Descubre todos los beneficios que aporta el humus de lombriz a las plantas de cannabis y comprenderás por qué está considerado uno de los mejores abonos que existen.
Qué es el humus de lombriz
El humus de lombriz o también llamado vermicompost es un abono que se obtiene de los excrementos de lombrices de suelo.
Estas son alimentadas con desechos orgánicos como pueden ser restos vegetales o estiércoles de animales herbívoros.
Una vez digerida toda esta materia orgánica se descompone por la acción de las enzimas digestivas y la microflora presentes en el organismo de las lombrices.
Su elaboración a nivel industrial consta principalmente de cuatro fases:
- Precompostación aeróbica: se realiza un volteo semanal o quincenal de principalmente estiércoles para conseguir la mayor carga microbiológica posible.
- Lombricompostaje: el material obtenido se pone a disposición de las lombrices rojas californianas en un proceso de entre 5 y 6 meses con una humedad constante de en torno al 90%.
- Maduración y recogida: durante este tiempo las lombrices digieren la materia prima, depurándola y aportándole una gran población microbiológica. Y es el momento de recoger el humus sólido.
- Cribado y embolsado: finalmente se somete a un proceso de cribado del que se obtiene un producto con una textura granular uniforme, de color café oscuro y con un agradable aroma a tierra fresca.
Su uso se remonta puede que al inicio de la agricultura. La civilización sumeria por ejemplo, hace 5000 años, establecía la calidad de los suelos a partir de la densidad de las lombrices al cavar un hoyo en el mismo.
Para la civilización egipcia las lombrices eran valoradas a tal punto que las deificó castigando hasta con la muerte a quien las dañara.
El filósofo griego Aristóteles en su obra “Historia animalium” manifestó que las lombrices eran los intestinos de la tierra y que contribuían a su productividad.
También un estudio publicado por Charles Darwin, uno de los naturalistas más importantes de la historia, y presentado en 1837 en la Sociedad Geológica de Londres.
En él dice que las lombrices son responsables de la formación del manto vegetal y que este es producto de su actividad digestiva.
Los más curiosos, pueden buscar esta obre titulada “La formación del manto vegetal por la acción de las lombrices: con la observación sobre sus hábitos.”
Beneficios del humus de lombriz
Además de ser particularmente rico en sustancias orgánicas y en compuestos nitrogenados, el humus de lombriz contiene óptimas cantidades de calcio, potasio, fósforo y otros elementos minerales.
También cuenta con una vasta gama de enzimas que juegan un papel muy importante en la fertilidad del suelo. Y además elementos fitorreguladores que inciden positivamente sobre el crecimiento de las plantas.
Todo esto hace que el lombricompuesto sea un fertilizante orgánico por excelencia y prácticamente único por su elevada carga bacteriana y enzimática.
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Cada gramo seco de este producto contiene alrededor de 20.000 millones de microorganismos beneficiosos, muchos más que el compost tradicional.
Durante el proceso de vermicompostaje, se elimina cualquier tipo de patógeno y semillas que pudiera contener. Es un producto estabilizado que huele a tierra húmeda y se puede aplicar directamente en las raíces.
Contribuye al control y supresión de patógenos debido a su acción microbiana. Y también aumenta la resistencia sistémica frente a agresiones externas, como las heladas o períodos de sequía.
Mejora la estructura física del suelo, incrementando la resistencia a procesos de erosión, la capacidad de retención de agua, la capacidad de intercambio catiónico y amortiguando las fluctuaciones del pH.
Muestra compatibilidad con cualquier abono tanto orgánico como mineral. Y no sólo eso, sino que incrementa su eficacia al favorecer la solubilización y asimilación de los nutrientes.
¿Mejor humus de lombriz sólido o líquido?
El humus de lombriz más común es sólido. Se suele usar mezclado con el sustrato en las siembras y en los trasplantes. La proporción ideal de humus varía del 20% al 40% del total del sustrato.
También se puede aplicar en cualquier momento del cultivo sobre el sustrato, aunque no es lo más apropiado ya que temperaturas bajas o la luz solar puede afectar a los microorganismos que contiene.
El humus de lombriz líquido por su parte, se emplea como cualquier otro fertilizante, según las necesidades de las plantas. Y como no, siempre disuelto en agua.
A diferencia del humus sólido que es de liberación más lenta, el humus líquido está disponible inmediatamente, por lo que las plantas no tardan nada en asimilarlo y beneficiarse de todas sus propiedades.
Vermicompostaje casero
Cualquiera en su casa puede obtener humus de lombriz muy fácilmente, siempre que cuente con un pequeño espacio exterior.
Si disponemos de cualquier tipo de estiércol de animal herbívoro, el humus será de primera calidad. Sino, su concentración de nutrientes será más baja.
Las vermicompostadoras no son excesivamente caras, aunque se puede improvisar una con muchos materiales que posiblemente tengamos a mano.
Desde 3 o 4 neumáticos o cubos apilados uno encima de otro, hasta bañeras viejas, bloques o ladrillos, depósitos de agua o cajas grandes de madera forradas con plástico negro.
En el compostar debemos añadir en primer lugar una buena capa de tierra vegetal que servirá de refugio a las lombrices del calor que genera la descomposición de la materia prima.
Después se añaden las lombrices. Muchos sabréis donde conseguirlas gratis. Y otra opción es comprarlas en un centro especializado.
Las lombrices rojas de california son las mejores, además de muy longevas. Es capaz de compostar prácticamente cualquier materia orgánica. Desde papel, cartón o celulosa, hasta estiércol, restos de podas, etc.
A continuación añadimos el alimento de las lombrices en capas de unos 10cm. Evitaremos carnes y pescados, ya que las lombrices no son capaz de digerirlas y creará un olor insoportable.
A medida que las lombrices tengan compostada la capa inferior, irán subiendo progresivamente a la capa superior buscando comida.
Una vez tengan compostada la capa inferior y se queden sin comida, irán subiendo progresivamente a la capa superior y así sucesivamente con las nuevas capas que agreguemos.
Cuando el humus esté perfectamente compostado, será hora de retirar las lombrices para aprovechar el humus. Como decimos, deberá tener un olor neutro tirando a tierra húmeda.
Retirar las lombrices es muy sencillo. Simplemente coloca una malla de orificios finos sobre el compost. Y después deposito una pequeña capa de alimento para las lombrices.
En uno o días habrán atravesado la malla y se encontrarán en la capa de alimento fresco. Retírala con cuidado y cuando extraigas todo el humus, vuélcala de nuevo en la vermicompostadora para comenzar un nuevo ciclo.
Existen compostadoras compactas y modulares muy cómodas. En cada módulo se encontrará humus en diferentes estados. Desde el listo para usar, hasta otro en su primera fase.
Además algunos permiten el almacenamiento y la recogida de humus de lombriz líquido que se puede añadir en cualquier momento al agua de riego.
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