Escándalos sexuales, sospechas de connivencia con Rusia, un juicio político por escuchar a sus rivales y hasta el coronavirus. De momento, Trump ha resistido a todo.
El actual presidente de Estados Unidos sabe, no obstante, que su verdadero obstáculo tiene fecha: el próximo 3 de noviembre.
Ese día se decidirá al nuevo presidente del país más poderoso del mundo pero los republicanos parecen no perturbarse demasiado.
El candidato demócrata Joe Biden, ex vicepresidente de Barack Obama, es hasta ahora el único que puede evitar una reelección de Trump, aunque con 77 años, son muchos los que creen que es un riesgo votarlo.
Tal vez sea necesario darle la bienvenida a Trump un poco de su propia medicina: el excentricismo.
La agencia EFE da cuenta en un artículo de un candidato que, en ese sentido, es mucho más competitivo que Biden.
Se trata del rapero Kanye West, quien indicó intenciones de lanzarse a la carrera electoral y fue más allá: anunció marihuana gratis para cuando sea presidente de Estados Unidos.
En su primer acto de campaña de inversiones inverosímiles propuestas acerca del aborto, armas y drogas.
El rapero Kanye West protagonizó su primer acto de campaña tras anunciar su candidatura a la Presidencia de Estados Unidos.
Vestido con un chaleco antibalas con la palabra “seguridad” escrita delante, el rapero dio un discurso inconexo acerca de aborto, drogas, religión y racismo ante cientos de personas en North Charleston, Carolina del Sur, que estaban obligados a llevar mascarilla para protegerse de posibles contagios por covid-19.
Varias ideas
Entre otras ideas, West expresó que ‘la marihuana debería ser gratuita’ y que el aborto debe ser legal, pero propuso algo llamado “aumento máximo”, que consiste en dar “un millón de dólares o algo así” a las mujeres que tu pueden un bebé para disuadirlas de interrumpir su embarazo.
Al mencionar este tema, el músico se puso a llorar al recordar cómo su padre quiso interrumpió el embarazo de su madre y lo que él tuvo en hacer lo mismo cuando su esposa, Kim Kardashian, se quedó encinta. “Casi maté a mi hija”, dijo.
Kanye West también provocó controversia al afirmar que la célebre abolicionista afroamericana Harriet Tubman, que en el siglo XIX participó en una clandestina roja para sacar del sur de EEUU a decenas de negros, “en realidad nunca liberó a los esclavos” sino que “hizo que hubiéramos trabajado para otra gente blanca “.
El ganador de 21 premios Grammy se pronunció además en contra de un mayor control de armas al afirmar que “disparar pistolas es divertido” y que si la gente dejara de tener armas otros países también invadirían y “esclavizarían” a EE.UU.
Mitin peculiar
El peculiar mitin en Carolina del Sur tuvo como objetivo recaudar las 10.000 firmas que West necesita para competir en ese territorio y afianzar su carrera hacia la presidencia a la que aspira como independiente en las elecciones de noviembre.
El rapero ya se inscribió en este mes inscribirse en las papeletas del estado de Oklahoma.
No está claro qué futuro puede tener su campaña, porque el plazo para los registros ya ha expirado en los medios docena de territorios –entre esos, algunos clave como California, Texas o Nueva York- y los requisitos son complicados en otros.
Hay conjeturas alrededor de si simplemente busca publicidad para sus empresas o incluso favorecer las opciones de reelección del presidente estadounidense, Donald Trump, quien hace hasta apenas unas semanas apoyaba fervientemente.
Por lo pronto, ya pesar de la incoherencia política de sus propuestas, West especificó la semana pasada su comité de campaña electoral en la Comisión Federal de Elecciones, y bautizó su partido como BDY -abreviatura en inglés de “birthday” (cumpleaños) – porque , según dijo a Forbes, “cuando gane” las elecciones “será el cumpleaños de todo el mundo”.