Es normal que cuando alguien decide iniciar un cultivo interior, surjan mil dudas. No deja de ser un gran desembolso y lo que menos se pretende es comprar más de lo necesario o algo que no resulte del todo acertado.
El mayor coste de un interior será sin duda la iluminación. Porque aunque hoy en día algunas tecnologías son muy baratas, debemos sumarle el coste mensual en electricidad.
En este artículo encontrarás la respuesta a la pregunta que se hacen muchos cultivadores. Cuando termines de leer, podrás sacar tus propias conclusiones para optar por uno u otro.
¿Qué iluminación se necesita para un cultivo?
La respuesta es muy ambigua, ya que depende de muchos factores. Lo que en principio buscan los cultivadores, es poder tener hierba en la despensa para todo el año.
Así que en primer lugar cada uno debe calcular con qué cantidad se sentiría satisfecho. ¿Con un porro al día? ¿O con 5 porros al día? ¿Quizá el doble?
Por ejemplo, pongamos que en casa viven dos fumadores y cada uno se fuma 4 porrillos al día, aproximadamente 2 gramos. Pues seguramente con unos 700-800 tendrían la despensa llena para todo el año.
Lo habitual es que cualquiera pretenda conseguir todo eso en varias cosechas. De lo contrario, haría falta un gran armario de cultivo y no una buena luminaria, sino varias buenas luminarias.
Con dos cosechas de 350-400 gramos, estaría hecho. Y con tres cosechas de 250-300 gramos, también. Así que ahora veremos qué iluminación se necesita para conseguir estas cifras.
Diferentes sistemas de iluminación
Actualmente, existen 3 tipos de iluminación. Y es los próximos años, se espera que dos de ellos desaparezcan.
Vapor de Sodio y Halogenuros Metálicos
Son las lámparas que dominaron el mercado durante prácticamente dos décadas. Las lámparas de vapor de sodio o HPS pueden ser exclusivas para floración o para ambas fases, y los haluros metálicos son específicas para crecimiento.
Hoy en día se considera una tecnología obsoleta, pero todavía son muy usadas. Cada vez se encuentran a precios más bajos, ya que muchos fabricantes se están deshaciendo del stock.
Las grandes desventajas son el gran consumo eléctrico, la gran cantidad de calor que producen y lo poco que duran las lámparas. Se recomienda sustituirla cada 2-3 cultivos.
Los rendimientos que llegan a ofrecer son de 0,7-1 gramos por vatio en cultivos optimizados. Es decir que con un HPS de 400W se podría sacar de 280 a 400 gramos en un armario de 1 m².
LEC o CMH
Este tipo de lámparas son similares a las anteriores, pero cuentan con una serie de ventajas que las sitúa por encima. Producen más gr/w, lo que a su vez supone un menor consumo eléctrico. Y como tienen un menor consumo, también emiten menos calor.
Y su espectro es mucho mejor, ya que es más similar a la luz solar. Esto se nota en la calidad de la cosecha, con cogollos más grandes, compactos y también resinosos.
Los rendimientos en cultivos optimizados pueden ir de 1 gramo por vatio a 1,2 gramos por vatio. Es decir que con una bombilla LEC de 315W se sacarían de 315 a 378 gramos en un armario de 1 m².
Al igual que los HPS, muchos fabricantes han decidido apostar todo a los LED y actualmente su precio ha bajado bastante. Se pueden encontrar auténticas gangas por menos de 80 euros.
LED
Es la tecnología del presente y también del futuro. Gracias a la combinación de cientos de diodos de diferentes colores, se consigue un espectro impresionante. Se puede decir incluso que mejora al sol.
El gran problema de los LED, es que un buen panel es caro. Pero las grandes ventajas es que ofrecen las flores más grandes y resinosas que puedas imaginar. Y además, un LED durará años, no emite apenas calor y en comparación con los anteriores, consume menos para ofrecer más.
Con un buen LED los cultivadores no tienen dificultades para llegar a los 2 gramos por vatio. Es decir que con un pequeño panel de 200W se podría sacar lo mismo que con 315W LEC o 400W HPS.
Lo normal es usar un LED de 300-350W en un armario o espacio de 100x100cm. Así que los rendimientos totales serían de 600-700 gramos. Nada mal, ¿eh?.
El espacio de cultivo
Durante muchos años, los estándares lo marcaron las lámparas de sodio a la hora de iluminar las diferentes medidas de armarios de cultivo. A continuación os dejamos una tabla con estos estándares:
POTENCIA DE LA LÁMPARA HPS | TAMAÑO DEL ARMARIO |
250 W | 80 x 80 cm |
400 W | 100 x 100 cm |
600 W | 120 x 120 cm |
1000 W | 150 x 150 cm |
La llegada de las luces LEC, ha modificado ligeramente estos conceptos. Por un lado, la potencia mínima de 315W hace que no sean equipos muy adecuados para armarios de menos de 100x100W.
Pero por otro lado, en espacios más grandes y con un consumo similar a una lámpara HPS, ofrece mejores rendimientos.
POTENCIA DE LA LÁMPARA LEC | TAMAÑO DEL ARMARIO |
315 W | 100 x 100 cm |
630 W | 120 x 120 cm |
1000 W | 150 x 150 cm |
Y por último las luminarias LED tiene potencias tan dispares que los estándares literalmente saltan por los aires. Aun así, podríamos hablar de 300-350 W por 1 m² de espacio de cultivo.
POTENCIA DE LA LUMINARIA LED | TAMAÑO DEL ARMARIO |
100 W – 125 W | 60 x 60 cm |
180 W – 220 W | 80 x 80 cm |
300 W – 350 W | 100 x 100 cm |
550 W – 650 W | 120 x 120 cm |
750 W – 1000 W | 150 x 150 cm |
Seguimos
Si tienes en cuenta lo anterior, podrás hacer unos fáciles cálculos en base a la iluminación en determinado espacio de cultivo. Por ejemplo, con un LED de 600W en un armario de 120 x 120 cm cosecharías más de 1000 gramos en un solo cultivo.
O en un pequeño armario de 80×80 cm con un HPS de 250W, se conseguiría en el mejor de los casos 250 gramos. Pero con un LED de 200W se podría acercar a casi los 400 gramos.
Pero todo esto no deja de ser el cuento de la lechera. Lo normal en un primer cultivo, no es llegar a estas cifras. La máxima producción se conseguirá con la suma de varios factores, aunque la iluminación puede que sea el más importante.
También influye mucho la variedad, el tipo de sustrato (los hidropónicos ofrecen mayores producciones), los abonos, las técnicas de cultivo o las condiciones ambientales. Y por supuesto, la experiencia y el saber adelantarse a los acontecimientos.
Así que lo mejor es ser prudentes con las expectativas y en los cálculos de la producción, tirar siempre por lo bajo. De todos modos, después de tu primer cultivo ya podrás hacerte a la idea de lo mínimo que conseguirás, ya que irás mejorando cultivo a cultivo.
Conclusión
Para saber qué iluminación se necesita para un cultivo, lo mejor es calcular cuánta hierba al año se consumirá. Partiendo de eso, podremos comparar entre los diferentes tipos de luces y decantarnos por un determinado tamaño de armario. Así nunca te quedarás corto ni con la despensa vacía.