Un extraordinario hecho se dio lugar el pasado día 18 de agosto en la localidad de Pontevedra, en el noroeste de España, cuando alrededor de la una y media de la tarde, la Policía Local de esta ciudad gallega recibía el aviso de una o varias personas que proferían gritos y alertaban de la posibilidad de un intento de suicidio en un edificio del centro de Pontevedra.
Al lugar se desplazaron varias patrullas de agentes que al llegar se encontraron con un escenario muy diferente. Momentos antes, el propietario de un Kia y autor de llamada, contaba que estaba estacionado y en el interior del vehículo cuando dos macetas se precipitaron de un séptimo piso, impactando contra la carrocería y el parabrisas que quedó lógicamente destrozado.
«Si llego a estar bajando del coche, me mata», aseguraba el pontevedrés a los miembros de la Policía Local que no daba crédito a lo ocurrido. Cuando los agentes comenzó a tramitar el correspondiente atestado por una posible infracción por daños, se fijaron en el contenido de las macetas, que contenían plantas de cannabis, por lo que dio aviso a la Policía Nacional para que continuase con las investigaciones por si los hechos fueran constitutivos de algún delito o infracción por cultivo o tenencia de cannabis.
En el registro descubrieron en total 5 macetas más con plantas de cannabis, además de conseguir esclarecer un poco más el desarrollo de los acontecimientos. Y es que al parecer, durante una acalorada discusión entre dos personas, una de las dos partes en un momento de ira decidió a tirar la afición de la otra parte desde el balcón sin valorar las posibles consecuencias.
Aunque afortunadamente ninguna de las dos macetas arrojadas al vacío causó daños personales, el parabrisas y el techo del vehículo Kia que se encontraba estacionado justo debajo sí tuvo daños considerables al que tendrán que hacer frente estas dos personas.