Chocolope de DNA Genetics, sencillamente esplendida

Sativa pura, 60 días de floración, fácil de cultivar, productiva, sabrosa, potente… has probado ya la Chocolope de DNA Genetics? A qué esperas?

De entre todas las variedades actuales, una de las que más nos ha sorprendido y nos sigue sorprendiendo es la Chocolope de DNA Genetics. Y nos ha sorprendido en varios aspectos, como en primer la rapidez de floración para tratarse de una sativa casi pura o totalmente pura, con un período que rondará los 2 meses que es impensable ya no sólo en sativas, si no en muchos híbridos e incluso índicas puras. Su sabor recuerda a un sabroso hachís como los que se podían probar en los 80 y su potencia es muy elevada y cerebral.

Chocolope tiene como madre una Chocolate Thai, sativa thailandesa que apareció por primera vez en EEUU entre finales de los 70 y principios de los 80, como tantas otras que peregrinaron del país asiático al norte de América. Pronto se hizo muy apreciada entre los cultivadores de la zona. Su mayor inconveniente era el tiempo de floración de unas 14 semanas, la producción de pequeños cogollos y una delgadez de tallos y ramas que hacía que los cultivadores adquirieran e hábito atarla a un tutor en un sistema de cultivo típico en estas variedades que llamaron “thai stick” o “palos thai”. Se dice que DNA Genetics partió de un kilo de estas semillas de Chocolate Thai original a mediados de los 80 para el desarrollos entre otras, de la fantástica Chocolope.

Como padre, optaron un un potente semental de Cannalope Haze, un híbrido de una vieja Haze proveniente de los criadores originales y una landrace mexicana de Michoacán que destacaba por su rapidez de floración, aproximadamente unas 8 semanas, algo que cuesta realmente creer hasta que no se cultiva. A partir de este primer encuentro entre Chocolate Thai y Cannalope Haze, llega realmente el largo y exhaustivo trabajo de crianza, usando varios retrocruces usando el macho Cannalope con el fin de buscar una floración más rápida y sin perder mucho de los rasgos de la Chocolate. El resultado tras varias generaciones fue la ya famosa Chocolope que hoy tenemos el gusto de poder disfrutar.

Se trata de una planta que todo cultivador agradece y que en especial entusiasmará a los más principiantes ya que no es muy común encontrarnos con variedades tan sativas que sean tan fáciles de cultivar y sobretodo de floración tan rápida. Se puede decir que no es una sativa corriente aunque en crecimiento no de la impresión contraria, con un crecimiento rápido, tallos delgados y hojas de afilados peciolos. En nuestro caso apenas encontramos ejemplares que destacasen sobre otros y siempre se agradece un cultivo homogéneo. El uso de tutores durante esta fase vegetativa es la mejor solución para no encontrarse con este problema en floración y con la planta cargada de cogollos.

Las sativas son plantas complicadas para cultivar en interior, en cuanto notan el cambio de fotoperíodo comienzan a estirar hasta bien entrada la floración y pueden llegar a multiplicar x10 su tamaño inicial, lo que obliga a tener poco menos que sacarse la carrera de ingeniero de guiado para que las plantas no se nos salgan del armario ni se incrusten en la lámpara. Con Chocolope ésto no sucede ya que normalmente en la fase de flora no llega a doblar o triplicar su tamaño, muy fácil de controlar y más que apropiada para el más inexperto, quien haya cultivado una Critical y en concreto el clon Bilbo, puede encontrarse un comportamiento similar. Conviene darles un crecimiento mínimo si partimos desde esqueje de unos 30 cm. En cuanto a la alimentación, requiere buenas cantidades de nutrientes, lo que también la hacen muy resistente a sobrefertilizaciones.

Con un período de floración de 8-9 semanas y como no podía ser de otra manera, los cogollos se forman a una velocidad que nos dejará abrumados y sonrojará a cualquier otra variedad con la que comparta jardín o espacio de cultivo. En apenas 10 días comenzarán a aparecer las primeras flores, muy resinosas ya desde su inicio y que prácticamente se puede observar como día a día van engordando y cubriéndose de una capa de tricomas espectacular, no en vano es en sí una auténtica joya en extracciones. Los cogollos también podríamos compararlos con los de la mismísima Critical Bilbo, duros como piedras, de un calibre similar y con muy poca hoja que en ocasiones ya ni hay que manicurar. Si no has entutorado las plantas en crecimiento, sin duda tendrás que hacerlo en floración porque sus débiles ramas no podrán sostener sus pesadas flores.

En las buenas genéticas, lo mejor siempre está por llegar, y no es hasta la primera cata cuando nos damos cuenta realmente de que Chocolope es especial. Tiene un aroma muy intenso, dulce y sutil, entre bosque, terroso y algo skunky, olores que también acompañarán en el sabor, predominando el terroso con trasfondos a sabroso hash. Su efecto es potente y muy llevadero, apropiado para cualquier consumidor, con una mezcla entre físico y cerebral, muy alegre y con un punto relajante que la hacen ideal para disfrutar con amigos, meditar… Nosotros la calificamos como una hierba para diario, para degustar como un sabroso bombón de chocolate y dejarse llevar. Si tenemos que ponerle una nota, le pondríamos un Notable Alto, sin duda más que merecido.