El 30 de septiembre de 2012, A Sierra Riddle la vida le dio un vuelco cuando a su hijo de 2 años de edad, Landon, le fue diagnosticada una leucemia con un 8 a 10 por ciento de posibilidades de vivir más allá de las siguientes 24 a 48 horas.
“Fue el día más absolutamente terrorífico de mi vida,” escribió Riddle en el blog de Landon.
Durante los próximos cuatro meses, Landon sería sometido a sesiones de quimioterapia, muchos medicamentos y todos los efectos secundarios del tratamiento para combatir su cáncer. Apenas 30 días después de que comenzase la quimioterapia, el aspecto fisico y la calidad de vida de Landon cambiaron.
Riddle se vio obligada a ver a su hijo vomitar de 30 a 50 veces por día, ver como prácticamente no injería alimentos en 25 días y estando en una habitación de hospital, ella junto a su familia, rezaban por un milagro que salvase a su hijo.
Finalmente, en enero del 2013, sus oraciones parecían ser escuchadas.
“Hablamos de todas nuestras preocupaciones con su equipo médico en Utah y veíamos que Landon seguía sufriendo después de los fármacos y marchitándose por el acumulado en medicamentos “, dijo Riddle. “Entonces mi madre encontró el aceite de cannabis en internet.”
La abuela de Landon, que siempre había estado en contra de las drogas, pasaba horas investigando curas para el cáncer y, finalmente, encontró suficiente información para convencer a su hija para que al menos probase el cannabis para ayudar a su nieto Landon.
Sin embargo, vivían en el estado de Utah donde es ilegal la marihuana medicinal y sabía que discutir el consumo de cannabis con su equipo médico como parte del tratamiento de su hijo no iría a ninguna parte. Así que se mudaron a Colorado como “refugiados de cannabis”.
Riddle consiguió para su hijo una tarjeta de marihuana médica y observó que su salud y su sonrisa volvía como una mejorada calidad de vida.
“Nuestros corazones se llenaron de alegría al ver que el cannabis devolvía la sonrisa a la cara de Landon”, añadió en su blog. “Landon comenzó cada vez a sentirse mejor y mejor! Era como si un milagro hubiese ocurrido! Sonreía de nuevo y comenzaba a comer de nuevo! “
La familia de Landon observó como los efectos secundarios de la quimioterapia parecieron disminuir, su vómito disminuyó a 10 veces al día o menos y sus recuentos se iban, pero su traslado a Colorado no proporcionó el apoyo de los médicos sobre el cannabis que esperaban.
Después de cinco meses de consumo de cannabis y otros remedios naturales, Landon estaba en remisión, pero sus médicos insistieron en que debía comenzar la quimioterapia de nuevo. Con la amenaza de perder a su hijo, Riddle accedió a la quimioterapia.
Aunque el consumo de cannabis tiene efectos claramente positivos en la salud de Landon, sus médicos, como la mayoría de los otros en este país no respaldaban el tratamiento como una forma adecuada para tratar el cáncer.
Aunque en esta ocasión no perdió la patria potestad de su hijo, otras familias no han tenido tanta suerte. Un padre australiano se enfrenta a cargos después de usar el aceite de cannabis para tratar el cáncer de su hija.
“Es atroz que cualquier persona en el planeta sea acusada por elegir productos de cannabis sobre productos farmacéuticos”, dijo Riddle. “Mi corazón está con Adam Koessler y Rumor Rose, junto con otras incontables familias que se ven afectadas por la prohibición del cannabis”.
Aunque las historias de Landon y Rumor Rose han recibido mucha atención internacional, la lucha por permitir la marihuana medicinal como tratamiento en pacientes con cáncer infantil sigue siendo una batalla cuesta arriba. A pesar del uso de la marihuana en muchos pacientes adultos con cáncer, muchos médicos todavía desaprueban su uso en niños.
Para los padres en su situación, Ryddle da un consejo.
“Prepárate para la pelea de su vida. Tener un hijo enfermo es una batalla en sí, pero esta elección es un mundo completamente nuevo “, dijo. “Vas a necesitar piel gruesa, la intuición y un equipo sólido. No pierdas el tiempo asegurándote de que lo de las farmacéuticas hace más bien que daño. Si le duele su intestino, es que probablemente le siente mal “.
