California, EEUU.- Un juez federal de California ha dictaminado que los propietarios de los edificios Harborside en San José y Oakland no puede obligar al dispensario a dejar de vender marihuana a pesar de las amenazas federales para apoderarse de las propiedades
Un dispensario de marihuana médica que se anuncia como el más grande del país ha ganado otro asalto en su lucha por permanecer abierto en medio de un operativo federal.
Un juez federal en San Francisco el lunes se negó a ordenar a Harborside Health Center el dejar de vender marihuana mientras el gobierno trata de demostrar que el establecimiento es ilegal bajo la ley federal y debe cerrarse.
Los propietarios de los edificios donde se encuentran Harborside en San José y Oakland había pedido a la Magistrada Jueza Maria-Elena Santiago que prohibiese las operaciones de venta en esos dispensarios porque los federales amenazaban con requisar las propiedades.
Argumentaron que permanecen en situación de riesgo siempre porque siguen vendiendo marihuana en sus locales y la Fiscal de EEUU Melinda Haag les había amenazado con apoderarse de sus propiedades alquiladas.
El Juez dictaminó que podían seguir vendiendo los dispensarios y que no serían requisados sus locales por los federales. Esta sentencia creará jurisprudencia y despeja el miedo de muchos dueños de dispensarios que sentían la amenaza de los federales con la cuestión de requisar sus propiedades.
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