Aunque todavía faltan meses para que comience la temporada de exterior, cualquier cultivador que exclusivamente cultive al aire libre nunca deja de pensar en el próximo cultivo. Cuando además el cultivo se realiza en guerrilla o algún lugar alejado de la vivienda, siempre se tiende a darle más vueltas a la cabeza tratando de buscar el sitio más discreto y seguro. Es por ello que aunque temprano, hay muchas cosas que podremos ir adelantando para una vez llegado el momento, comenzar con el mejor pie.
Ahora mismo por ejemplo es un buen momento para adquirir semillas, abonos, macetas u otras cosas necesarias para el cultivo, ya que las rebajas también han llegado a los Grow Shops. Todo lo que necesitaremos dentro de unos pocos meses para arrancar el cultivo, lo podremos comprar ahora con buenos descuentos. Y si no todo, al menos una buena parte.
Como decíamos, buscar un lugar en exterior no llega a ser fácil. Cuando ya se han realizado varios cultivos, normalmente se opta por usar el mismo lugar temporada tras temporada. Cuando es el primer cultivo, cualquier sitio nos parecerá un sitio inseguro aunque no lo sea. Por éso con tiempo por delante, podremos buscar varios lugares y finalmente quedarnos con el mejor, o con los dos mejores. Nunca está de más contar con cultivos separados. Si por algún motivo uno es descubierto o arrasado por animales salvajes, quedará otro u otros.
Aunque realmente el mejor lugar no sabremos cual es hasta que cosechemos, algunos aspectos que se deben tener en cuenta con la orientación, la accesibilidad y por supuesto la discreción. Si tratamos con monte alto, es decir un monte con árboles de gran tamaño, siempre buscaremos algún claro situando las plantas en orientación sur ya que estarán más expuestas al sol. Si tratamos con monte raso, es decir matorrales de tamaño medio, una ladera situada también en orientación sur será la mejor opción.
En cuanto a la accesibilidad y discreción, el lugar o lugares seleccionados deberían tener al menos dos accesos. Si por cualquier motivo estamos en el cultivo y debemos irnos rápidamente por alguna amenaza, lo que menor querremos es encontrarnos de frente con esa amenaza. También podremos cerrar los pasos con maleza a nuestra salida y/o entrada. Si la encontramos desplazada, sabremos que alguien puede haber descubierto el cultivo, o al menos ha rondado por esa zona.
A estas alturas si hacemos alguna poda a algún árbol o limpiamos maleza que pueda estorbar a las plantas que pondremos, llamará menos la atención que si lo hacemos en primavera. Y aunque llegado el momento tengamos que limpiar algo, no será comparable a una gran labor de clareo con los árboles y arbustos brotando o con ya hojas. Sin duda llamará más la atención de los curiosos, que al acercarse pueden encontrarse con nuestras plantas.
De momento el terreno no es necesario trabajarlo, quedan muchas lluvias por caer y cualquier agujero que hagamos podremos convertirlo en un barrizal. Para ello tendremos tiempo más adelante, cuando el cultivo esté próximo a comenzar. Aunque una buena opción será la de cubrir la zona donde irán las plantas con algún tipo de saco de material reciclable. Ésto evitará que crezcan malas hierbas, además que comprobaremos como beneficiosas lombrices se acumulan bajo él.