La Administración Distrital, a través de un comunicado oficial de prensa, reiteró su apoyo a la legalización de la marihuana con fines terapéuticos, discusión que se lleva a cabo en el Congreso de la República.
El subsecretario de Asuntos locales de la Secretaría de Gobierno de Bogotá, José Cuesta, señaló que el Distrito respalda el uso terapéutico y medicinal de la marihuana ad portas de la discusión nacional sobre la legalización del cannabis.
“Ante la discusión que cursa en el Congreso de la República de legalizar la marihuana con propósitos terapéuticos y medicinales, la Secretaría de Gobierno ha respaldado la convocatoria de las organizaciones ciudadanas que en su legítimo derecho y autonomía están realizando en el Capitolio Nacional “, dijo.
Actualmente, organizaciones defensoras del cannabis para uso medicinal y terapéutico realizan un foro donde se debate sobre la libertad que se busca para poder implementar su consumo con estos fines.
“En el foro es legítimo abrir una discusión ciudadana, y por supuesto el gobierno de Bogotá Humana quiere presentar unas alternativas que ha venido implementando en la ciudad de Bogotá a través de la Secretaría de Salud con los Camad”, aseguró Cuesta.
El subsecretario aseguró que la Administración Distrital realiza grandes esfuerzos para reducir el índice de criminalidad generada por el consumo de alucinógenos y en la tarea de acabar con la proliferación de las ollas de microtráfico en los barrios.
“En compañía de la Policía Metropolitana, nuestros alcaldes locales y la Secretaría de Gobierno, se adelantan todos los días procedimientos donde hay un enorme esfuerzo institucional para el cierre y clausura de las llamadas ollas del microtráfico, en los barrios, territorios y localidades”, dijo.
Por su parte, Eduardo Vélez, miembro del Carnaval Cannabico Colombiano, explicó que las estadísticas de la Organización Mundial de la salud dan cuenta que solo el 10 o 15 por ciento de los consumidores de sustancias alucinógenas terminan siendo un problema para los sistemas de salud o los sistemas judiciales de los países.
“La mayoría de los consumidores demuestran con sus prácticas cotidianas que no son un problema social”, indicó. Fuente