La planta del Cannabis Sativa tiene dos “versiones” muy conocidas, una de ellas famosas por varios nombres como marihuana, ganja, mota, dagga o más. La otra sería la conocida mundialmente como cáñamo o hemp.
La primera comúnmente llamada marihuana, produciría mayor cantidad de su cannabinoide mas importante y psicoactivo, el tetrahidrocannabinol o THC, y la segunda o cáñamo, produciría mayor contenido de su cannabinoide preferido y no psicoactivo, el cannabidiol o CBD.
Hasta ahí, todo perfecto, como dos buenas hermanas gemelas que son casi idénticas. Pero, cuando estas plantas tienen que cultivarse a gran o menor escala, es mejor que las dos se distancien y contra más kilómetros o millas entre ellas, mejor, explicamos.
El cannabis Sativa es una planta dioica: lo que quiere decir que hay macho y hembra
El o la Cannabis Sativa es sus dos versiones, es una planta que necesita ser polininazada por el polen de su macho. He aquí el problema de la coexistencia vecinal de estos dos cultivos. En los campos de cáñamo, nacen y se crían miles de plantas macho que después de hacer su labor dentro del cultivo se secan y son las hembras, gracias a ello, las que producen las preciadas y preciosas semillas o cañamones. El problema de este bello proceso natural llegaría cuando ese polen que los machos del cáñamo lanzan al cielo para polinizar a las “chicas”, es arrastrado por el viento a distancias considerables y poliniza a esa otra Cannabis Sativa de alias “marihuana” que no quiere que se mezcle su genética con el cáñamo siendo “violada” para producir semillas sin pedegrí. Además, ésto rebajaría considerablemente la potencia psicoactiva de la planta de la marihuana, que posiblemente su dueño no la habría cultivado para tal final.
En tierras donde se cultivan estos dos tipos de Cannabis Sativa ya han surgido roces, quejas y alguna que otra advertencia de disconformidad. Este viejo problema, aunque no muy extendido por ahora dado el nuevo renacer en los últimos años de los cultivos de marihuana y cáñamo, a buen seguro será un grave problema en los años venideros en casi todo el mundo donde se mezclen estos cultivos.
También debemos pensar, que a los cultivadores de cáñamo o hemp tampoco les debe gustar que sus plantas sean contaminadas por polen con THC en su ADN, poseer mínimas dosis de THC( 0,3%) con los otros cannabinoides es la cualidad de esta planta, además de hacerla legal en muchos países.
Las dos versiones del Cannabis Sativa se están mirando a los ojos y se dicen, no me toques. Las dos tienen una legión de bondades para la salud y las dos tendrán que coexistir en los cultivos del futuro, una con el tetrahidrocannabinol o THC por estandarte de guerra y la otra con el cannabidiol o CBD en su bandera.
En estados de Estados Unidos donde coexisten los dos tipos de cultivo ya se han comenzado ha encontrarse con las quejas de cultivadores de un tipo de estos cultivos. La marihuana medicinal cultivada al aire libre no puede estar próxima a plantaciones de cáñamo y ya se estaban tomando medidas para tomar en consideración y solucionar este problema entre cultivos.
En España, por ejemplo, el cultivo de cáñamo es legal y el de marihuana en su inmensa mayoría ilegal, aunque esto no ha sido suficiente para que algún que otro cultivador de cáñamo ya haya recibido la atención de los otros.
El cultivo de Cannabis Sativa es sus dos versiones más populares deben estar presentes en nuestros campos, y no solo porque los humanos y animales agradezcamos su consumo, sino porque la habilidad de este cultivo para limpiar y descontaminar los suelos de metales pesados, mete a otro actor principal en este grupo de agradecidos, el medio ambiente. Por Mac
One Response
Contra más….hay que joderse… A ver si os enteráis de una vez. Se dice CUANTO MAS.