Aparece alijo de hachís en una playa y la gente se lo lleva a casa

En la costa española aparece un alijo de hachís a la luz del día y los bañistas y turistas se llevan la mayoría del cargamento

Si, ocurrió la semana pasada en España en la playa de la población malagueña de Pedregalejo. Parece ser, que el socorrista intentó recuperar el alijo que apareció con el oleaje, pero la avalancha de personas que estaban tomando el sol y bañándose en la costa fue tal, que hicieron imposible los esfuerzos del vigilante playero por evitar el saqueo.

Una temperatura agradable en la costa mediterránea hizo que la playa se llenase de turistas y personas, que tostándose al sol, vieron como el mar acercaba a la misma playa repleta, un paquete sorpresa causando el furor de los allí presentes, según la prensa local.

La gente que acude a estas bonitas playas con la familia o en compañía de amigos y amigas, normalmente regresan a sus casas dorados por el sol y con unas conchas o cangrejos costeros. Pero esta vez, más de uno regreso con su placa o ladrillo de hachís marroquí y con ojos más brillantes de lo normal, después de que el fardo de droga, ayudado por la olas marinas apareciese como arte de magia entre los bañistas.

La primera en ver el alijo fue una bañista que estaba en la zona y que avisó al socorrista que vigilaba la playa, las pastillas de hachís ya se estaban desprendiéndose del paquete. El socorrista, después de agenciarse del paquete comenzó a cargarlo y despertó la curiosidad de los playeros que iban acercándose a la zona de custodia. «Aquello parecía un hormiguero, estaba lleno de gente», aseguró un presente.

De repente se produjo una avalancha a la que el vigilante de la playa no pudo parar. Parece ser que los bañistas empezaron a alargar la mano sin parar y hasta incluso hubo quien recomendó al socorrista que por su integridad sería mejor que se apartase. La intención de éste trabajador solo era custodiar el alijo y esperar a las autoridades.

Al final, el socorrista tuvo que apartarse y observar como los veraneantes cargaban con las placas de hachís y desaparecían ente la multitud.

Posteriormente más de veinte efectivos de la policía hicieron acto de presencia en la veraniega playa y hasta llegaron a acompañar a varios bañistas a sus coches aparcados para sendos registros. Normalmente estos fardos de “chocolate marroquí” vienen a pesar unos 30 kilos pero esta vez solo se pudieron recuperar 500 gramos.