El cannabis avanza en Latinoamérica a paso de velocista, y eso que todavía no han hecho nada los expertos en la materia. De todos los jardines del continente más joven del planeta hay uno que ha vivido más activo que todos, aunque en la clandestinidad.
Se trata de Paraguay, una verdadera meca regional en el cultivo de cannabis y proveedor histórico para los usuarios del Cono Sur.
También, uno de los principales responsables de los perjuicios a la salud pública que la industria de la marihuana tuvo en el continente. Y gracias a la oferta del prensado.
El producto originado en Paraguay es una compresa de flores, ramas, hojas y tierra conservado con químicos tóxicos para la salud. Aunque rentable en un contexto de ilegalidad.
Por suerte pasaron los años y América refinó sus consumos (al menos en cuanto al cannabis).
Ahora, el diario ABC da cuenta de un hecho histórico: Paraguay, por fin, discute una despenalización de su flor más bella.
“La Cámara de Diputados estudia en su sesión ordinaria del miércoles, convocada para las 08:30, el proyecto de ley que despenaliza el autocultivo de la marihuana para uso medicinal”, informaron los canales oficiales.
PANORAMA OSCURO
El proyecto de ley cuenta con el dictamen de rechazo de la Comisión de Lucha contra el Narcotráfico, presidida por el diputado Tito Ibarrola (PH).
Sus miembros aconsejan ratificarse en el rechazo inicial y para archivar el proyecto precisarán de 53 votos.
La norma señala que el que tuviere en su poder sustancias a las que se refiere a la ley, que el médico le hubiere recetado, o aquel que las tuviere para su exclusivo uso personal, estará exento de pena.
Pero si la cantidad fuere mayor de la recetada o la necesaria para uso personal, se le castigará con penitenciaría de dos a cuatro años y el decomiso.
No será punible la tenencia de cannabis o sus derivados para uso exclusivamente medicinal.
Claro que en los casos en que el tenedor porte un certificado médico visado por el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social.
El mismo debe señalar que padece de dolencias tratables con cannabis medicinal, dice la norma que, lamentablemente, podría no ser tratada.
RECHAZO
La Comisión Antidrogas del Parlamento paraguayo es la principal opositora de lo que fue llamada la ley “Mamá Cultiva”.
Es que es esa asociación civil la pionera en promover el autocultivo del cannabis con fines medicinales.
En una reunión virtual semanas atrás, la Comisión decidió rechazar el proyecto de ley que busca modificar varias disposiciones de la legislación antidrogas.
El fin de la iniciativa era autorizar el autocultivo medicinal del cannabis para tratar determinadas patologías. Informó en un informe de prensa la Cámara de Diputados.
Los diputados adoptaron esta postura teniendo en cuenta las recomendaciones del Ministerio de Salud Pública, la Fiscalía, la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) y los gremios de médicos.
“Básicamente lo que estas instituciones han sido aspectos relacionados con la Constitución Nacional, como así también a tratados internacionales y leyes vigentes que ya prevén la distribución gratuita de la producción y distribución del cannabis con fines medicinales”, expresó el presidente de la Antinarcóticos de la Cámara Baja, el diputado por Central Tito Ibarrola (PPH).
El dictamen deberá ser puesto a consideración del pleno cuando los diputados estudien el proyecto de ley en cuestión.
La propuesta es impulsada por la Organización Mamá Cultiva Paraguay y fue presentado por el senador Víctor Ríos (PLRA).
Pretendía permitir el autocultivo exclusivamente a pacientes que cuenten con una receta visada y registrada en el Ministerio de Salud.
El diputado Ibarrola recordó que desde la Comisión ya instado al Poder Ejecutivo, a través de una declaración, a proveer de manera inmediata la medicina a las personas que lo necesitaban y que está contemplado en una ley vigente pero que aún no se cumple.
Esta última legislación autoriza a que solo las farmacéuticas pueden ser habilitadas a importar materia prima o producirla localmente para preparar medicamentos a partir de cannabis.