La Marihuana Express

Os imagináis una semilla de marihuana que en el mes de Marzo la plantáis y en dos meses ya os estéis fumando sus frutos, imaginaros plantas de marihuana que vuestros geranios las tapan por ser muy altos, no imaginemos tanto, hay una nueva semilla de cannabis que esta haciendo furor entre los cultivadores, la Lowryder.

Cuando me hablaron por primera vez de una clase de semilla de marihuana que en tan solo dos meses recolectabas, mi primera sensación fue de incredulidad. Pero no, ahí estaba ese maravilloso -cañamón- que en tan solo dos meses estaba dispuesto a calmar mi sed de yerba fresca, no lo dudé ni un instante, yo debía probar esa nueva simiente llamada Lowryder. Esta semilla que según su etiqueta es una mezcla de Rudelaris y Indica, tiene la costumbre de crecer en dos meses y desde prácticamente su nacimiento empieza a florecer, es un raro espécimen pero que a buen seguro va a satisfacer a cientos de cultivadores ansiosos.

En ese mes de primavera que siembras a tus protegidas y que sabes que no serán mayores de edad hasta principios del Otoño, suerte tendrás si las acompañaste con otras de estas prematuras, te aseguras que a principios del verano ya estas disfrutando – me refiero evidentemente a fumadores- de esos cogollitos que de entrada te van a librar de gastarte unos cuantos euros en el mercado clandestino y de segundas te van asegurar un verano de paz y tranquilidad, muy buena idea esta Marihuana Express.

Evidentemente no podremos ver cantidad de frutos de sus ramas porque estamos hablando de una planta que no supera los cuarenta centímetros y la duración de su ciclo de vida es de ocho ó nueve semanas. Otra de sus ventajas como ya comente anteriormente es que gracias a su aspecto tan diminuto es perfecta para pasar desapercibida entre nuestros jardines y poder pasar un poco de las miradas de algún que otro vecino que esta a la que cae ó a la que te jode.

Hoy en día en los establecimientos de cultivo cannabico ó anglosajonamente llamados growshop, podemos encontrar multitud de semillas de todos los gustos y sabores (no hace muchas semanas en Barcelona, en concurso cannabico la planta ganadora tenía un peculiar y sabroso sabor a piñón) y ahora también en tamaños y longevidades, no es e extrañar que en pocos años alguien nos pueda regalar una plantita de cannabis al estilo de los esos cactus que van en macetas y que te caben en una mano.

Y así es, por un lado metiendo caña a los consumidores de cannabis y por el otro investigando y desarrollando nuevas clases de esta planta, que quiero recordar que por la cantidad de los usos terapéuticos que se le atribuyen a sus componentes la podríamos definir como una de las joyas de la corona del herbolario medicinal.

Cambiando de tema…

Aun me rechinan los oídos de oír tonterías sobre los consumidores de cannabis, sin ir mas lejos estaba viendo una película americana en la cual, un personaje de la escena le recriminaba a otro, que por su culpa todo había salido mal la trampa que en largometraje hechos representaban se les había frustrado, en ese momento este le decía; ” si de joven no hubieses fumado yerba ahora no nos hubiera pasado nada, creo que no funcionas bien” el otro le contestaba “pero si solo fumé en un par de ocasiones” y el primero contestó “eso ya te afecta”.

Después de ver esa cantidad de sandeces que escriben los guionistas de la otra parte del Atlántico, no me extraña que exista tal confusión en la opinión pública sobre esta planta. Los que somos consumidores de cannabis no somos tontos por el hecho de consumir ó haberlo consumido, el alcohol mata neuronas el cannabis no. No se puede criminalizar al consumidor de marihuana tomándose un gin tonic.

En mi opinión, no se debe juzgar a consumidores de cannabis por consumirlo, muchos de ellos lo utilizan por necesidad.