Sensi Seeds celebra su 30 aniversario. Como parte de las celebraciones, estamos aprovechando la oportunidad para echar un vistazo, periódicamente, al camino recorrido durante las tres últimas décadas increíbles que nos han conducido hasta este alegre momento.
Al mirar atrás, por supuesto que en Sensi Seeds también reconocemos qué fue lo que lo hizo posible: la planta de cannabis, y el impacto que tiene sobre todos aquellos que la conocen. Piensa en ello un momento. ¿Puedes recordar tu primer encuentro con la planta? ¿Recuerdas la primera vez que experimentaste sus efectos psicoactivos? Seguro que incluso recuerdas dónde ocurrió y con quién.
Tuvo el mismo efecto en el fundador de Sensi Seeds, Ben Dronkers, un impacto que le llevó a luchar por los intereses de la planta. Lo mismo le ocurrió a uno de sus mejores amigos: Jack Herer. En este artículo, vamos a analizar los paralelismos en el camino que siguieron ambos hombres y cómo, juntos, hicieron avanzar a toda la comunidad del cannabis.
Iniciación a la planta de Jack
Jack Herer llegó al punto de inflexión más importante de su vida en 1969. Hasta entonces, había sido un conservador estadounidense, muy de derechas, que defendía la guerra de Vietnam y que no quería tener nada que ver ni con el cannabis ni con nada relacionado con la cultura hippie. Su amor por una mujer, quien le convenció para fumar un porro a pesar de todo, contribuyó a cambiar su opinión. La primera vez que fumó no sintió nada. Sin embargo, su novia no se rindió, lo que llevó a Jack a experimentar su primera subida. La conexión que estableció con la planta por aquel entonces no sólo no le abandonó nunca, sino que se fortaleció hasta su muerte.
Iniciación a la planta de Ben
Ben Dronkers tuvo su primera experiencia con el cannabis unos años antes. Un amigo suyo se había hecho con un pedazo de hachís y Ben se fumó su primer porro con él. Fue una experiencia agradable, pero no abrumadora. Desde luego, Ben no entendía todo el alboroto que se montaba con el cannabis. Sin embargo, le pasó lo mismo que a Jack, sólo percibió los efectos, de verdad, después de la segunda o tercera vez.
En el caso de Ben, había un elemento añadido en su relación con el cannabis. Había heredado de su madre el amor por las plantas. A Ben le fascinaba el hecho de que las flores secas y la resina de una planta tuvieran un efecto beneficioso en la gente. Le motivó para estudiar más a fondo el cannabis.
Jack se involucra cada vez más en la planta
Después de que Jack hubiese descubierto el cannabis, de repente se mostró receptivo a los argumentos de los que se oponían a la guerra de Vietnam. Jack se volvió cada vez más progresista, y en 1973, junto con un amigo, comenzó a publicar cómics sobre el cannabis. Estas historias fueron un éxito y los lectores supusieron que Jack Herer sabía mucho sobre la planta. Cuando Jack se dio cuenta de que les iba a decepcionar, decidió meterse de lleno en la tarea de conocer el cannabis a fondo.
Un nuevo mundo se abrió ante sus ojos. Jack Herer descubrió que la humanidad había estado utilizando el cáñamo durante miles de años. Cuanto más aprendía sobre la planta, más importante le parecía y más aborrecía la prohibición, y toda la propaganda en la que se basaba.
Ben se involucra cada vez más en la planta
Ben también desarrolló un amplio conocimiento y experimentó con las cualidades espirituales de la planta. Su aversión por la prohibición del cannabis y del cáñamo también aumentó, aunque desde una perspectiva diferente. A principios de la década de 1970, Ben solía viajar a Turquía, Afganistán y Pakistán, donde entró en contacto con el cáñamo como material. Además, los agricultores locales le regalaron cannabis y semillas de cannabis, y enseguida Ben se dio cuenta de que el cannabis y el cáñamo, que están prohibidos y vilipendiados en todos los rincones del mundo, de hecho, tienen una gran cantidad de beneficios que ofrecer al mundo.
Ben empezó a cultivar y a realizar cruces de especies con el fin de combinar sus propiedades y desarrollar nuevas variedades. Desarrolló una conexión, sincera y profunda, con la planta de cannabis: un amor por su belleza, su carácter, su versatilidad y su fuerza. Este amor llevó a Ben por todos los rincones del mundo, a lugares y culturas donde el cannabis y el cáñamo habían formado parte del patrimonio medicinal, cultural y espiritual durante milenios.
Jack Herer es arrestado
En enero de 1981, unos días antes de que Ronald Reagan asumiera la presidencia, Jack Herer recogía firmas a favor del cáñamo, junto con cinco otras personas, cerca de un edificio federal en Los Ángeles, California. Cuando Ronald Reagan llegó al edificio, al principio pensó que un grupo de canadienses se estaban manifestando, al confundir la hoja de cannabis con una hoja de arce: el símbolo de Canadá. Cuando se enteró de que eran activistas del cannabis con permiso para protestar allí, Reagan hizo todo lo que pudo para que, de todos modos, fueran arrestados. Y lo consiguió. Los cinco compañeros activistas fueron multados con cinco dólares cada uno, mientras que a Jack le metieron en la cárcel durante dos semanas. Aquí es donde se le ocurrió el plan que tendría un impacto tan profundo en su vida.
Ben Dronkers es detenido en varias ocasiones
Durante el mismo período, Ben Dronkers se dedicaba al cultivo de marihuana y a realizar cruces de especies para crear nuevos híbridos. Por aquel entonces, en los Países Bajos, se fumaba principalmente hachís. La marihuana era relativamente desconocida en esos días y la que se importaba, en su mayoría, procedía de Tailandia o África, y era una marihuana de color marrón, prensada en placas y seca. Así que cuando Ben intentó introducir su marihuana en los primeros coffee shops, no tuvo para nada un éxito inmediato. “Incluso la llamaron espinacas”, contaba Ben en su entrevista para el blog de Sensi Seeds.
Jack Herer escribe “El Emperador Está Desnudo”
En 1974, Jack tuvo una visión. Una firme creencia se apoderó de él, y se convirtió en el trabajo de su vida. Jack quería convencer al mundo de que el cáñamo puede salvar el planeta Tierra. Los biocombustibles a partir de cáñamo ecológico pueden sustituir a la industria de los combustibles fósiles. El papel puede hacerse de cáñamo y evitar la deforestación. Además, hay cientos de productos diferentes para los que el cáñamo se puede utilizar como una alternativa ecológica a los materiales contaminantes convencionales.
Cuando Jack fue arrestado y encarcelado de nuevo, después de luchar pacíficamente a favor de la planta, resultaba cada vez más necesario difundir lo que había descubierto. Pero, ¿cómo podía llegar a más gente? Precisamente, escribiendo y publicando un libro. Entre rejas, se sentaron las bases del que se ha convertido en uno de los libros más famosos que se han escrito sobre el cannabis, el cáñamo y el activismo, nos referimos a “El Emperador Está Desnudo” (The Emperor Wears No Clothes). Este éxito de ventas se publicó por primera vez en 1985, el mismo año que Sensi Seeds se fundó oficialmente.
Ben Dronkers descubre un resquicio legal
También fue durante una de sus estancias en un calabozo de la policía cuando a Ben Dronkers se le ocurrió una idea al leer los textos de la Ley del Opio. Se dio cuenta de que vender semillas de cannabis era legal. Pero, ¿cómo conseguir semillas de cannabis si no se te permite cultivar la planta? Ben presentó esta clásica historia del huevo y la gallina a un abogado experto que, finalmente, tuvo que estar de acuerdo con él. Esto condujo a un momento crucial en el que Ben consiguió permiso legal para cultivar cannabis destinado a la producción de semillas de marihuana. Al ponerlo, posteriormente, en conocimiento de la policía y de las instituciones agrícolas pertinentes, ya no podían oponerse a sus actividades.
Su amor, ahora profundo, por todo lo relacionado con la planta de cannabis, su espíritu emprendedor, junto con su sentido de la justicia y carácter rebelde se pusieron en marcha a pleno rendimiento. Era el momento de acelerar la lucha para devolver la planta a su lugar legítimo en la sociedad. Llegados a ese punto, ya nada podía parar a Ben y, en 1985, fundó Sensi Seeds y abrió el Hash Marihuana & Hemp Museum.
El encuentro entre dos pioneros
Resulta evidente que existe un paralelismo entre las historias de Jack Herer y Ben Dronkers, y era inevitable que estos dos luchadores se encontrasen. Jack y Ben se había visto en varias ocasiones, pero en 1990, cuando Ben invitó a Jack a su casa, finalmente se conocieron mejor. Sentados a la mesa de la cocina, hablaron durante horas sobre sus experiencias, su amor compartido por el cannabis, la marihuana, el cáñamo y la importancia de difundir información rigurosa: Jack a través de “El Emperador Desnudo” y Ben a través de sus genéticas de cannabis y del Hash Marihuana & Hemp Museum. Casualmente, esta reunión se grabó y puede verse, en parte, online en la serie SensiBilisation del blog de Sensi Seeds.
El lanzamiento de la legendaria variedad de cannabis Jack Herer
Después de este encuentro tan especial, tuvieron una cosa clara: la planta de cannabis había creado una amistad muy fuerte. No mucho tiempo después de esta reunión memorable, a Ben se le ocurrió la idea de rendir homenaje a su compañero de cruzada y a su amistad. Y para Ben, sólo había una manera mejor de hacerlo, es decir, criar una nueva variedad, única e impresionante, que llevaría el nombre de Jack Herer.
Después de varios años de cría y estabilización, la variedad Jack Herer® se lanzó en 1994, durante una ceremonia en The Cannabis Castle. El acto contó con la presencia de las figuras más importantes de la industria del cannabis y, por supuesto, del propio hombre, que disfrutó de este momento de triunfo.
Sensi Seeds sigue sintiéndose increíblemente orgullosa de este honor y del prestigio con el que cuenta esta variedad en la comunidad de cannabis de todo el mundo 20 años después. Parte de Jack Herer sigue vivo en la forma de esta planta de cannabis, una planta que une a las personas, que crea amistades, inspira y ayuda a la gente.
¡Todo el mundo puede ser un pionero del cannabis!
Acabamos de contarte una historia muy especial, que apreciamos como uno de los acontecimientos más importantes de nuestra existencia de 30 años. Pero ¿es una historia única? ¿Y crees que estas experiencias son sólo para unos pocos? Nosotros no lo creemos.
¡Creemos que cualquier persona puede ser un pionero del cannabis! La lucha a favor de devolver el cannabis a su lugar legítimo en la sociedad no está reservada para unos pocos. Es una lucha que nos afecta a todos y en la que todos estamos implicados. Una lucha que comienza con un sencillo momento. ¿Recuerdas tu primer encuentro con la planta? ¿Dónde estabas? ¿Qué sentiste? ¿Con quién estabas?
¿Puedes sentir la conexión que tienes con la planta? ¿Puedes sentir lo especial que puede ser para ti? Todo lo que tienes que hacer es expresarlo. Difúndelo por el mundo, confía en la conexión que sientes, celebra la conexión, sumérgete en la planta y, con frecuencia, vuelve a pensar en todos los maravillosos momentos que habéis pasado juntos. Eso es exactamente lo que Jack Herer hizo y lo que Ben Dronkers sigue haciendo.
Tú también puedes emprender este camino, luchar por la planta y convertirte en un pionero. ¿Te apuntas?
Por Martijn