Con vientos arriba y abajo de la costa de California, la carretera 101 a menudo se cambia de una carretera de cuatro carriles a una carretera de dos carriles. Al norte de San Francisco, el paisaje urbano da paso a un paisaje rural. Gran parte de la comida y el vino que se consume en los Estados Unidos proviene de California, al igual que la mayoría del cannabis. Como la legalización se llevará a cabo en el Estado Dorado, ¿cómo afectará la intersección entre el turismo, el cannabis y un creciente interés en la producción de alimentos en la zona de los condados del norte conocido como el ” Triángulo Esmeralda “?
Documentales recientes como Fed Up y In Defense of Food han llevado a la gente a pensar más acerca de dónde proviene su comida. Ya hemos visto esta tendencia con el vino; California alberga incontables amantes del vino que buscan una conexión más profunda con la uva y el viñedo.
Las fuentes de cannabis que se vendían en los dispensarios solían ser un misterio. Como una sección de vinos en Safeway llena de merlots y cabernets de marca, las flores de cannabis estaban etiquetadas con el nombre del dispensario y nada más. Con la introducción de regulaciones y la concesión de licencias, los agricultores están saliendo de las sombras con una mayor comodidad para promocionarse a sí mismos y a su arte. Los consumidores están empezando a desarrollar la lealtad del producto, y con eso, el deseo de ver la granja de cultivo y conocer a las personas responsables.
El Triángulo Esmeralda -Mendocino, Humboldt y los condados de Trinity- han tenido durante mucho tiempo la reputación como principal región de cultivo de cannabis del mundo. Esto se debe en gran parte a sus microclimas, suelos únicos y un ambiente óptimo de crecimiento. Sin embargo, debido a la prohibición, los agricultores permanecieron “subterraneos”. En el nuevo mundo de la legalización, uno puede imaginar fácilmente estas granjas albergando a la misma gente que viaja hacia el norte en la 101 para visitar las bodegas. Las ofertas ya están en marcha.
Recientemente me mudé del área de la bahía al Instituto Flow Cannabis en Redwood Valley en Mendocino. Estamos situados en 80 hectáreas propiedad de la familia de los vinos Fetzer, estamos creando un centro de retiro y educación donde los visitantes pueden conocer a los agricultores que cultivan su cannabis y aprender más sobre sus técnicas, todo en un hermoso entorno parecido a una bodega.
Ahora que la legalización del cannabis se está convirtiendo en una realidad en los grandes estados como California, la industria tiene la responsabilidad de crear oportunidades para que las personas hagan conexiones con las plantas, los agricultores y los entornos locales. Con la conciencia alimentaria y agrícola en aumento, la industria del cannabis y su turismo relacionado están comenzando a crear oportunidades para satisfacer esta creciente demanda.
By Amanda Reiman Manager of Marijuana Law and Policy at the Drug Policy Alliance.
