Por Alberto Albarracín.- En España esta prohibido el cultivo, tenencia y la venta de cánnabis, sin embargo estamos catalogados como país permisivo.
En Holanda esta legalizada la venta pero no el cultivo y se persigue activamente.
En Italia se persigue muchísimo al usuario lúdico pero se tolera el consumo del terapéutico, incluso en algunos casos, el estado paga el tratamiento del paciente.
Esto provoca un comercio internacional absurdo como el que se detalla a continuación:
1º El cánnabis es cultivado ilegalmente en España
2º Se exporta ilegalmente internacionalmente hasta Holanda
3º Se esteriliza y se etiqueta como medicamento allí y se exporta ahora legalmente a Italia
4º Italia compra ya un medicamento que grava sensiblemente (se dobla el precio) y vende finalmente en sus farmacias.
Como resultado se encarece increíblemente la sustancia, llegando a venderse en Italia por mas de 20€ el gramo.
Cabe preguntarse si este modelo es sostenible y sustentable y observar que es necesario una nueva legislación internacional de drogas.
La guerra contra el narcotrafico ha fracasado. Si se observan las leyes del mercado sería absurdo pensar que vamos a acabar con la demanda intentando ilegalizar la oferta y esto solo produce el encarecimiento de la sustancia y además muere mucha gente. (Véase la ley seca)
Las sociedades evolucionamos y debemos emanciparnos de estados paternalistas que velan “por nuestra salud pública” recaudando multas de los consumidores.
La prohibición cuesta muchísimo dinero al estado, dinero que recordemos sale de nuestros impuestos.
Al redactor de estas lineas se le olvidó un grifo de agua abierto y cuando llegó a casa había más de 15 agentes para detenerle, da igual que luego le archivaran el caso.
¿Quizá la policía sospechaba que vendía la droga que cultivaba en su casa? ¿Tal vez tuvieran algún indicio de trafico? No señores. Es el procedimiento normal al
encontrar cualquier cultivo. Por este hecho fui privado de libertad 16 horas.
En la detención me invitaron a abandonar mi domicilio después de identificarme y mostrar mi contrato de alquiler para luego decirme en plena calle que así estaban las cosas:
No me dejaban llamar a mi abogado
No estaba detenido
Debía de firmar la hoja que les daba permiso de entrada en el domicilio o me dejarían esposado en la puerta de mi casa las horas que fuera necesario informando a los vecinos de que era un problema de drogas hasta que consiguieran la orden.
¿Es necesario hacer pasar a los consumidores por esto? ¿Es necesario violar sus derechos constitucionales? ¿Es así como piensa el estado resolver un problema de salud pública? ¿Piensa alguien que yo voy a cambiar de actitud siendo reprimido ilegalmente y sin argumentos? Más bien es evidente que al estado le importa un pimiento mi salud publica y las de mis vecinos y se hace cada vez más evidente de que se está encubriendo un negocio.
Un negocio con nuestra salud, porque ¿quien va a consumir una aspirina de BAYER si se fuma un porrito de marihuana que cultiva en la maceta del alfeizar y no gasta un duro? Y no hablemos de otros tratamientos mucho más caros para oncológicos, analgésicos,anti inflamatorios, anti depresivos.
El premio nobel de medicina Richard J Roberts ya ha denunciado que las farmacéuticas investigan para vender medicamentos paliativos pero que no les interesa hacer vacunas o curas eficaces, prefieren tener a enfermos crónicos que pasan a ser consumidores vitalicios de su producto.
Estamos observando que nuestro estado tiene bastantes carencias para con sus ciudadanos, mientras reestructuramos nuestro sistema político corrupto es evidente que tendremos que organizarnos en asociaciones para luchar por nuestros derechos y nuestras libertades hasta que la legislación se adapte a nuestra realidad social.
Alberto Albarracín Page.
Cultivador y consumidor de cánnabis.
Algunas Referencias:
Video detención trafico España Holanda – http://www.youtube.com/watch?v=_m1zOzyM5ac
Premio Nobel de medicina – http://actualidad.rt.com/actualidad/view/93667-nobel-medicina-enfermedades-farmaceuticas-roberts
Clase sobre prohibición por el profesor Huerta de Soto, Catedrático de Economía Política en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid – http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=_Jix6k2NhS4
