La aparición de plantas de cannabis macho es habitual en estas fechas cuando se cultiva con semillas regulares
La reacción lógica, es cortarlo inmediatamente, incluso si es la única planta que tenemos.
Pero es interesante antes de hacerlo, valorar otras posibilidades que te contaremos a continuación. Ya verás como merece la pena.
Las plantas de cannabis macho
El polen de una planta de cannabis masculina puede recorrer varios miles de metros en condiciones favorables. Y polinizará a su paso cualquier planta de cannabis femenina.
El resultado será que muchos posibles cultivadores cercanos, sufrirán el desconocimiento de una sola persona. Sus cogollos se llenarán de semillas. Y es algo que nadie desea.
Cuando detectamos una planta de cannabis macho, tenemos otra opción que es hacer una polinización controlada en algún cogollo de alguna planta hembra y conseguir unas pocas semillas para la próxima temporada.
Si se hace bien, no existirá ningún tipo de riesgo y tan sólo se polinizará el cogollo o cogollos seleccionados. Para ello, te daremos algunos consejos con los que nada o prácticamente nada fallará.
Identificación de la planta de cannabis macho
Lo primero lógicamente, es que tiene que darse el caso de que alguna de las plantas que estemos cultivando sea macho.
Diferenciar una hembra de un macho es muy sencillo y cuánto antes lo hagamos, más seguridad tendremos en el cultivo.
Así que una vez detectado el macho con sus primeras preflores, es cuando se debe tener una mayor vigilancia. Las flores de los machos irán mostrando indicios que dirán en qué momento han alcanzado la madurez.
En un principio estas flores son redonditas y con forma de pica. Primero aparecen en los nudos, y más tarde en las apicales formando racimos.
Desde que aparece la primera flor macho hasta que ésta alcanza la madurez, que es cuando se abre y suelta el polen, pasarán varios días.
Normalmente cuando esto sucede, las plantas hembra ya cuentan con pequeños cogollos que pueden recibir este polen y fecundar las futuras semillas.
Puesto que tenemos varios días por delante desde la detección de estas primeras flores hasta su madurez, podemos concentrar la vigilancia en una única rama en lugar de vigilar toda la planta.
Así que seleccionamos una rama saludable, y todas las demás las sometemos a una poda severa cortando a ras del tallo principal.
Debemos tener en cuenta que una sola flor contiene el polen suficiente para polinizar una planta entera de gran tamaño.
Por otro lado existe la teoría que un cultivo con plantas hembra y macho, las hembra producen mayor cantidad de cálices y de mayor tamaño.
Esto podría suceder en un intento de las hembras por recibir el polen de los machos presentes. Se traduciría en cogollos de mayor tamaño.
Retirar las flores de la planta de cannabis macho
Cuando ya veamos que las flores de la planta de cannabis macho están hinchadas, estará cerca el momento en que comiencen a abrirse y expulsar el polen. Éste es el momento más delicado y no podemos descuidarnos.
Como precaución, deberíamos retirar la planta macho a un lugar lo más alejado posible y con poca ventilación.
Incluso si podemos, la meteremos al interior de nuestra vivienda o de algún lugar más seguro como una bodega o similar. Si la hemos podado para conservar una única rama, no será complicado.
Otra opción es cortar la rama con las flores a punto de abrirse, y meterla en un vaso con agua. De este modo aguantará el tiempo suficiente hasta que las flores terminen de madurar y comiencen a abrirse.
Para recoger el polen, puedes usar una bolsita zip, un botecito de cristal o plástico… cualquier recipiente donde lo podamos recoger de una manera segura será válido.
Con las flores ya abierta, tan sólo hace falta golpearlas ligeramente boca abajo para que el dorado polen se desprenda de la flor.
Cómo polinizar una planta hembra con polen macho
Existen varias maneras de realizar una polinización controlada, nosotros os sugerimos que uséis agua destilada o mineral, y una jeringa pequeña.
En el propio recipiente donde has recogido el polen, añade agua. Después ciérralo y agítalo bien para que se mezcle. Y luego llena la jeringa con la mezcla.
Lávate bien las manos e incluso cámbiate de ropa tras manipular el polen de un macho. Realmente es muy fácil polinizar involuntariamente una planta hembra.
Escoge algún cogollo de la planta que vayas a polinizar e identifícalo con alguna etiqueta, alambre o cordel. Con una bolsa o cualquier otro plástico será bastante sencillo aislar ese cogollo de todos los demás.
Algún buen cogollo de las zonas medias o bajas son los mejores, además puedes flexionar la rama para que sea más sencillo.
Y para terminar y siempre con cuidado, rocíalo con el contenido de la jeringa. Deberás sacudir para eliminar el exceso de agua y polen, siempre con mucho cuidado de que este agua no caiga sobre otros cogollos.
También se puede usar la mezcla de polen y agua en un pulverizador y rociar el cogollo. O usar un pincel, tanto con el polen seco como con mezclado con agua.
Para terminar tapa el cogollo polinizado con una bolsa. Procura evitar un efecto invernadero, por lo que la polinización hazla mejor al anochecer para dejar toda la noche el cogollo tapado.
Ya tan sólo quedará esperar a que las semillas maduren para poder cosecharlas, normalmente ya cuando se coseche entera la planta. Mételas en un bote y consérvalas en un lugar oscuro, fresco y seco.