio isométrico En respuesta al estrés por frío, los sujetos que habían tomado CBD habían disminuido la presión arterial (–6 mmHg; P <0.01) y un aumento de la FC (+7 lpm; P <0.05), con una resistencia periférica total más baja.
Conclusiones
Estos datos muestran que la administración aguda de CBD reduce la PA en reposo y el aumento de la PA al estrés en humanos, asociado con un aumento de la FC. Estos cambios hemodinámicos deben considerarse para las personas que toman CBD. Se requiere más investigación para establecer si el CBD tiene un papel en el tratamiento de los trastornos cardiovasculares.