Tanto las semillas de cáñamo como sus derivados (aceites, harinas) son una importante fuente de proteínas de origen vegano, que además incorporan ácidos grasos, vitaminas, fibra y minerales, pudiendo ser así una pieza clave de la dieta diaria. Y además, no tienen gluten .
Las semillas de cáñamo
El cáñamo ha sido usado desde hace miles de años. Los registros más antiguos proceden de China, donde fue una de las piedras angulares en el desarrollo de la primera civilización conocida.
De esta planta se aprovechaban las semillas por su alto valor nutricional, además de las fibras y las flores con las que elaboraban medicamentos.
También hay evidencias claras de que el cáñamo se introdujo en toda la cuenca del Mediterráneo siglos antes de Cristo. Y durante toda la Edad Media, se usó la fibra de cáñamo para la fabricación de papel y velas de barcos.
Pero a mediados del siglo XX, todo cambió. El Cannabis (tanto cáñamo como marihuana) quedó sometido a un estricto sistema de fiscalización internacional.
En la Convención Única de Naciones Unidas de 1961, se decidió incluirla en la lista de sustancias estupefacientes. Fue a lo que nos llevó a este régimen prohibicionista que vivimos hoy en día.
La consecuencia que el cultivo de marihuana y cáñamo pasaron a estar prohibidos. La excepción fue el cultivo para fines terapéuticos, y con los años el cultivo de variedades de cáñamo con fines industriales.
Composición química de las semillas de cáñamo
SEMILLAS ENTERAS | SEMILLAS PELADAS | HARINA | |
ACEITE | 36% | 44% | 11% |
PROTEINAS | 25 | 33 | 34 |
CARBOHIDRATOS | 28 | 12 | 43 |
ENERGÍA (KJ/100grs) | 2200 | 2093 | 1700 |
FIBRA | 28% | 7% | 43% |
Importancia de los ácidos grasos
Si por algo destacan las semillas de cáñamo, es por su gran aporte de ácidos grasos esenciales o EFAs. El ácido omega-3 alfa linolénico se encuentra presenta al 20%. Y el ácido inoleico omega-6 en un 55%.
También se encuentran cantidades respetables de sus productos metabólicos tales como el ácido gamma linolénico (presente del al 4%), y ácido estearidónico (presente del 0.5 al 2%).
Algo excepcional si se compara el aceite de semillas de cáñamo con la mayoría de aceites vegetales, es la proporción de omega-6 y omega-3.
Ésta se encuentra alrededor del 3:1 (triple de omega-6 que de omega-3). Es la relación recomendada para la alimentación humana.
Las relaciones altas de omega-6 respecto a omega-3 promueven muchas enfermedades como las cardiovasculares, las autoinmunes e incluso el cáncer.
Pero cuando se disminuye esta relación, bien sea rebajando el omega-6 o aumentando el omega-3, los beneficios para la salud son sorprendentes.
Es un aceite rico en ácidos grasos poliinsaturados (PUFAs) y además destaca su baja concentración de ácidos grasos saturados.
También el aceite de semillas de cáñamo contienen tocoferoles, compuestos orgánicos conformados por varios fenoles metilados de los cuales varios actúan como Vitamina E.
Y además contiene más tocoferoles que la mayoría de aceites vegetales. Destacan el γ-tocoferol y el α-, β- y δ-tocoferol.
Fuente de proteínas de origen vegano
Las proteínas se componen de cadenas de aminoácidos que proporcionan los componentes a la hemoglobina, los anticuerpos para combatir las infecciones, hormonas y enzimas que permiten que se produzcan todas las reacciones químicas en las células.
Son por lo tanto esenciales para nuestra salud y debemos consumirlas todos los días. A diferencia de las grasas y los azúcares, las proteínas no son almacenadas por el cuerpo.
Si hay déficit de proteínas, el cuerpo humano se ve en la obligación de descomponer tejido celular para compensar.
La harina de semillas de cáñamo es una gran fuente de proteína vegana fácilmente digerible. Puede variar su contenido dependiendo de si las semillas son enteras o descascarilladas.
Pero en general, su cantidad es más elevada que la que presentan prácticamente todos los vegetales, y al menos la misma que las carnes y pescados.
Comparándola con las semillas de soja, las semillas de cáñamo contienen menos proteínas. Pero en su conjunto, muchos señalan que las de cáñamo son mejores.
Las semillas de cáñamo contienen hasta un 34% de proteínas, mientras que la soja contiene hasta el 40%. Pero en cambio la soja contiene niveles muy altos de tripsina.
La tripsina es una enzima digestiva y es secretada por el páncreas. Su función esencial es la de descomponer las proteínas en el intestino delgado.
Y los inhibidores de tripsina bloquean esa función enzimática. El resultado es que se descompone y se digiere menos cantidad de proteínas.
Las semillas de cáñamo en cambio no contienen inhibidores de tripsina. Así que todos los aminoácidos y todas las proteínas están a disposición del organismo.
Además, las proteínas de cáñamo vegano se ha descubierto que altos niveles de aminoácidos que contienen azufre como metionina, arginina y cisteína.
Esto es ideal en dietas proteicas como un complemento alimenticio, las típicas que se suelen usar para el aumento de masa muscular.
No todas las proteínas son fáciles de digerir dependiendo del alimento. Por ejemplo las legumbres y frutos secos contienen ácido fítico.
El ácido fítico hace que algunas proteínas no sean digeribles por el organismo, además de bloquear la absorción de nutrientes como el zinc y el hierro.
Las semillas de cáñamo contienen edestina y albúmina. Éstas son dos proteínas de alta calidad muy fáciles de digerir.
Vitaminas, minerales y fibra
Además, su alto contenido en vitaminas C y E, le otorgan propiedades antoxidantes que luchan contra los radicales libres y frenan el envejecimiento de las células.
También contienen vitaminas A, B1, B2, B3, B6 y D. En conjunto ayudan a fortalecer el sistema inmunológico, reduciendo el riesgo de infecciones y catarros. Y además ayudan a absorber el hierro, lo que previene la anemia.
Además de ácidos grasos, proteínas, vitaminas y minerales, las semillas de cáñamo también son una gran fuente de minerales.
Entre estos minerales destacan el potasio, magnesio y especialmente el hierro. Aproximadamente 100 gramos de semillas, aportan un 75% de los VRN (valor de referencia de nutrientes)
MINERAL | mg/100grs |
Fósforo | 1160 |
Potasio | 859 |
Magnesio | 483 |
Calcio | 145 |
Hierro | 14 |
Sodio | 12 |
Manganeso | 7 |
Zinc | 7 |
Cobre | 2 |
Y terminamos con la fibra. Las semillas de cáñamo tienen un alto contenido en fibra, representando hasta el 43% de su composición cuando se procesa en harina.
La fibra es una sustancia saciante y coadyuvante de la regulación de la función intestinal. Es perfecta para las personas que padecen trastornos intestinales o estreñimiento.
Además según la Fundación Española del Corazón, el consumo de fibra se asocia a la reducción de hasta un 59% de la mortalidad por enfermedad cardiovascular, respiratoria y cáncer.
Cómo sacarle el máximo provecho a las semillas de cáñamo
Las semillas de cáñamo tienen una textura mantecosa. Su sabor podría definirse entre nuez y almendra. Realmente son muy ricas.
En el mercado pueden encontrarse enteras o descascarilladas, siendo las más usadas en ingrediente para ensaladas, panes, lácteos, cremas, arroces, etc.
Si son enteras, se deben triturar bien ya que su cáscara es bastante dura e incómoda de comer para mucha gente. Otra opción es pelar las semillas en casa.
También se puede encontrar aceite de semillas de cáñamo. Cuenta con un sabor suave y conserva todas las propiedades de las semillas. Es sin duda una alternativa muy saludable a otros aceites.
Y por último, la harina de semillas es ideal para sustituir cualquier harina con gluten. Pizzas, bizcochos, rebozados… Incluso es un excelente ingrediente para hacer leche vegetal.
Las semillas de cáñamo, una sana elección desde la mañana
Ya sabemos que las semillas de cáñamo se conocen por la gran cantidad de propiedades y los beneficios de consumirlas. Pero, ¿Cómo se pueden consumir? Las semillas de cáñamo son una gran forma de obtener proteínas desde el desayuno.
Quizás pocas personas saben que es posible hacer una leche vegetal, como dijimos anteriormente, a partir de sus semillas de cáñamo rica en nutrientes. Para prepararlo, se deben usar las semillas enteras (que primero deben mantenerse en remojo durante aproximadamente 12 horas) o las semillas descascaradas. Así que simplemente hay que mezclar las semillas (250 gr) en 1,3 litros de agua y listo. El sabor ligeramente dulce permite reducir o eliminar todos los edulcorantes, pero nada impide darle sabor a nuestra bebida con algo de especia o cacao en polvo.
Una buena alternativa sería agregarlas a los cereales . Utilizar semillas de cáñamo en la cocina en este momento del día es dar un impulso de energía para nuestro cuerpo. Todo lo que tenemos que hacer es añadir un puñado de semillas enteras (si preferimos un desayuno crujiente) en los cereales y muesli, por lo general en la mañana.
Simplemente podemos verterlos en leche o yogurt. Añadir las semillas de cáñamo (1-2 cucharadas) yogur o leche vegetal con el fin no sólo para dar una textura agradable, sino que también proporcionan el típico sabor a nuez de las semillas.
Y si tenemos que picar entre horas y la otra, ¿por qué no añadir a los batidos de frutas que nos gustan? Utilizar semillas de cáñamo en la cocina para un batido o un batido es simple: sólo 1-2 cucharadas de semillas para en las bebidas que se deseen preparar y mezclar todo junto. Las semillas darán aún más cuerpo y cremosidad al batido. No olvidemos también la posibilidad de usarlos para la preparación de barras energéticas.
¿Cómo las semillas de cáñamo pueden ayudar a perder peso?
Ya sabemos que estas pequeñas joyas de la naturaleza son muy ricas en proteínas, ácidos grasos omega 3, 6 y 9, y enzimas. Ahora también sabemos que son una gran opción para estimular la pérdida de peso, revela Chris Conrad en su libro Healthy Hemp.
Las semillas de cáñamo contienen alrededor de 25 por ciento de proteína, como la soja e incluso mejor que la quinoa. La mayoría de los aminoácidos esenciales están presentes, además de tener valiosos minerales y cantidades de vitamina E.
¿Cómo consumir estas semillas de cáñamo para la pérdida de peso?
Las semillas de cáñamo al tener una gran cantidad de ácidos grasos esenciales omega-3 y 6 en la proporción ideal, rebajan la sensación de hambre en las personas que tienen sobrepeso o buscan reducir el consumo de calorías.
A estas pequeñas joyas se les relaciona con la regulación del estado de ánimo, el sueño, las reacciones ante el estrés y las hormonas.
El perfecto equilibrio de estos sistemas en nuestro cuerpo puede ser de gran utilidad para estimular la pérdida de peso.
Son una enorme fuente de proteínas para las personas que son vegetarianas o para los que comen carne.
La fibra que contienen estas semillas se mantienen en nuestro sistema durante más tiempo que otros alimentos por lo que es más difícil tener antojos además de proporcionarte más energía.
Las semillas de cáñamo se pueden consumir entre las comidas o platos más fuertes para lograr más rápidamente nuestros objetivos, además de tener un sabor muy apetecible.
Si queremos tener una figura más esbelta, las semillas de cáñamo son una gran ayuda para conseguir ese objetivo. Incluirlas en nuestra alimentación diaria es una muy buena idea que nuestro cuerpo pronto nos lo agradecerá, ya lo verás.
Las propiedades para la salud de las semillas de cáñamo son tan altas que probablemente sea uno de los pocos súper alimentos que hace honor a su nombre.
Conclusión
Las semillas de cáñamo se consideran un superalimento. Sin ricas en fibra, proteína vegana, vitaminas, minerales y ácidos grasos esenciales. Además son ricas y fáciles de añadir en cualquier plato de una forma u otra. Añádelas a tu dieta y te sorprenderás. 2