La poda FIM es una técnica de alto rendimiento que se utiliza en cultivos cannabis. Aprende a hacerla con los consejos que te damos en este post .
Las técnicas de cultivo se emplean principalmente para aumentar los rendimientos de las plantas de cannabis. Y una de las más espectaculares es de la que os hablaremos hoy: la poda FIM.
¿Qué es la poda FIM?
La poda FIM nace como tantas otras, tras un error por parte del cultivador. Se trata de un tipo poda a plantas de cannabis que cuando se hace bien, puede aumentar las cosechas de manera espectacular.
FIM es el acrónimo en inglés de “Fuck, I missed!”. Se podría traducir al español como ¡joder, la cagué!. Cuenta la leyenda que se le atribuye a un cultivador estadounidense a finales de los años 90.
Un día mientras se encontraba realizando unas podas a sus plantas de marihuana de interior, podó accidentalmente una de las plantas por donde no era.
Su primera reacción fue la de exclamar el ya famoso Fuck, I missed!. Pero pese a todo, dejó que la planta continuase su crecimiento.
Y sorprendentemente, en poco tiempo descubrió que esa poda accidental obtuvo unos resultados tan inesperados como impresionantes.
La poda apical en cultivos cannabis
Para comprender un poco mejor en qué consiste la poda FIM, primero debemos hablar de la poda apical. Ésta es la poda más típica y común empleada por los cultivadores.
Consiste en como se puede intuir, suprimir la punta apical de la planta. Esta apical contiene unas hormonas inhibidoras del crecimiento que impiden que las ramas inferiores la lleguen a super a en altura.
En una planta que crezca de manera natural, podremos comprobar como ninguna rama supera en altura a la punta principal o apical.
Cuando se suprime la apical con una poda o simplemente la situamos a una altura por debajo de las ramas inferiores mediante alguna técnica de guiado, las ramas secundarias lucharán por ser puntas dominantes.
Con esto se consigue un creciendo de una forma más homogénea entre ellas. Además de reducir la altura final de la planta, se favorece su desarrollo horizontal.
En lugar de una gran apical con un gran cogollo, tendremos muchas apicales con cogollos de menor tamaño pero más numerosos.
La poda FIM en cultivos cannabis
Con la poda FIM se pretende lo mismo que con la poda apical. Es decir, reducir el desarrollo vertical y favorecer el desarrollo horizontal o a lo ancho.
Pero en lugar de podar o suprimir la apical entera, lo característico de esta técnica es que se elimina tan sólo una parte del brote apical.
QUIZÁ TE INTERESE:
Cultivo en Main-Lining: hazlo en pocos pasos
Si seccionamos una apical a la mitad, podremos ver que las hojas exteriores protegen a muchas más hojas interiores en torno al tallo central.
Algo similar a un repollo si lo cortamos a la mitad, con decenas de hojas hasta llegar al corazón. Además de que por su tamaño se podrá comprobar mejor.
A medida que la planta de marihuana crece las hojas de la apical se van abriendo, la distancia internodal comienza a ampliar y de cada nudo nacen dos ramas en un ciclo continuo hasta la fase de floración.
Un brote apical de una planta de cannabis lo forman aproximadamente unos 5-8 nudos y el doble de hojas, concentrados en apenas un centímetro.
Cuando en este brote realizamos un corte de aproximadamente el 70% de su longitud, tan sólo suprimimos las puntas de las hojas pero no los nudos. Y estos nudos quedarán al aire y comenzarán a desarrollarse inmediatamente.
En pocos días muchos brotes comenzarán a verse, todos ellos desarrollándose a un mismo ritmo. Estando situados a la misma altura, serán todos dominantes.
El resultado cuando la poda FIM se hace bien, puede ser de 12 ramas o más. En el peor de los casos, conseguiremos unas 6-8 ramas.
Pero se debe siempre tener en cuenta que cortar exactamente el 70% es muy complicado. Y en gran medida también influye la variedad que se cultive.
Como siempre, la propia experiencia ayudará a hacer una buena poda apical. Y aún con experiencia, puede que no salga exactamente como pretendemos. Recordemos que esta técnica nace de un error.
¿Cuándo realizar la poda FIM en cultivos cannabis?
La poda FIM siempre es mejor hacerla durante las primeras semanas desde que la semilla ha germinado. Si se trata de un esqueje, antes de que alcance los 30cm.
El motivo es la de aprovechar más el tiempo. No tiene sentido esperar a que la planta alcance unos 40 cm o 50cm, que le llevará más de un mes.
En la poda FIM lo interesante son las ramas resultado de la poda. Todas las ramas inferiores se deben podar ya que restarían energía a las dominantes.
Así que dejar que la planta tenga 7-8 nudos para hacer una poda FIM y eliminar todas las ramas inferiores, pudiendo hacer lo mismo 3 semanas antes… pues sí, es una pérdida de tiempo innecesaria.
Lo que sí conviene es dejar mínimo un nudo inferior antes de realizar la poda FIM. El motivo es que si en el peor de los casos algo nos saliese mal, al menos nos garantizamos un par de ramas que continuarán su crecimiento.
En cuanto veamos que la poda surge efecto, pasados unos días, esas ramas inferiores ya las podemos eliminar tranquilamente.
La poda FIM tiene también algún inconveniente. Dado el gran número de ramas que se pueden llegar a conseguir, éstas tienden a ser más delgadas y flexibles.
En la fase de floración puede ser necesario el uso de soportes para que no terminen cediendo con el peso de los cogollos. Aunque como siempre, se mejor adelantarse y realizar un entutorado durante la fase de crecimiento.
La poda FIM puede que sea la mejor opción para realizar cultivos en SCROG. No se tardará mucho en cubrir una gran superficie de cultivo. Y además la malla a su vez servirá como soporte.
¿Cómo realizar la poda FIM en cultivos cannabis?
- Usa siempre unas tijeras muy afiladas y previamente desinfectadas. Los cortes deben ser limpios y evitar cualquier tipo de infección por patógenos. Con un algodón y un poco de alcohol, limpia bien las tijeras.
- Con dos dedos, sujeta la apical de la planta firmemente. Hazlo por la base, dejando que sobresalga aproximadamente un 70-60% de la misma. Servirá además de apoyo a las tijeras y marcarán la zona de corte.
- Corta por la zona que creas aproximada con decisión. Y ya está. Se paciente y en unos pocos días verás como en la zona podada se aglutinarán un gran número de brotes que comenzarán a crecer a un ritmo muy uniforme.