Existen muy claras razones para legalizar la marihuana medicinal: la salud, el medio ambiente y la economía.
La marihuana medicinal ya es utilizada legalmente en muchos países, y otras tantas naciones están a la espera de que se materialicen las distintos proyectos de ley que la autorizan bajo prescripción médica. La corriente mundial que legaliza el cannabis medicinal ya es un hecho y muy pronto prácticamente se dará e implantará en los cinco continentes.
California fue el primer territorio en el mundo que legalizó la marihuana medicinal y fue el estado norteamericano que abrió la puerta para que otros muchos territorios conocieran las bondades de esta planta para la salud. Anteriormente cualquier connotación de la palabra marihuana era asociada a una droga diabólica que era capaz de acabar con una persona hasta el punto de hacerla inservible para funcionar en la sociedad moderna.
El comienzo de la legalización del cannabis medicinal dio como resultado que muchas personas conocieran las bondades para la salud de su consumo y la ayuda de esta planta para poder contrarrestar los efectos perniciosos de los fuertes tratamientos por combatir otras enfermedades. Este conocimiento por parte de los pacientes de las bondades de la planta, ha corrido como la pólvora y gracias a los casos personales e internet, en la actualidad ya son miles y miles de personas las que consumen o usan cannabis por distintas enfermedades o tratamientos.
El aparente y enorme consumo de esta sustancia natural en muchas partes del mundo, hace que muchísimas personas se beneficien de sus bondades terapéuticas. A su vez y además de la salud, la economía también se está beneficiando de este gran consumo por parte de pacientes y personas, que buscan tratarse con medios mas naturales alejándose cada vez más, de otros medicamentos que si que es cierto que curan enfermedades, pero pagando un alto peaje para nuestra salud.
Las investigaciones y sus gratos resultados para la salud con el cannabis no dejan de sorprendernos casi a diario, y por lo tanto, entendemos que cada vez más personas irán alienándose con el consumo medicinal de la planta.
A la vez que nuestra salud sale ganando con su consumo para ciertas enfermedades o tratamientos, la economía también se encuentra con otra fuente de ingresos que en antaño prácticamente recaía en su totalidad en las arcas de un mercado negro. No solo el beneficio de la legalización para uso médico recae en la venta al por menor de cannabis, su cultivo e industria transformadora y especializada son otros sub sectores que también acarrean un gran beneficio económico.
En las zonas rurales siempre se buscan cultivos que puedan asegurar un mantenimiento en el tiempo de la economía local. El cultivo de cannabis puede ser la fuente esperada por estas comunidades rurales que siempre son las mas golpeadas cuando las crisis asoman. La gran demanda que se está produciendo en los territorios y zonas donde ya se ha legalizado la marihuana medicinal augura también, la misma demanda donde posteriormente se legalice.
Esta gran demanda del cultivo de cannabis, tanto con THC como con bajo contenido en THC (sustancia psicoactiva de la planta), tiende exponencialmente a crecer y, las zonas rurales con climas benignos y soleados (como los de la península ibérica), son susceptibles de ser perfectos espacios agrícolas para sus implantación. Recordamos que a principios del siglo pasado, España, era una potencia mundial en el cultivo de esta planta en su variedad de cáñamo industrial de bajo contenido en THC.
Legalización de la marihuana medicinal por la salud
Ahora ya no se puede discutir las bondades y ventajas del consumo de cannabis medicinal, se llevan muchos años publicando los frutos de investigaciones con esta planta. También se llevan muchos años aprendiendo de los comentarios y experiencias de muchos pacientes que han llegado al cannabis, como última alternativa después de que los fármacos hayan fallado.
Décadas de su legalización medicinal, como en California, han demostrado los valores terapéuticos del cannabis para muchas enfermedades y sus efectos paliativos para los síntomas de otras. La salud es la gran ganadora de que el cannabis este a mano del necesitado y de que su uso pueda estar guiado y asesorado por profesionales que han estudiado y aprendido sobre la planta.
La buena salud es lo más importante que puede desear un ser humano y su mantenimiento es clave para la felicidad personal. Por lo tanto, tener acceso y con garantía a una sustancia natural que las investigaciones y estudios no desacreditan para la salud sino todo lo contrario, es un derecho del ciudadano, y el estado debe poner los medios para que esto sea así.
Todo los días nos levantamos con noticias de alrededor del mundo que hablan de casos en los que el cannabis ha sido una ayuda maravillosa. Madres que hablan de milagros en los que gracias al cannabis sus pequeños hijos, con fuertes epilepsias o convulsiones, parecen a ver dado giros de 180 grados cambiando a mejor su salud. También reportes de personas con canceres o tumores que gracias al uso de esta planta hablan de regresiones. El Parkinson, por poner un ejemplo, y enfermedades neurodegenerativas también parecen ser diana en las bondades de la planta.
Decenas de enfermedades están aceptadas para el consumo de cannabis en los países y estados norteamericanos que ya la han legalizado. Universidades muy prestigiosas de todo el mundo están detrás de las investigaciones que unen salud y cannabis. Nadie en la actualidad ya pone en duda los valores médicos de la planta y, gobiernos como el estadounidense y el chino, ya son los que más patentes tienen registradas en este campo. Aunque sigue siendo Israel el país que esta a la vanguardia en su investigación medicinal.
El descubrimiento del sistema endocannabinoide también ha sido uno de los motores que han impulsado que el cannabis sea visto como un “ingrediente” muy beneficioso para nuestra salud. Cada vez que se comprende y se entiende mas este sistema endocannabinoide que poseen los mamíferos, el cannabis “sube un peldaño” y el sistema se convierte en diana terapéutica al jugar un papel vital en mantener los procesos naturales de nuestro cuerpo.
En una noticia que se publicaba en el mes de Agosto pasado, podíamos leer que en estados norteamericanos donde se había legalizado la marihuana medicinal había bajado el consumo de opiaceos hasta en un veinticinco por ciento. Recordamos que unos de los mayores problemas actuales de salud con los que se encuentra Estados Unidos es la gran epidemia de opiaceos que está produciendo muertes y grandes grupos de personas “enganchadas” a estos fármacos y con lo que supone eso.
La gran beneficiada de legalizar la marihuana medicinal sin duda es la salud, lo más importante para las personas.
Legalización del cannabis medicinal por el medio ambiente
El cultivo masivo de cannabis en las zonas rurales, ya sea de bajo o alto contenido en THC, es muy beneficioso para el medio ambiente en general. Esta planta posee un sistema radicular que es especialmente generoso con la tierra y el medio ambiente que la rodea. Su sistema de raíces tiene la habilidad de limpiar y absorber los metales pesados de los suelos y a su vez su cultivo no necesita de fertilizantes y abonos químicos. De hecho, antiguamente su cultivo se podía utilizar en la época de barbecho (cuando se dejaba la tierra de cultivar para no empobrecerla) o para sanear los campos.
La legalización del cannabis medicinal le daría a las zonas rurales un cultivo de gran demanda y, esos enormes cultivos, a su vez ayudarían a ser más amable con el medio ambiente y con la ecololgía. La grandes extensiones de este cultivo ayudarían directamente a ese menester, aunque, la utilización de materiales ecológicos producidos a base de esta planta, si que serían esa gran ayuda para el cambio del excesivo consumo de plásticos no biodegradables que son uno de los mayores males en la contaminación de nuestro planeta.
La legalización del cannabis medicinal podría transformar gran parte de las zonas rurales españolas dándoles cultivos rentables a sus poblaciones y ayudando a todos con el medio ambiente.
La legalización del cannabis medicinal por la economía y generación de riqueza
La legalización de cannabis medicinal ayuda a la economía, ya que todo lo que se invierte para producir o se adquiere de este producto, pasa a formar parte de una economía legal que paga impuestos. Esta nueva industria legal necesita crear puestos de trabajo para su producción, distribución y comercialización, aparte de investigadores y personal cualificado para su dispensación y asesoramiento.
La nueva industria que se puede crear a la sombra de sus aspectos médicos es más que grande. Solo de Israel, hace unas semanas su gobierno autorizaba la exportación de su cannabis y los datos oficiales de su Ministerio hablaban de unos posibles 1.000 a 4.000 millones de facturación solo por este aspecto. El pequeño país judío es líder en tecnología e investigación con el cannabis, su Gobierno se ha puesto a la cabeza de esta novedosa industria medicinal y ya han logrado ser la nación mundial más adelantada también con su investigación medicinal. En Israel, las personas que sufren de algún tipo de cáncer en un noventa por ciento de ellas, de alguna forma u otra, tienen algún tratamiento con la planta o sus derivados. Y, empiezan a estar preparados para extender sus iniciativas terapéuticas al resto del mundo.
El cannabis para uso medicinal debe estar disponible y al alcance de los ciudadanos, centros médicos especializados y personal competente en esta materia debe prepararse para el servicio a la sociedad.
El consumo de la planta en productos alimenticios, parches transdérmicos o los equipos para su dispensación como los vaporizadores, son sub-sectores generadores de industria y puestos de trabajo. La industria de la salud médica, alimenticia o cosmética es inmensa y cada vez lo será más, ya que para las personas la salud es lo más importante, las personas quieren vivir más, pero quieren vivir mejor y el cannabis puede tener una de las últimas palabras.
Si todos estos beneficios económicos en este caso, se lo restas a los delincuentes que no pagan impuestos, y lo cambias por una economía legal que si paga impuestos que repercuten en todos nosotros y genera beneficios para la salud y el medio ambiente, solo nos quedaría decir ¿Por qué aún no la hemos hecho legal?. Por Mac
