A partir de Julio de este año, Canadá legalizará la venta de cannabis para adultos. La ciudad de Vancouver en la Columbia Británica o British Columbia es una de las ciudades más dinámicas además de uno de los mejores lugares del mundo para vivir. En esta modélica ciudad canadiense existe un mercado de agricultores de marihuana o como les gusta llamarlo a ellos “cannabis artesanal”
Los frascos de cristal repletos de cogollos de cannabis se pueden observar en los puestos de venta de estos vendedores ambulantes. El mercado es frecuentado por todo tipo de personas que buscan adquirir un poco de hierba para su consumo medicinal y también recreativo.
“Recibimos a todo tipo de personas que llegan aquí”, dice Jesse Slater, que trabaja en uno de los puestos. “De diferentes razas, credo y color; y de diferentes edades también “.
A partir del mes de Julio, Canadá será el primer país de Grupo G7 que va a legalizar la venta recreativa de la marihuana y mientras tanto en la Columbia Británica (BC) se hace la vista gorda a la industria del cannabis abierta la provincia y como ha ocurrido durante muchos años.
“BC siempre ha sido la meca de la marihuana en Canadá”, explica Jesse, quien luce una espesa barba, gafas gruesas y una chaqueta de alta visibilidad. “Es parte de la cultura aquí”.
La industria legal en canadá, según la empresa especializada Deloitte, tendrá un valor anual de 22.600 millones y gran parte del sector económico está haciendo cola para hacerse con parte de este nuevo pastel económico y lo que lleva a algunos periodistas a comparalo con la fiebre del oro.
También, Deloitte cree que el turismo será un actor principal en esta floreciente industria, aunque ya lo es en la actualidad. “Los pasajeros de cruceros son nuestros mayores clientes durante el verano”, dice Bailey Chorny, un trabajador de Vancity Bulldog Café, donde se venden porros al publicito a un precio de 5 dólares.
Vancity Bulldog Café, junto con el New Amsterdam Café que está enfrente, son muy parecidos a los “coffeeshops” holandeses. En estos locales que son ilegales pero tolerados por la autoridades, no se permite fumar, aunque a través de un vaporizador a los clientes se les deja saborear algunas hierbas.
“Una vez se legalice el cannabis, creo que habrá muchos más locales para fumadores y dispensarios en Vancouver”, dice Bailey. “Podríamos ser el Amsterdam de Canadá; ya lo somos “.
Farm Dispensary es un comercio de marihuana situado a unas manzanas de estos “coffeeshops canadienses”. Mitchell Flann trabaja en él y cree que el turismo en la provincia canadiense tiene un enorme potencial.
“El cannabis ya es un gran atractivo para el turismo”, dice. “El turismo de cannabissolo se va a expandir más a medida que el gobierno lo impulse abiertamente”.
One Response
Si, con Canada del lado del Canabis sera dificil mantener su ilegalizaciòn.