La sociedad argentina parece necesitar que sus celebridades se expresen antes de formar una opinión sobre cualquier cosa. Como si la opinión pública necesitara de constantes ejemplos antes de abrir la boca para, simplemente, dar su punto de vista. En este caso la polémica se abrió en uno de los programas de TV más vistos del fin de semana, los almuerzos de Mirtha Legrand, con una retirada, pero respetada, actriz llamada María Valenzuela.
La mujer que protagonizó numerosas tiras televisivas que terminaron en éxitos estuvo durante mucho tiempo de su vida sumida en un pozo depresivo del cual le ha costado salir. Los lamentos le han costado perder 10 kilos.
“Venía de una seguidilla y se sumó la muerte de un amigo, que era como mi hermano. Estaba con un negocio que tenía que ver con una hotelería que iba a hacer, cerca de Luján, Villa Ruíz, y llegó un momento que no se pudo seguir por la muerte de Gaspar, y me tiré en la cama. Un íntimo amigo llamó a mis hijos, se aparecieron y fui a ver a un psiquiatra. Después, cuando tenía que volver a verlo, me agarró un ataque de pánico del que no podía salir”, manifestó la reconocida actriz de “Son de Fierro”, “Como pan caliente” y “Campeones de la vida”, todas tiras que han superado los 30 puntos de rating diarios, o sea, casi tres millones de telespectadores.
Pero su presente es mucho más agradable ahora, y así lo hizo saber la nonagenaria conductora, quien le espetó: “Qué lindo verte tan bien María, tan renovada”. El secreto de Valenzuela es bien conocido por todos: el cannabis.
“Estoy con una sola medicación y con gotas de cannabis”, reveló, despertando el asombro y la curiosidad del resto de los invitados, al tiempo que contó que sigue teniendo ataques de pánico.
“Los ataques de pánico simplemente hacen que quiera meterme en mi casa, que es mi refugio y sé que ahí estoy segura. Ahí no me pasa nada, y sé que estoy insegura en la calle. Entonces lo primero es irme a mi casa”, reveló. Además, reconoció que suele llorar en esos momentos: “Es una angustia, que termina en un ataque de pánico”.
“¿Y cómo lo resolvés?”, le preguntó la conductora. “Y, esperando a que pase”, contó, un tanto resignada. “Le estoy escapando un poco a la terapia”, agregó.
Para la depresión y para el apetito “Me hacen muy bien…”
Sobre el cannabis medicinal, detalló: “Me hacen muy bien para la depresión y para el tema alimenticio. Son tres gotas a la mañana y tres gotas a la noche. ¿Vos sabés que gente de 60, 70 años, toma gotas de cannabis por el tema de los huesos y de los músculos? Está comprobado que hace muy bien”. “¿Se consigue fácilmente? Creo que es bastante caro”, quiso saber Legrand. La actriz le respondió: “Sí, creo que viene de Chile, el que yo compro viene de Chile”.
Ni Valenzuela ni Legrand recordaron que hace más de un año existe en Argentina una ley creada para garantizar la provisión de aceite a niños y niñas que padecen epilepsia refractaria, sin embargo, la norma es apenas una letra escrita que no se cumple, y el resto de las patologías que el cannabis podría tratar, de momento son ignoradas por las autoridades.
Por Rama
