El productor de cáñamo industrial de Kentucky, GenCanna, recibió la certificación kosher a principios de este mes para todos sus productos derivados de cáñamo por parte de Kentucky Kosher International.
GenCanna produce cáñamo para la fabricación de polvo, tinturas y cápsulas de cannabidiol, el estado clasifica el cáñamo como un producto agrícola. El directivo de la compañía, Brett Goldman, dice que en Estados Unidos existen tres formas de obtener acceso al cannabidiol (CBD), el primero es importarlo, el segundo es obtenerlo de la marihuana medicinal o recreativa y la tercera opción es extraerlo del cáñamo, único conducto que cumple con los requisitos federales.
“Creemos que el cáñamo es alimento y queríamos que las personas que sean kosher tengan el mismo acceso a los productos derivados del cáñamo que cualquier otra persona”, dijo Goldman al Jewish Journal.
Newton Cohen, director de asuntos externos de GenCanna, dijo que la certificación kosher atestigua la calidad del producto para todas las comunidades conscientes de la salud
“Trasciende los aspectos religiosos de kashrut y le importa a una población fuera de la comunidad judía”, dijo, y agregó que su certificación kosher abrirá el camino para que más comunidades desarrollen productos y accedan al mercado CBD derivado del cáñamo “como nunca antes”.
La firma también produce productos CBD de marca blanca, tiene una instalación de investigación en Winchester, Kentucky, junto con cientos de acres de campos de cáñamo.
En California, GenCanna trabaja para que se apruebe una nueva ley de cáñamo.
“Dado el liderazgo de California en la investigación y legalización del cannabis, California es sorprendentemente nuevo en el espacio de cáñamo industrial”, dijo Bevan.
Cohen, dice que Kentucky tiene una historia con el cáñamo que data de tiempos pionero. El estado fue el mayor productor de cáñamo en los Estados Unidos en los siglos XIX y XX hasta que el tabaco lo reemplazó como cultivo comercial del estado y, eventualmente, su cultivo fue proscrito por completo. En la década de 1940, una película del gobierno llamada “Hemp for Victory (Cáñamo para la Victoria)” alentó a los agricultores a poner todos sus recursos en el cultivo del cáñamo como parte del esfuerzo de guerra. El gobierno más tarde negó haber hecho la película, pero en 1989, Jack Herer, el padre fundador judío de la defensa del cáñamo, recuperó una copia de la cinta y la donó a la Biblioteca del Congreso.
“El carbón y el tabaco son industrias moribundas”, dijo Cohen. “Mucha gente clama por traer el cáñamo”.
Dos décadas y media después, la Farm Bill de 2014 resucitó la industria, lo que permitió que el cáñamo agrícola creciera bajo la ley federal. De solo 33 acres experimentales ese año, el cáñamo industrial tendrá su año más grande hasta el momento en 2018 con más de 12,000 acres destinados a fines de investigación.
El libro referente sobre el cáñamo “The Emperor Wears No Clothes”
En el libro de Jack Herer, “The Emperor Wears No Clothes“, se argumenta que “el cáñamo es, por lejos, el primer recurso natural renovable de la Tierra”, capaz de producir papel, energía, alimentos, textiles y medicinas.
En la actualidad el cáñamo está “retroajustando la industria tabacalera” en Kentucky, dijo Cohen, muchos agricultores del agonizante cultivo lo quieren cambiar por los pastos más verdes del cáñamo. A medida que el consumo de tabaco continúa su declive, el cáñamo industrial está pasando de los márgenes de la cultura contraria a la corriente principal. No sorprende saber, que en las instalaciones de GenCanna, el edificio de investigación de cáñamo una vez albergó una planta de cría de semillas perteneciente al gigante del tabaco Philip Morris.
El cáñamo, al parecer, se está volviendo kosher en más de un sentido.
