Nada apetece más en días de calor que un buen helado. Y si es casero, más sabroso será. Y si es un helado de cannabis casero, el placer se multiplicará.
No te pierdas esta receta rápida y sencilla con la que disfrutarás con unos increíbles efectos y el delicioso sabor de este increíble helado de cannabis.
El origen del helado
El origen del helado es incierto. Sí se conoce que hace unos 4000 años, tanto en China como en las cortes babilónicas servían bebidas heladas o enfriadas con hielo y nieve traído de las montañas.
En el siglo V a.C, en la antigua Persia existió un plato similar a un flan o un pudín, que se enfriaba igualmente con hielo y nieve de las montañas. De él disfrutaba la realeza durante los meses calurosos del verano.
Fueron precisamente los persas quienes sin duda alguna mejor dominaron la conservación de hielo traído de las montañas durante el invierno, para que aguantase meses en su estado dentro de grandes refrigeradores.
Los zumos de frutas y los vinos, se añadían a bolas de nieve almacenadas. Existe constancia de que tanto el rey de Macedonia Alejandro Magno, como el emperador romano Nerón, consumían este precursor del helado.
Ya en la Edad Media, en las cortes árabes, los cocineros elaboraban productos azucarados a base de frutas y especias. E igualmente, después los enfriaban con hielo.
A esta mezcla la llamaban sharbat. Esta palabra pasó posteriormente al turco como şerbet. Se cree que la palabra sorbete, pudo haber derivado del árabe en algún momento de la Edad Media.
No fue hasta el siglo XVI, llegó uno de los descubrimientos más importantes que giran en torno al helados. Se descubrió que mezclando nitrato de etilo con nieve se producían temperaturas muy bajas.
Pero no fue hasta que en 1913, se inventó la primera máquina elaborar helados continua. Esto hizo que los helados se convirtiese en algo cotidiano que se puede consumir en cualquier momento del año.
Ingredientes helado de cannabis
- Medio litro de nata
- 100 gramos de azúcar
- 3 huevos
- 4 gramos de marihuana bien molida
- una vaina de vainilla
- una pizca de sal
Elaboración helado de cannabis
Lo primero como siempre, será integrar la marihuana en uno de los ingredientes grasos de la receta. En este caso contamos con nata.
Así que haremos una nata de cannabis. Además aprovecharemos para aromatizarla con vainilla, y lo más importante, descarboxilar la marihuana.
Esto es necesario para que el THCA que no es psicoactivo, se transforme en THC que sí lo es. Y lo único que se necesita es calor controlada.
En un cazo añadimos la nata. También la vaina de vainilla, abierta longitudinalmente. Y por último la marihuana triturada.
Dejamos que se cueza durante unos 20-30 minutos a fuego suave y removiendo a menudo. La temperatura no debe exceder los 120ºC, de lo contrario el THC se degradaría en CBN y perdería potencia.
Pasado este tiempo, retiramos del fuego. Separa la vaina de vainilla, y cuela lo demás para retirar la materia vegetal. Aprieta bien para escurrir bien toda la nata cannábica.
Raspa con un cuchillo el interior de la vainilla para extraer las semillas y la pasta, y agrégalas a la leche aún caliente. Remueve bien y deja que enfríe.
Una vez frío, la introducimos en la nevera. Los sabores se potenciarán si dejamos que la nata de marihuana aromatizada repose durante unas 12 horas.
Pasado este tiempo, comenzamos la siguiente elaboración de nuestro helado de cannabis. En un recipiente separamos las claras de las yemas. Por un lado montamos las claras de huevo a punto de nieve.
Para ello añade la mitad del azúcar a las claras de huevo y una pizca de sal. Con las varillas de una batidora y a velocidad media, bate las claras hasta que hagan una espuma muy blanca y consistente.
Las yemas de huevo móntalas también en otro recipiente junto con la otra mitad del azúcar. La textura debería ser muy cremosa y semilíquida.
Añadimos las yemas montadas a la nata cannábica y siendo lo más delicados posibles, vamos removiendo con cuidado, ya que no conviene perder todas las burbujas de aire que hemos hecho batiendo.
Haz lo mismo después con las claras, siempre removiendo con cuidado, mezclando bien los ingredientes con movimientos lentos y envolventes, hasta que quede bien uniforme.
Metemos la mezcla en el congelador. Y cada 30 minutos, la sacamos y volvemos a remover suavemente. Repetimos esto cada 30 minutos durante unas 2 horas.
Con esto iremos rompiendo los pequeños cristales que se irán formando por el cambio extremo de temperatura, y que harían que el helado de cannabis quedase duro como una piedra.
Y ya dejamos congelar unas 4 horas más para tenerlo ya listo para disfrutar. La temperatura ideal para servir el helado de cannabis está entre los -14 y -7 ºC, por lo que se recomienda sacarlo unos minutos antes de servirlo.
Recomendaciones
Como siempre que tratamos con cannabis ingerido, conviene tener precaución, ya que los efectos pueden retrasarse hasta 1 hora.
La cantidad de marihuana de este helado de cannabis serían dos gramos. Cada 1/4 de helado por lo tanto serían 0,5 gramos.
Es una cantidad más que prudente pero no despreciable. Come una bola de helado y espera al menos hora y media para comprobar los efectos antes de repetir.