En España, la producción de cannabis y la regulación del mercado para uso adulto, unos para recreativo y otros para uso terapéutico, todos ganarían en la ecuación
En los últimos meses y casi todas las semanas, vemos como son intervenidos por las autoridades policiales multitud de cultivos ilegales de marihuana. Los especialistas dicen que esto es debido a un aumento generalizado del consumo por parte de la sociedad, además de por la pandemia del Covid-19. El coronavirus y sus efectos sociales ha hecho aumentar el consumo de cannabis.
Ahora no es percibido el cannabis por la sociedad como hace unas décadas
El acceso a la información internacional y en todo el mundo que proporciona internet, ha sido clave para esta percepción por parte de la sociedad actual. Los increíbles resultados de la investigación con la planta, han sido más que decisivos para ese cambio de percepción y visión del cannabis para el colectivo científico, médico y en general. Su bajo nivel de riesgo para la salud, en comparación con otras sustancias recreativas y farmacológicas, es otro motivo para que se le” lave la cara de diabólica” antes los ojos de la sociedad.
Esa sociedad actual, no ve el cannabis ni tiene la sensación de que sea tan peligroso su uso, como en el siglo XX pasado. De hecho, la misma ONU, por recomendación de la OMS esta misma semana la ha sacado de la lista IV, y donde están drogas duras como la heroína. Es más, el mismo organismo internacional acepta los usos medicinales del cannabis.
La producción de cannabis y una industria legal que repercuta en toda la sociedad
Es el momento de plantearse muy en serio como estado y con las datos de uso e información actual, que el cannabis es una producto de consumo por parte de muchas personas adultas. Unos la usan de forma lúdica y otros la consumen por su aspecto medicinal. Al final, si no hay donde adquirirla, se irá y fomentará al mercado ilegal.
El mercado negro e ilegal no te da unas mínimas garantías de calidad y salubridad, con todo lo que supone hoy eso. Además, es un dinero que gasta el usuario, va directamente al mercado negro y no paga impuestos. Es más, no se controla la no venta a los menores y ciudadanos, todos quedan expuestos a estos “mercadeos ilegales”.
Una industria y la producción de cannabis legal proporcionaría un sin fin de beneficios, aunque siempre habrá ciertos problemas como acarrean otras sustancias como el alcohol, tabaco, azúcar, café, medicamentos… Aunque, desde la perspectiva actual, mucho creen que existe muchos más beneficios que problemas con su legalización.
El ejemplo de la legalización del uso adulto
De hecho, ya contamos con este experimento de la legalización del cannabis. Canadá fue el primer país occidental en hacerlo; y su éxito ha sido para toda la sociedad en su conjunto. Allí se ha recaudado muchos millones en impuestos por su venta directa, por autorizaciones para producción de cannabis, por autorizaciones para dispensarios y más. Cientos de empresas ha sido creadas y miles de puestos de trabajo se han puesto en el mercado. El consumo de cannabis en adolescentes ha bajado y éste también en los estados norteamericanos le legalizaron el uso adulto.
Es cierto que ha subido el consumo de cannabis en personas mayores, pero a la vez ha hecho bajar el de los fármacos opioides entre estas personas. Vamos que el ejemplo, más o menos, ya lo tenemos. En Estados Unidos cada vez más territorios son los que se apuntan a esta tendencia legalizadora. Y en Uruguay, están muy contentos con los resultados obtenidos por su legalización; es más, sacando pecho por ser la primera nación del mundo que tomó esta medida.
Aumento de consumo en España de fuertes medicamentos
Ayer, El País se hacía eco de la noticia del aumento en la primera ola del Covid, del consumo de medicamentos para ansiedad, depresión y problemas de sueño, subió un 4% de más. Según los datos de la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE), se habían vendido 4,4 millones “más” de envases de estos fármacos: antipsicóticos, hipnóticos, sedantes, tranquilizantes y antidepresivos. Dice el informe que el año anterior por las mismas fechas no existió este aumento, podría atribuirse a la pandemia actual.
El cannabis medicinal ¿Cómo ayuda? ¿Cómo solución?
El consumo de cannabis por uso medicinal es ya un hecho, hasta el mayor organismo mundial le atribuye ciertos beneficios medicinales”. A partir de hoy, la Comisión de Estupefacientes de las Naciones Unidas (CND) reconoce tácitamente la utilidad médica del cannabis”.
Si cogemos el ejemplo de Estados Unidos, varios estados sufren una plaga de consumo de estos medicamentos opioides. Con el tiempo, este abusivo consumo por parte de los ciudadanos está creando muchos drogodependientes y más muerte. En los estados norteamericanos donde es legal el acceso y consumo y producción de cannabis, estas cifras son menores.
¿Cómo ayuda?
El cannabis es una forma de consumo de medicina natural que bien recetada, puede ayudar con esos mismos síntomas que están aumentado el consumo de fármacos opioides en España. La depresión, la ansiedad, el estrés, el dolor crónico, la falta de sueño, la falta de hambre, el sentirse bien, las migrañas; el cannabis puede ayudar también con estos malestares y de forma natural.
¿Cómo solución?
Regulando el cultivo, producción venta y uso del cannabis y creando una industria legal en todos sus campos, se suministrará a una demanda que ya existe. Cuidando los procesos de producción, informando al público, etiquetando correspondientemente el producto, esto daría seguridad a la salud del consumidor. Por lo tanto, el mercado legal se impondría al ilegal sencillamente por que el usuario así lo querría.
Eso sí, siempre habría un mercado ilegal, como coexisten en todos los sectores, pero este sería el pequeño. La gran tarta de esta comercialización repercutirá en toda la sociedad en forma de más salud, calidad, información, recaudación de impuestos y servicio al consumidor. Si hoy te quieres tomar un vino, vas a la bodega o bar y te informan y lo consumes o compras; también hay consumidores de cannabis que quieren este servicio al consumo. Quien ha estado en un dispensario de cannabis de Estados Unidos o Canadá, sabe lo que es estar atendido por un profesional de esta industria legal del cannabis y lo que eso significa.
Por lo tanto, una posible solución y golpe al mercado ilegal del cannabis, sí que puede ser.
Un hecho más que histórico
El hecho histórico de sacar el cannabis de la Lista IV de la Convención Única sobre Estupefacientes de 1961, por parte de la Comisión de Estupefacientes de las Naciones Unidas (CND) del ONU y como recomendación de la OMS, deja encima del tablero “otras reglas”.
Con la regulación de la industria, la producción de cannabis, el comercio y consumo adulto de cannabis, ganan todas las partes de la sociedad y por supuesto, la agencia tributaria.
Opinión de Mac