¡No te pierdas este artículo! Analizando Técnicas de Cultivo en interior y comprobarás cuál es la Más Productiva. ¡Entra YA!
Todo cultivador de marihuana en interior lo que siempre desea es el mayor rendimiento posible, independientemente de la genética cultivada.
Porque para muchos cultivadores su variedad preferida no es necesariamente la más productiva. Pero dentro de sus posibilidades, cuanto más produzca, mejor.
Y esto es lógico, ya que desde el primer momento el contador de la electricidad comenzará a aumentar su ritmo. Y si pagando lo mismo, podemos cosechar 400 gramos en lugar de 300, el ahorro será importante porque en solo tres cultivos conseguiríamos producir lo que en cuatro cultivos.
El mayor consumo de un cultivo interior corresponde a la iluminación. Pero además hay que sumar el conjunto del sistema de ventilación (extractor, intractor y ventilador). Y hasta puede que climatización o calefacción.
A lo que nos referimos es que la factura será la misma se tenga una planta o se tengan diez plantas en un armario de cultivo de 100×100 cm.
En un interior nunca conviene contar con huecos vacíos entre plantas, ya que será un gasto de luz que podríamos aprovecharlo.
También conviene que todas las plantas cuenten con una misma altura. Las plantas más altas marcarán la distancia a la que podemos situar la iluminación y si alguna quedase muy por debajo de esta, la producción se resentirá al no recibir ni la misma cantidad ni la misma calidad de luz.
Así que teniendo en cuenta todo esto… ¿Con qué técnica de cultivo se conseguirá más producción?
Analizando técnicas de cultivo en Interior: Cultivo estándar partiendo de semilla
Este sería el cultivo tradicional. Se suele hablar de cultivos de 3 meses. El primer mes es de crecimiento, suficiente tiempo para que las plantas alcancen unos 30 cm de altura. Los dos meses siguientes serían de floración.
Como hemos comentado antes, conviene no dejar espacios entre plantas, por lo que una buena densidad serían unas 9 plantas por cada m² de cultivo.
Si cultivamos la misma variedad, no tendremos muchos problemas y las plantas crecerán a un mismo ritmo y alcanzarán una altura muy similar.
Inconvenientes
Con este tipo de cultivo conseguiremos una increíble porra de cada planta. Pero, en cambio, las ramas más bajas competirán entre sí por el espacio, se estorbarán y no serán muy productivas.
Realmente conseguiremos una excelente apical de cada planta, una buena producción de las ramas secundarias más altas y próximas a la luz, y una pobre producción en las zonas bajas.
Además, algunas variedades llegan a ser incontrolables por su excesivo crecimiento. La única opción para su cultivo es alguna de las técnicas de cultivo más populares.
Analizando técnicas de cultivo en Interior: Cultivo en SCROG
Un SCROG o “screen of green” (malla verde) consiste en podar o guiar una o varias plantas para limitar su crecimiento vertical y promover el crecimiento horizontal.
Para ello se usa una malla o enrejado a determinada altura de las plantas que servirá de guía y soporte para las ramas.
Para un SCROG se suelen usar pocas plantas en macetas grandes. El número de plantas puede ser muy variable y siempre dependerá del gusto del cultivador.
Con una planta lógicamente cubrir un espacio de cultivo de 1 m² llevará puede que hasta tres meses. Sin embargo, con 4 plantas, la fase de crecimiento puede ser de tan solo 6-7 semanas.
Inconvenientes
No todas las variedades son apropiadas para esta técnica. Generalmente, las genéticas Índica no ramifican tan fuertemente como las sativas.
Algunas incluso no se recomienda podarlas, ya que tardan semanas en recuperarse de la poda. Sativas e híbridos son siempre los que mejor se comportarán, además de que un SCROG servirá para controlar su altura.
El mayor inconveniente es la fase de crecimiento, que como decimos se puede llegar a prolongar hasta tres meses. Porque son 3 meses con todo el sistema funcionando 18 horas y el consumo eléctrico es el más alto.
Analizando técnicas de cultivo en Interior: Cultivo en SOG
SOG o “sea of green” (mar verde) es una técnica que solo es posible partiendo de esquejes. Una planta nacida de semilla no florecerá hasta pasadas las 4-5 semanas, a diferencia de un esqueje que florecerá tenga el tamaño que tenga.
Un SOG básicamente es un cultivo de muchas apicales. Y se debe plantear con un mínimo de 36 esquejes por cada m² de cultivo en macetas de 3 litros. Pero se pueden cultivar hasta 100 esquejes en macetas de 1 litro.
No son necesarios contenedores más grandes, ya que apenas existe fase vegetativa y las raíces no tendrán tiempo a desarrollarse demasiado.
Loo ideal, es que los esquejes en floración no superen los 40 cm de altura, por lo que se cambiaría el fotoperíodo en cuanto cuenten con unos 15-20 cm dependiendo de la genética.
Para las variedades Sativas 20 cm puede ser excesivo, ya que algunas pueden multiplicar x5 su tamaño. Para las genéticas Índica puede ser muy poco, puesto que algunas apenas crecen una vez comienza la fase de transición.
Inconvenientes
Un cultivo en SOG es muy rápido, puesto que la fase de crecimiento será de apenas una o dos semanas. Pero, en cambio, no todos los cultivadores disponen de una zona específica para el enraizado de tantos esquejes.
Analizando técnicas de cultivo en Interior: Cultivo en Main Lining
El main-lining es una técnica que se ha puesto de moda en los últimos años, y no es para menos. Podría considerarse como una mezcla de SOG y SCROG.
Consiste en darle forma a una planta mediante una serie de podas simétricas, con lo que se conseguirán 8 o 16 apicales creciendo a un mismo ritmo y sin ramas secundarias o bajas.
Por un lado, se parece al SCROG por su uniformidad, y por otro al SOG por la gran cantidad de apicales que podremos conseguir por cada m² de cultivo.
Tanto el tipo de maceta como las variedades que mejor se comportan, serían iguales a las de los cultivos en SCROG.
Si optamos por hacer main-lining para conseguir 8 apicales por planta, una buena densidad de plantas es de 4-5 por cada 1 m². Si decidimos optar por 16 apicales, puede que dos plantas por m2 sea suficiente.
En general, las variedades Sativa e híbridos son las más indicadas porque ramifican más y responden mejor a cualquier poda que una Índica.
Inconvenientes
Son prácticamente los mismos que en un cultivo en SCROG. La fase vegetativa se prolongará más de dos meses para conseguir que las plantas tengan la estructura perfecta antes de inducir la floración.
Conclusiones
Con mi experiencia como cultivador, los mejores rendimientos los he conseguido con cultivos en SOG, teniendo en cuenta también varios aspectos importantes.
En un cultivo en SOG se pueden conseguir hasta 6 cosechas al año, pero siempre que se cuente con otro espacio específico donde enraizar gran cantidad de esquejes.
Si se da esta condición, podremos sin duda afirmar que es la técnica más productiva si tenemos en cuenta el rendimiento anual y el consumo anual.
En un cultivo optimizado, será fácil cosechar 400 gramos en cada cultivo. Y 6 cultivos anuales serían 2400 gramos.
En SCROG o Main Lining se pueden conseguir 3 cultivos anuales, ya que la fase de crecimiento suele ser bastante larga, mínimo unos dos meses.
Y si hablamos de rendimiento por cultivo, se puede decir que tanto SOG, como SCROG o Main Lining son técnicas que ofrecen rendimientos muy similares.
La diferencia sin duda la marcará la mano del cultivador cuando todas las demás condiciones son idénticas.