Las esperanzas del cannabis en Estados Unidos han crecido con la llegada de Joe Biden a la Casa Blanca, aunque, hacia el interior del edificio, la política es muy distinta.
La nueva administración en la Casa Blanca es bien distinta a la anterior, comandada por el inefable Donald Trump.
Si bien el magnate legalizó el cultivo de cáñamo industrial, la política federal en torno al cannabis recreativo y medicinal no ha sido positiva.
Pero todo cambió con el cambio de Gobierno y la llegada de los demócratas, sobre todo la fórmula entre Biden y Kamala Harris, promotores a viva voz del cannabis y su industria.
Las principales bolsas de valores del mundo sintieron el impacto con repuntes para todas las empresas de cannabis, que agradecen el cambio de onda en la Casa Blanca.
Sin embargo, dentro de ese mismo edificio las cosas no son tan amistosas con el cannabis, según informa EldiarioNY.
En estos momentos hay una polémica en la Casa Blanca por los empleados de la nueva administración que han fumado marihuana.
Pero también para los funcionarios de carrera.
Aunque en algunos estados se permite el consumo, e incluso es considerada una “droga blanda” la marihuana está prohibida a nivel federal.
Según trascendió, la Casa Blanca está analizando cómo manejar el uso de cannabis entre empleados.
Esto es porque, a pesad de que cada vez más estados permiten el consumo legal, las disposiciones federales lo prohíben.
Un reporte del Daily Beast indicó que varios empleados fueron suspendidos por confirmar que habían consumido marihuana en el pasado o lo seguían haciendo.
Al menos cinco personas fueron separadas de su cargo, luego de ese reporte, aunque la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, indicó que esos trabajadores no fueron dados de baja solamente por el consumo de la yerba.
“La conclusión es la siguiente: de los cientos de personas contratadas, solo cinco personas que habían comenzado a trabajar en la Casa Blanca ya no tienen empleo como resultado de esta política”, afirmó Psaki en Twitter.
EL CANNABIS NO ES BIENVENIDO EN LA CASA BLANCA
La cadena NBC News reportó que la Casa Blanca otorgaría exenciones, caso por caso, a las personas que fumaran cannabis de manera “limitada” y no necesitan una autorización de seguridad.
El primer reporte del Daily Beast indicó que las suspensión de empleados derivó finalmente en su despido en el proceso de transición.
“En algunos casos, los superiores de transición les dijeron informalmente a los empleados antes de unirse formalmente a la administración que probablemente pasarían por alto algún uso anterior de marihuana, solo para luego pedirles que renunciaran”, según el informe.
No obstante, Psaki justificó que otros factores fueron tomados en cuenta para despedir a ciertos empleados.
Estados Unidos no sólo debería sino que necesita legalizar el cannabis y la Casa Blanca lo sabe.
En estos momentos el país atraviesa una crisis de opioides, y la legalización del cannabis a nivel federal llevaría a muchos médicos y pacientes a reducir su uso de opioides altamente adictivos, sobre todo el fentanilo.
Asimismo, crearía importantes oportunidades comerciales para los fabricantes farmacéuticos de cannabis puro con fines medicinales.
Pero también de productos farmacéuticos derivados de la marihuana.
Si el cannabis se legalizara y dejara de ser una sustancia controlada, más fabricantes podrían participar en su producción.
No obstante, este aumento en la oferta también podría reducir los márgenes de beneficio para los CMO que poseen costosas instalaciones de la Lista I.
Actualmente, los únicos sitios aprobados para producir productos farmacéuticos derivados del cannabis.
CASA BLANCA, ATENTA A LEY DE BANCA DE CANNABIS
Como siempre, los pioneros en avanzar con el cannabis en Estados Unidos son los ciudadanos y ciudadanas del estado de Colorado (centro).
Ahora, y tal como informa TimesCall, un representante de ese estado reintrodujo la ley de banca de cannabis en el Congreso
Se trata del representante Ed Perlmutter (D-Arvada) quien presentó la Ley Bancaria para ser aprobada en ambas cámaras, hoy bajo el control de la Casa Blanca.
La iniciativa otorgaría a las instituciones financieras un puerto seguro para brindar servicios a las empresas de cannabis y a los proveedores externos sin infringir las reglas de lavado de dinero.
Es cierto que los reguladores federales han levantado algunas restricciones a los bancos y las uniones de crédito para monitorear negocios relacionados con el cáñamo a fines de 2019.
Sin embargo, los trabajadores de los dispensarios y compañías relacionadas con la marihuana tienen que negociar principalmente con efectivo y mover físicamente grandes sumas de dinero.
La ley también permitiría a las instituciones financieras ofrecer financiación inicial o hipotecas a las empresas de marihuana.
La Cámara aprobó el proyecto de ley en septiembre de 2019, con 90 de los 102 republicanos en la cámara en ese momento votando a favor junto con todos los demócratas menos uno.
Luego languideció en el Senado que estaba controlado por los republicanos en ese momento.
Más tarde, los demócratas de la Cámara de Representantes incluyeron la ley en su proyecto de ley de ayuda para la pandemia, pero esa legislación nunca avanzó.
El motivo fue el estancamiento partidista sobre los enfoques para responder a lo que sería un punto alto en los casos de covid-19 y las muertes durante el invierno.