El debate sobre la flexibilización en el consumo y producción de marihuana (cannabis) aumenta a paso acelerado tanto en América Latina, EEUU como en algunos países de Europa.
En 2011, el expresidente mexicano Vicente Fox (2000-2006), junto a otros exmandatarios latinoamericanos como Fernando Henrique Cardoso, César Gaviria, Ricardo Lagos y Ernesto Zedillo, suscribieron un documento donde junto con declarar que “la guerra global contra las drogas ha fracasado”, pedían “terminar con la criminalización, la marginalización y la estigmatización de las personas que usan drogas, pero que no hacen ningún daño a otros”.
El pasado 19 de septiembre en Ciudad de Guatemala, cancilleres, viceministros y representantes de 32 de los 34 países de la Organización de Estados Americanos (OEA) acordaron flexibilizar las convenciones internacionales que prohíben el uso de cannabis y dar una visión humanitaria centrada en la salud del consumidor, durante la 46 Asamblea General del organismo.
Así, la OEA reafirmó la importancia de la cooperación hemisférica e internacional, para conjuntamente hacer frente al problema mundial de las drogas, promoviendo y fortaleciendo políticas integrales y, cuando corresponda, la modernización y profesionalización de las instituciones de gobierno.
El Gobierno uruguayo desde hace dos meses registra a aquellas personas que desean cultivar marihuana en su domicilio para su consumo personal, de acuerdo con la ley sancionada en diciembre de 2013 que habilitó el mercado legal de la marihuana en el país.
El Parlamento uruguayo sancionó el 10 de diciembre una ley que transformó a Uruguay en el primer país del mundo en tener un mercado legal de esta hierba desde su siembra hasta su venta al público, que se realizará en una red de farmacias.
En EEUU, miembros de una organización a favor de la marihuana medicinal señalaron que en un futuro la industria derivada de la comercialización de esta planta para fines médicos podría ser un motor económico para el país.
Los residentes de Miami deberán decidir en las próximas elecciones de noviembre si aprueban el uso medicinal de la marihuana, en un referendo en el que la propuesta deberá lograr un mínimo de 60 por ciento de votos para salir adelante.
Los adeptos a la marihuana esperan que el resto de EEUU siga el ejemplo de Colorado, primer estado norteamericano en permitir el uso recreativo de esta droga, aunque los opositores a la medida aseguran que seguirán luchando para impedirlo.
Al comenzar el año, se abrieron los primeros “coffee shops” en Colorado, donde -tras una ley aprobada en noviembre pasado- los consumidores pueden comprar legalmente, siempre que tengan al menos 21 años, hasta 28 gramos de cannabis en cada visita.
El estado de Washington, en la costa del Pacífico, se sumará a Colorado en seis meses, a pesar de que, según la ley federal, la marihuana sigue siendo ilegal y considerada tan adictiva como la heroína, el éxtasis y el LSD.
El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, recientemente se pronunció a favor del uso terapéutico de la marihuana en Colombia y reiteró que la guerra mundial contra las drogas “ha fracasado”, durante un foro sobre la política antinarcóticos.
“Vemos con buenos ojos la iniciativa sobre la utilización medicinal y terapéutica de la marihuana”, aseguró el Mandatario, dando así su apoyo público a la iniciativa para permitir este uso del cannabis, propuesto por el oficialista Partido Liberal para esta legislatura en el Congreso, que inició sesiones el 20 de julio.
Con algunas resistencias dentro del oficialismo, el Gobierno argentino habría emprendido nuevamente la tarea de conseguir la despenalización del consumo de drogas. Lo que diferencia a esta iniciativa de los fracasos anteriores (en 2009 y 2012) es que el proyecto, desde su estado de embrión, ya cuenta con el respaldo de la presidenta Cristina Fernández, según el diario La Nación.
La Mandataria ya habría dado la luz verde para comenzar a trabajar en la propuesta, que espera ser discutida en el Congreso de Buenos Aires antes de fin de año.
Por otra parte, un proyecto de ley presentado por un diputado del oficialista Partido Acción Ciudadana (PAC) busca permitir la investigación, producción y regulación del cannabis y el cáñamo para uso medicinal en Costa Rica.
En Bolivia, el Gobierno del presidente Evo Morales está en contra la legalización de las drogas al igual que los candidatos presidenciales, pero el Ejecutivo insiste en que se reconozca a nivel mundial el acullico de la hoja de coca.
El nuevo mercado europeo
La geografía del nuevo mercado europeo es todavía imprecisa, porque las estadísticas son muy recientes, la recogida de datos no está homologada y coexisten cultivos en invernadero y cultivos de exterior, estos más extendidos en países del sur de Europa, entre ellos España, donde a veces se ocultan entre plantaciones de maíz u otros productos agrícolas.
Los expertos coinciden en que los dos mayores productores de marihuana son Holanda y Reino Unido, donde se han localizado mayor número de plantaciones. Por detrás se situarían, sólo en 2012, Polonia y Bélgica, con entre 1.200 y 1.500 centros de producción descubiertos.
El caso belga tiene su explicación: debido a algunos cambios legislativos que penalizaban el cultivo, los productores holandeses han trasladado algunas de sus plantas a Bélgica, para luego importar la producción para sus “coffee shops”.
En Hungría, el consumo de marihuana procede de distribuidores de nacionalidad vietnamita que han extendido cultivos en algunas zonas de Eslovaquia, Chequia y Polonia. Así, tanto Eslovaquia como Chequia se han convertido en países exportadores, entre otros lugares a Alemania.
La Policía alemana destaca la existencia de organizaciones de ciudadanos vietnamitas dedicadas al cultivo de marihuana en invernaderos. Además se han encontrado organizaciones de vietnamitas en Bélgica, Alemania, Francia y el Reino Unido.
Se trata de grupos con una estructura muy cerrada y jerarquizada, que disponen de especialistas propios, como electricistas, fontaneros y jardineros, y explotan a inmigrantes ilegales para el resto de funciones.
El mercado europeo del cannabis “ha cambiado radicalmente”, indica un informe de Europol.
“Hoy se consume más marihuana que hachís en la Unión Europea. Cada vez más, la marihuana se produce en los mismos países donde es vendida y consumida. En tanto su producción se incrementa, han aparecido señales de que también se exporta a países vecinos”, dice el informe.
Los jóvenes
El último Eurobarómetro encargado por la Comisión Europea sobre la relación entre juventud y drogas, reveló que, aunque siguen siendo mayoría los europeos de entre 15 y 24 años que se oponen a legalizar el cannabis, el porcentaje que pide su regulación ha pasado del 34 al 45 por ciento en los tres últimos años.
En España, la variación es incluso superior: del 35 por ciento de 2011 al 47 por ciento actual. De seguir esta tendencia, en la encuesta de 2017 serán mayoría los jóvenes españoles y europeos que pidan la legalización, tal y como ya sucede en República Checa, Eslovenia, Italia, Irlanda, Polonia, Eslovaquia, Austria y Holanda -el único Estado miembro en el que es legal-.
En 2013, según una encuesta de Gallup, los estadounidenses a favor de la regulación de esta sustancia (el 58 por ciento) ya superaban con creces a aquellos que optaban por que su consumo permaneciera en la ilegalidad (39 por ciento). Fuente
