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¿Qué es un retrocruzamiento y cómo se hace?

13 June, 2023, 12:00 PM
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En este artículo te hablaremos de qué es el retrocruzamiento y cómo se lleva a cabo, comprendiendo su importancia en el mejoramiento genético y cómo puede ayudarnos a obtener variedades de marihuana con rasgos deseables de manera consistente.

¿Qué es el retrocruzamiento?

El retrocruzamiento, también conocido como “backcrossing”, es un proceso genético que consiste en cruzar una planta híbrida con uno de sus progenitores o una variedad establecida para obtener una descendencia que comparta características específicas con el progenitor.

A través de este método, se busca preservar y transmitir los rasgos genéticos deseables de la planta original, al mismo tiempo que se reduce la influencia de otros genes no deseados.

El retrocruzamiento desempeña un papel fundamental en la cannabicultura moderna. Permite a los cultivadores mejorar y estabilizar variedades de marihuana, asegurando que las características genéticas más valiosas se transmitan de generación en generación.

Esto resulta especialmente relevante en la búsqueda de plantas con perfiles de cannabinoides específicos, como altos niveles de CBD o THC, o con propiedades aromáticas y de sabor excepcionales.

Híbridos haze

El retrocruzamiento también brinda la oportunidad de eliminar o reducir rasgos indeseables, como vulnerabilidades a enfermedades o plagas, baja producción de resina, crecimiento lento o estructura débil.

Al volver a cruzar con un progenitor establecido, los cultivadores pueden seleccionar y fijar los rasgos deseados, mejorando así la calidad y la consistencia de las variedades de cannabis.

Fundamentos genéticos del retrocruzamiento

Sumergirse en los fundamentos genéticos del retrocruzamiento es esencial para comprender plenamente esta técnica.

Breve explicación de la genética de las plantas de marihuana

Antes de adentrarnos en los detalles del retrocruzamiento, es importante comprender la genética subyacente de las plantas de marihuana. Las plantas de cannabis son organismos diploides, lo que significa que tienen dos juegos de cromosomas.

Estos cromosomas contienen los genes que determinan las características de la planta, como el tamaño, el aroma, los cannabinoides y otros rasgos.

Cada gen en las plantas de marihuana puede existir en diferentes formas, llamadas alelos. Estos alelos pueden ser dominantes o recesivos, y determinan cómo se expresarán los rasgos en la planta.

Por ejemplo, si un gen para el color del cogollo tiene un alelo dominante para flores blancas y un alelo recesivo para flores rojas, las plantas con el alelo dominante tendrán flores blancas.

Entendiendo el concepto de homocigosis y heterocigosis

En un retrocruce o retrocruzamiento, también es importante comprender los conceptos de homocigosis y heterocigosis.

Homocigosis se refiere a cuando un organismo tiene dos copias idénticas de un gen específico, ya sea dos alelos dominantes o dos alelos recesivos.

Por otro lado, la heterocigosis ocurre cuando un organismo tiene dos alelos diferentes para un gen particular.

El retrocruzamiento busca aumentar la homocigosis de los alelos deseables en una planta. Al cruzar la planta híbrida con su progenitor o una variedad establecida, se busca obtener una descendencia que comparta características específicas con el progenitor.

retrocruzamiento

Con cada retrocruzamiento sucesivo, se reduce la presencia de otros alelos no deseados, lo que lleva a una mayor homogeneidad en los rasgos genéticos de la planta.

Por ejemplo, si cruzamos una White Widow con una Skunk, el híbrido resultante tendría 50% de genes White Widow y 50% de genes Skunk.

Si este híbrido lo cruzamos de nuevo con White Widow, el retrocruzamiento resultante tendría un 75% de genes White Widow y 25% de genes Skunk.

Si volviemos a realizar otro retrocruce con la misma White Widow, el resultado sería un híbrido 88% White Widow y 12% Skunk.

Y si continuasemos, llegaría un momento en que la influencia de la Skunk sería prácticamente nula.

Esta influencia en los genes de la planta permite a los cultivadores obtener variedades de cannabis con características específicas de manera más predecible.

Ya sea que se busquen perfiles de cannabinoides particulares, características aromáticas distintivas o resistencia a enfermedades, el retrocruzamiento puede ayudar a alcanzar esos objetivos genéticos.

Pasos para realizar un retrocruzamiento

El retrocruzamiento es un proceso meticuloso que requiere atención a los detalles y una planificación cuidadosa. Sigue estos pasos para lograr los resultados deseados y obtener plantas retrocruzadas de alta calidad.

1- Selección de la planta madre adecuada

El primer paso crucial en el retrocruzamiento es seleccionar una planta madre adecuada. Esta planta madre debe ser la variedad en la cual deseas conservar y mejorar características específicas.

Ten en cuenta las cualidades deseadas, como rendimiento, contenido de cannabinoides, aroma, resistencia a enfermedades u otros rasgos que quieras resaltar en la descendencia.

Cuidar de la temperatura, luz y humedad es básico en el proceso de cómo cuidar una planta de marihuana bebé

Es importante elegir una planta madre estable y saludable, que tenga un buen potencial genético y que cumpla con tus criterios de selección.

La planta madre será la base para los cruces sucesivos y, por lo tanto, influye directamente en la calidad y consistencia de las plantas retrocruzadas.

2- Preparación de la planta madre y la planta donante

Una vez seleccionada la planta madre, es necesario prepararla adecuadamente para el proceso de retrocruzamiento. Esto implica asegurarse de que la planta madre esté en óptimas condiciones de salud y nutrición.

Realiza una poda ligera para eliminar ramas y hojas innecesarias, y asegúrate de proporcionarle los nutrientes necesarios para promover un crecimiento vigoroso.

Además, se debe seleccionar una planta donante adecuada que posea los rasgos genéticos deseados que deseas introducir en la descendencia.

La planta donante puede provenir de una variedad diferente, pero debe tener las cualidades genéticas específicas que buscas incorporar en tu línea de retrocruce.

3- Polinización controlada y recolección de semillas

El siguiente paso es llevar a cabo la polinización controlada entre la planta madre y la planta donante. Esto se logra asegurando que el polen de la planta donante fertilice las flores de la planta madre.

Puedes hacerlo utilizando técnicas como el pincelado suave o el uso de bolsas de polinización.

Una vez que se ha realizado la polinización, es importante permitir que las semillas se desarrollen y maduren adecuadamente.

Esto requerirá tiempo y cuidado. A medida que las semillas maduran, asegúrate de monitorear y proteger la planta madre y las flores polinizadas para evitar la dispersión del polen no deseado.

Cuando las semillas estén maduras, podrás recolectarlas cuidadosamente para su posterior uso en los cruces retrocruzados.

4- Proceso de selección de las plantas retrocruzadas

El último paso en el retrocruzamiento es el proceso de selección de las plantas retrocruzadas. Aquí, deberás cultivar, evaluar y seleccionar las plantas que poseen las características deseadas y que se asemejan lo más posible a la planta madre original.

Realiza un análisis minucioso de cada planta retrocruzada, observando características como el rendimiento, contenido de cannabinoides, resistencia a enfermedades, aroma y cualquier otro rasgo que sea relevante para tu objetivo de retrocruce.

Mediante la selección cuidadosa, podrás identificar las plantas retrocruzadas que mejor representen las cualidades que buscas.

Estas plantas seleccionadas serán las que utilizarás en futuros cruces y te permitirán desarrollar una línea genética estable y mejorada.

A medida que adquieras más experiencia, podrás perfeccionar tus técnicas y obtener resultados aún más consistentes y satisfactorios en tus cruces retrocruzados.

Uso del retrocruzamiento para desarrollar variedades autoflorecientes

Otra aplicación destacada del retrocruzamiento en la cannabicultura es la creación de variedades autoflorecientes. Estas plantas tienen la capacidad de florecer automáticamente, independientemente del fotoperíodo al que se expongan. Este avance ha revolucionado la forma en que se cultivan las plantas de marihuana.

El retrocruzamiento se ha utilizado para introducir el gen autofloreciente en variedades de marihuana tradicionales. A través de sucesivas generaciones de retrocruce y selección, se ha logrado estabilizar esta característica en nuevas variedades autoflorecientes.

Estas plantas ofrecen ventajas significativas, como ciclos de cultivo más cortos y la posibilidad de obtener múltiples cosechas al año.

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