Carta abierta que ha escrito el Dr. Franjo Grotenhermen, fundador y Director Ejecutivo de la IACM, así como miembro honorífico del Observatorio Español de Cannabis Medicinal, a Rick Simpson.
Querido Rick Simpson,
Probablemente usted sea la celebridad de mayor reconocimiento en lo referente al uso médico del cannabis por parte de los pacientes con cáncer. Muchas personas desesperadas, que sufren de cáncer y otras enfermedades graves, depositan en usted la confianza y ponen sus esperanzas en su asesoramiento.
Usted mismo es consciente de esta responsabilidad cuando escribe en su libro, Rick Simpson Oil – Nature’s Answer for Cancer, “Creo que cualquiera, incluso yo mismo, si se lo coloca en una posición de confianza pública, debería tener su actividad vigilada muy de cerca, mientras trabaja para el público”(Pos. 2528, Kindle). Sin embargo, he llegado a la conclusión de que no ha tomado las medidas adecuadas, acordes con esa gran responsabilidad. Espero que en el futuro, pueda hacerlo mejor.
Comparto su punto de vista cuando escribe: “Como he dicho muchas veces, es nuestro deber y nuestra responsabilidad sagrada que la humanidad sobreviva y prospere. Los médicos han de seguir el juramento hipocrático y los gobiernos trabajar por el bien de la gente. Este es el único camino que podemos seguir que tiene sentido y, si se ignora, la destrucción de la raza humana puede ser el único resultado “(Pos. 2517, Kindle). Y prosigue: “Mi misión es simplemente proporcionar la verdad a toda la gente posible, para que juntos logremos un cambio” (Pos. 3460, Kindle).
Pero debo decir que no tiene en cuenta muchos hechos importantes, en detrimento de las personas. Usted admite que no es “un médico” y “no tiene los diplomas necesarios para convertirse en uno” (posición 1485, Kindle), pero se toma la libertad de exagerar las promesas de curación que no se sostienen cuando se examinan los hechos.
Quisiera justificar lo que uno podría interpretar como una crítica demasiado severa, aunque inevitable, con seis ejemplos:
- Falta de conocimiento
Usted escribe, “la descarboxilación ocurre cuando las moléculas dentro del aceite rotan a la posición delta 9 con el uso del calor para que se vuelvan más y medicinalmente activas” (Pos. 717, Kindle).
En realidad, antes de la descarboxilación, la sustancia ya es delta-9-THC. Respecto al doble enlace de la molécula de THC, nada cambia debido a este proceso. La descarboxilación significa la eliminación del dióxido de carbono. Esta reacción convierte la forma ácida del THC (THCA) presente en la planta, en THC fenólico que es el responsable de la mayoría de los efectos terapéuticos de delta-9-THC. Leí en su sitio web que anima a incorporar en la dieta alimentos basados en plantas, afirmando que las proteínas contenidas en éstas también poseen propiedades anticancerígenas. Sin embargo, no son las proteínas, sino los fitoquímicos como los flavonoides, los que pueden poseer tales propiedades.
- Creencias erróneas
Usted escribe: “Creo que es beneficioso para el paciente que el aceite se administre lo más cerca posible de un tumor o lo que se esté tratando”. Por lo tanto, si tiene problemas intestinales, los supositorios probablemente funcionen mejor, pero si tiene algo como cáncer de garganta o estómago, etc., yo ingeriría el aceite por vía oral “(Pos. 1012, Kindle).
La verdad es que también en casos de carcinomas abdominales, los cannabinoides alcanzan al tumor a través del sistema circulatorio del cuerpo. Uno debe saber algo de medicina básica, para no fiarse de las convicciones, porque pueden resultar erróneas.
- Confundir cantidad y concentración
Usted escribe: “En volumen, sería imposible que una tintura de cáñamo fuera tan potente como el aceite puro. Un paciente podría ingerir sus dosis mezcladas con alcohol, pero ¿de qué le serviría tomar este medicamento con alcohol? “(Pos. 1043, Kindle).
La verdad es que un aceite de cannabis diluido con un contenido de THC al 5%, ingerido por vía oral, tiene el mismo efecto farmacológico que un extracto de cannabis o aceite de cannabis con un contenido de THC del 50%. Esto se debe a que el efecto no se basa en la concentración; si no en la cantidad absoluta. Un mililitro (mL) de extracto de cannabis al 50% contiene la misma cantidad de miligramos (mg) de THC que 10 mL de un extracto al 5%, que es exactamente 500 mg de THC. Solo cuando se aplica externamente, la concentración juega un papel.
- Datos perdidos
Usted escribe que, “De media, aproximadamente una de cada diez personas contará abiertamente al mundo lo que le curó, pero la mayoría de los pacientes tienden a permanecer callados… Ya que la mayoría de las personas no lo darán a conocer, esto hace que mi tarea sea mucho más difícil y muchos seguirán muriendo porque los que han utilizado estos extractos se niegan a explicar lo que han visto “, (Pos. 1192, Kindle). Y además incluye, “Desde 2003, he proporcionado estos extractos a aproximadamente 5000 personas que sufrían todo tipo de problemas médicos. Muchos de estos pacientes tenían varios problemas médicos que requerían atención, y la mayoría fueron controlados o curados con el uso de este aceite “(Pos. 1377, Kindle).
Usted dice que solo uno de cada diez pacientes tratados por usted ofrece comentarios sobre el éxito del tratamiento, y se queja de que la mayoría de ellos no lo hacen. A pesar de esto, afirma de manera intrépida que todos los pacientes con cáncer, incluso aquellos de los que nunca supo, se curaron con el uso de aceite de cannabis. Las afirmaciones basadas en datos tan limitados se vuelven completamente absurdas cuando se las compara con el hecho de que, según la clasificación, existen entre 100 y 1.000 tipos de cáncer.
- Fijación por el THC
Usted escribe que “siempre recomiendo aceites de alta calidad para uso interno en el tratamiento de enfermedades graves. Un extracto de alto grado debe contener niveles de THC en un rango del 80-90% y produce un efecto extremadamente sedante, aunque eufórico al ser ingerido. Cuanto mayor sea la calidad del aceite, más pronunciados serán sus efectos curativos” (Pos. 368, Kindle).
Lo cierto es que además del THC, otros cannabinoides también poseen propiedades anticancerígenas, es el caso del CBD (cannabidiol). Hay indicios de que en algunos tipos de tumores, el CDB, puede jugar un papel más relevante que el THC. Además, existen fuertes indicios de que una combinación de THC y CBD es más efectiva que el THC solo, para ciertos tipos de cáncer. En ese sentido, esto puede ser de gran relevancia cuando el THC no se tolera, y las dosis más altas quedan fuera de consideración. En tales casos, se puede intentar un tratamiento con altas dosis de CBD. Usted desarrolló su teoría hace 15 años cuando el CBD aún no era el foco de atención. De todos modos, nuestro conocimiento sobre la efectividad del cannabis y los cannabinoides en el tratamiento del cáncer, es muy preliminar. Y siempre debemos tener en cuenta los datos nuevos, y ofrecer a nuestros pacientes los mejores consejos y tratamientos posibles.
- Advertencia contra terapias efectivas
Usted escribe: “Desafortunadamente, muchas personas que acuden a mí han sido gravemente dañadas por el sistema médico con su quimioterapia y radiación, etc. El daño causado por estos tratamientos tiene un efecto duradero en las personas, y son los más difíciles de curar. Pero no se desespere, porque incluso si se ha dañado mucho, este aceite todavía tiene una tasa de éxito del 70 al 80% “, (Pos. 970, Kindle).
Ahora llego a un tema muy serio. Usted recomienda que todos los pacientes con cáncer eviten los tratamientos estándar porque la radioterapia y la quimioterapia causan daño. Y dice sin embargo, que todos los pacientes podrían ser curados con su aceite de cannabis. Realmente no conocemos la tasa de éxito de su aceite de cannabis, y tampoco puede saberlo porque sus clientes le han contado muy poco. Pero sí sabemos las tasas de éxito de las terapias estándar. En Alemania, de las 500.000 personas diagnosticadas con cáncer cada año, 280.000 se curan. Esto significa alrededor del 55%. Tan recientemente como en 1980, dos tercios de todos los pacientes con cáncer sucumbieron a su dolencia.
Si la tasa de recuperación de los tratamientos estándar sigue aumentando, y la tasa de recuperación de los tratados con cannabis permanece desconocida, ¿cuántos pacientes han muerto innecesariamente, siguiendo su consejo?
¿Y cuántos pacientes, podrían haber sido curados, si hubieran recibido una combinación de cannabinoides y terapias convencionales, y haber sobrevivido si no hubieran confiado únicamente en el cannabis?
Que usted presente las cosas de manera errónea por no entender la química, la fisiología y la medicina no es lo que tengo en su contra. No es necesario que uno entienda todos los detalles. Sin embargo, esta es una cuestión de vida o muerte, y un tema tan serio, que tiene que ser acusado de no estar a la altura de sus responsabilidades y, por lo tanto, de sus propias aspiraciones.
Se trata del bienestar de las personas que recurren a nosotros. Ellas tienen derecho a recibir la mejor información posible y la que sea más reciente, así como al mejor asesoramiento. Cuando hablamos de un tratamiento médico, especialmente cuando uno se enfrenta a una enfermedad grave, no es suficiente tratar a los pacientes confiando en buenas intenciones y presentando una convicción de manera vehemente.
Estoy convencido de que su reputación entre sus seguidores mejoraría, si pudiera revisar y actualizar sus consejos. Estoy convencido de que las terapias con cannabis y cannabinoides son valiosas en el tratamiento del cáncer. ¡Permítanos pues, abordar su potencial con gran cuidado y conciencia!
Atentamente,
Franjo Grotenhermen
Traducido por Sonia Hernández Tiedra