EEUU/Uruguay.- “En EE.UU., 90 millones de personas viven en estados que permiten el uso medicinal de la droga”, afirmó Tamar Todd, una de las disertantes en la conferencia para aportar insumos científicos al debate sobre la legalización de la marihuana. El 26 de setiembre se realizó el primero de los cinco encuentros.. Dijo que de aprobarse la propuesta del P.E., Uruguay puede convertirse en modelo para el mundo.
La primera conferencia de la Junta Nacional de la Droga (JND), en el Paraninfo de la Universidad de la República, estuvo a cargo de la abogada principal dela Oficinade Asuntos Legales de Drug Policy Alliance de los Estados Unidos, Tamar Todd. La disertante describió el modelo jurídico utilizado en diferentes regiones de ese país, sus semejanzas y peculiaridades, y la relación del consumidor con la sustancia desde un punto de vista normativo y sanitario.
Entre las recomendaciones más importantes, señaló que el diseño del sistema debe considerar la calidad de la salud pública y prevenir distorsiones. También destacó que debe incorporar al sentir público, la flexibilidad y la construcción de un plan piloto, el acceso al producto con un sentido justo, y un componente de educación pública para que la gente sepa qué es lo que está pasando y que a su vez tenga chance para participar. “Uruguay lo puede hacer mucho mejor, porque lo que se hizo en Estados Unidos fue de forma experimental y siempre pensando en no molestar las normas federales y ustedes aquí no tienen ese problema”, subrayó.
La expositora señaló que nuestro país “puede diseñar el sistema reflexionando que es una mejora en la salud pública”, y añadió que en California los despachos de la marihuana medicinal tienen recomendaciones para la salud y el consumo de la sustancia, a diferencia de lo que ocurre con los expendios ilegales. “Uruguay puede convertirse en un modelo para el mundo”, afirmó la abogada.
Todd aseguró que en Estados Unidos la ley federal no permite la posesión, el consumo, el cultivo ni la distribución de marihuana, pero el modelo adoptado por 17 estados federales de ese país trata a la marihuana como un medicamento, es decir, permite el consumo de la sustancia regulada por los médicos. El uso fuera de la prescripción médica no está amparado por ninguna ley.
Además de los 17 estados que controlan el consumo medicinal de marihuana, 15 estados dejaron de penalizar la posesión de pequeñas cantidades de la sustancia y tres estados comenzarán una discusión política para despenalizar el uso recreativo del cannabis sativa: Colorado, Oregon y Washington. Esto significa que 90 millones de personas viven en un lugar que permite el uso medicinal de la droga.
Un estadounidense necesita una recomendación médica para consumir cannabis. Todd explicó que si los médicos no la recetan significaría quebrar la ley federal.
Para la comercialización del medicamento se utilizan varios modelos. Por ejemplo, en el estado de Nuevo México centralizan la comercialización en un grupo pequeño de productores, se envían directamente a los pacientes con la cantidad prescripta de la sustancia, en el marco de la regulación del Departamento de Salud. En Colorado trabajan unos 700 productores y distribuidores que emplean a ocho mil trabajadores controlados por la misma agencia que regula el alcohol y el tabaco.
En el estado de California la regulación es más flexible y descentralizada, con distintas formas de acceder a la sustancia. Se estima que los productores pagan entre 700 millones de dólares y 1.300 millones de dólares al estado de California a través de los impuestos, sostuvo la disertante mientras mostraba fotografías de predios con plantaciones controladas.
Tres estudios académicos demuestran que el consumo de marihuana en los estados federales que permitieron el uso medicinal no aumentaron la prevalencia entre los más jóvenes, —Medical Marijuana Laws and Teen Marijuana Use por Mark Anderson; California Pediatrician de Seth Ammerman y Marijuana Use by Young People; The Impact of State Medical Marijuana Laws por Karen O’Keefe and Mitch Earlywine—. De hecho, los análisis de consumo entre los adolescentes señalan que el uso bajó en California, Washington y Maine.
En referencia a la opinión pública, Todd explicó que desde la década del 70 hasta nuestros días la opinión mayoritaria de los estadounidenses apoya la legalización del consumo de marihuana.
En esta primera conferencia también participaron: el secretario dela Presidencia de la República, Alberto Breccia; el rector dela UdelaR, Rodrigo Arocena; la decana de Ciencias Sociales, Susana Mallo; el abogado Diego Silva, el psicólogo Gabriel Eira y el médico Gustavo Tamosiunas, representando a las facultades de Derecho, Psicología y Medicina
Fuente LaRed21