¿Has estado buscando una alternativa para sembrar y cosechar tus plantas de cannabis? En este capítulo de la Guía de Cultivo de Marihuana te enseñamos el cultivo hidropónico de marihuana y todos sus detalles.
Las técnicas de cultivo que se pueden encontrar en la actualidad ponderan métodos que sean más amigables con el medio ambiente, sin que las cosechas dejen de tener una excelente calidad. El mundo cannábico no se queda atrás, pues las plantas de marihuana siempre han sido objeto de diferentes técnicas de cultivo.
Una que ha llamado la atención recientemente, aunque en realidad tiene cientos de años de ser implementada, es la de cultivo hidropónico o cultivo en agua. Aunque pudiera parecer una técnica complicada, es todo lo contrario. En este capítulo de la Guía de Cultivo de Marihuana, te traemos todo lo que necesitas saber para empezar con tu propio cultivo hidropónico de marihuana. Con los materiales adecuados, podrás lograr tu cosecha en agua muy pronto. ¡Toma nota!
¿Qué es el cultivo hidropónico?
Cuando pensamos en sembrar algo, en este caso, la marihuana, lo que se nos viene a la mente es un suelo y tierra donde se van a desarrollar las semillas o los esquejes. La hidroponía propone reemplazar el suelo de tierra o algún otro sustrato por agua.
El cultivo hidropónico de marihuana consiste en que las plantas, en un estado de crecimiento avanzado, es decir, que no sean semillas sino esquejes, se colocan en un recipiente, como un canasto, que contiene el medio de cultivo. Después, estos se colocan por encima de un depósito de agua, el cual contiene nutrientes y se adiciona con piedras difusoras que mantienen el agua aireada.
Al implementar el modelo básico del cultivo hidropónico de marihuana, las raíces quedan expuestas por debajo del recipiente en el que se encuentra la planta. De esta manera, las raíces llegarán al depósito de agua y podrán absorber, según su necesidad, el líquido junto con sus nutrientes. También debes saber que, por la ausencia de tierra, hay menos probabilidades de aparición de plagas.
Sistemas de cultivo hidropónico de marihuana
- Sistemas estacionarios
- Sistemas recirculantes
- Aeroponía
Sistemas estacionarios
Cuando hablamos de un sistema estacionario, nos referimos a un proceso de cultivo hidropónico de marihuana en el que el agua se mantiene estática y no tiene circulación, a la par de que las raíces están expuestas para que puedan llegar al depósito.
A la vez, existen varias formas en las que se pueden implementar los sistemas estacionarios de cultivo hidropónico de la marihuana, como los siguientes:
- De mecha
Implementar la técnica de la mecha podría ser una de las formas más sencillas de practicar en casa para cultivos individuales y pequeños. En este, la planta se coloca en un sustrato y, en la parte más baja de la raíz, se coloca una mecha o pabilo elaborado también con un sustrato.
La mecha se puede elaborar a partir del mismo sustrato en el que se encuentra la planta de marihuana. Este debe quedar en contacto con el agua para que se pueda absorber junto con los nutrientes.
- Raíz flotante
Este es, quizá, el método más sencillo de todas las formas en las que se puede practicar el cultivo hidropónico de marihuana. Sin embargo, sí requiere de un constante cuidado, pues también es fácil que falle.
Para hacerlo, debes hacer que la planta de marihuana se encuentre flotando en una especie de balsa o tabla, la cual debe estar compuesta de un sustrato nutritivo. Las raíces deben quedar libres, de manera que, cuando la balsa con la planta esté flotando en el agua o solución nutritiva, las raíces queden por completo sumergidas. Es importante que consideres que un cultivo a largo plazo también requiere que coloques una bomba de aire o piedras dispersoras de oxígeno.
Sistemas recirculantes
Para lograr que tu cultivo hidropónico de marihuana tenga aún más posibilidades de éxito, los sistemas recirculantes pueden ser tu primera opción. Estos requieren de más inversión, considera que deberás comprar algunos aparatos para empezar a cultivar tu cannabis de esta manera.
Por sistema recirculante entendemos todo aquel que, a través de una bomba, mueve la solución nutritiva o el agua para llevarla hasta el sustrato en el que se encuentra la planta. Existen tres formas de implementar los sistemas recirculantes que son las siguientes:
- Por goteo
La planta de marihuana, junto con su raíz, se coloca en un sustrato que, a su vez, estará por encima de una solución nutritiva o agua, con el suficiente espacio para que no llegue a tocarla.
Después, una bomba de agua con temporizador será la encargada de que, periódicamente, se riegue por goteo a la planta de marihuana. Si hubiera algún exceso en el riego por goteo, el líquido se drenará por el sustrato y caerá de nuevo en el depósito, por lo que podrá volver a emplearse hasta que se ocupe por completo.
- Inundación y drenaje
Como su nombre lo dice, este método requiere que, a través de una bomba con temporizador, se inunde una bandeja de cultivo en la que se pueden encontrar varias plantas en su sustrato. Se deja ahí por un tiempo determinado y, una vez concluido, la bandeja se drena de todo el líquido.
Para poder llevarlo a cabo de manera adecuada, tienes que saber cuáles son las necesidades de las plantas de marihuana. No todas las variedades de cannabis necesitan la misma humedad, temperatura, nutrientes y periodicidad de riego. Es por eso que debes estar informado de los requerimientos de tu cultivo de cannabis para poder programar cuántas inundaciones requiere al día y por cuánto tiempo.
- NFT
NFT son las siglas para Nutrient Film Technique. Es una de las técnicas más productivas y que más éxito tienen en lo que se refiere al cultivo hidropónico de marihuana. Consiste en brindar un suministro constante, sin interrupción, de una solución con nutrientes.
A través de una bomba, se lleva la solución nutritiva de un depósito con la solución a otro en donde se encuentran las plantas en su sustrato, con las raíces expuestas para que siempre estén en contacto con el agua y la solución. La desventaja es que, en caso de un corte de luz, la raíz puede perder su humedad y secarse, lo que traería la muerte o una severa desnutrición de la planta.
Aeroponía
La aeroponía es el método de cultivo hidropónico de marihuana más efectivo. Sin embargo, es el que también necesita de instrumentos más complicados y la seguridad de que no tendrá interrupciones, pues podría hacer que se pierda todo el cultivo.
Esta técnica consiste en que, sin estar plantadas en un sustrato, las raíces de las plantas de cannabis deben encontrarse dentro de un medio oscuro y aislado, dejando las hojas y frutos por fuera de la caja donde se hayan colocado. Al interior del entorno de cultivo donde se encuentran las raíces, habrá un tanque de agua con una solución de nutrientes. A través de una bomba, se nebulizan las raíces con esta solución cada cierto tiempo, que suelen ser espacios de minutos.
Al igual que en todos los sistemas hidropónicos que dependen de la electricidad, puede haber un severo riesgo de que las raíces se sequen y, por consiguiente, también lo haga la planta, si hay un corte de electricidad. Es por eso que muchas de las personas que cultivan optan por tener baterías independientes que mantengan en funcionamiento a estos dispositivos.
¿Qué es un sustrato para cultivo hidropónico de marihuana?
Ahora que ya has visto cómo funciona el cultivo de cannabis en hidroponia, te habrás dado cuenta que la mayoría requiere que una parte de las plantas se encuentre en un sustrato. Esta es una parte vital, pues dependiendo del tipo de sustrato será la manera en la que la planta procese los nutrientes del agua.
Básicamente, el sustrato es un material sólido en el que se busca darle soporte físico a la parte superior de la planta. Puede tener orígenes vegetales, orgánicos y hasta sintéticos, pero debe cumplir algunas características:
- El menor contenido posible en cualquier tipo de sal
- Estructura firme para resistir a la planta y el constante drenado de líquido
- Capacidad elevada para retener agua y porosidad para procesar el oxígeno
- pH neutro o lo más cercano a la neutralidad posible
Tipos de sustrato para cultivo hidropónico de marihuana
- Tierra negra o composta
- Turba
- Perlita
- Arena
- Fibra de coco
- Cascarilla de arroz
- Leca reciclada
- Lana de roca
- Guijarros de arcilla
- Vermiculita
Tierra negra o composta
La tierra negra se forma a partir de la descomposición de materia orgánica y es uno de los elementos más comunes a los que se recurre para casi cualquier tipo de cultivo. Su gran beneficio radica en que, de manera natural, está llena de nutrientes benéficos para el crecimiento de la vida vegetal.
Además, por su propia consistencia más bien irregular, es un medio que retiene el agua durante suficiente tiempo. Si usarás una solución nutritiva en tu cultivo hidropónico de cannabis, la composta la retendrá el suficiente tiempo para que las raíces absorban lo que necesitan antes de que se drene al depósito.
Turba
La turba, semejante a la composta, es un sustrato producto de la descomposición, pero en este caso solo es material vegetal descompuesto. Existen dos tipos de turba, la negra y la rubia, cuyo origen depende de las condiciones ambientales en las que se consigue.
Para el caso del cultivo de cannabis en hidroponia, lo ideal es que consigas la turba negra, pues su composición es mucho más firme y tiene un pH más cercano a la neutralidad.
Perlita
La perlita es uno de los materiales a los que más recurren los profesionales en el cultivo hidropónico. Se trata de una especie de vidrio volcánico que tiende a la expansión cuando es expuesto a altas temperaturas.
Debido a la porosidad en la que resulta una vez que se ha formado, es un material que retiene altos niveles de oxígeno y lo mantiene en la especie vegetal que se le ha plantado. Añadido a esto, como casi todo el material volcánico, tiene nutrientes particulares que potencian el crecimiento de la planta.
Arena
Cuando sugerimos usar la arena para que empiece tu cultivo de marihuana hidropónica, no nos referimos a la arena usual de la playa. Existen diversos tipos de arena en el mercado que han sido recolectados porque sirven específicamente para el cultivo.
Lo que tienes que buscar en la arena que vayas a comprar es que tenga una gran capacidad de drenaje, para que retenga solo el agua que necesita y la demás la drene. Busca también que la arena sea gruesa, pues así podrá retener mejor el oxígeno.
Fibra de coco
La fibra de coco no es otra cosa que la cáscara de coco molida. Puedes obtenerla directamente de la fruta, una vez que esté seca, o conseguirla en tiendas especializadas, en las que vendrá adicionada con más nutrientes.
La gran ventaja de la fibra de coco es que combina la porosidad necesaria para permitir la aireación y retención de oxígeno, así como para mantener húmeda la planta. Al mismo tiempo, su consistencia para proteger la carne del coco permite que, una vez molido, sea un excelente ambiente para la germinación.
Cascarilla de arroz
Tal como su nombre lo indica, este tipo de sustrato para el cultivo hidropónico de marihuana se obtiene cuando, después de la molienda del grano de arroz, se separa la cáscara. Este sustrato es uno de los mejores para retener la humedad, pero esos no son todos sus beneficios.
A la par de absorber agua, le brindará a la parte de la planta que retenga nutrientes importantes como fósforo y potasio, que son ampliamente conocidos en el mundo de la cultivación por ser beneficiosos para el crecimiento de la raíz. Debido a que el cultivo hidropónico depende tanto de la salud de las raíces, verás un crecimiento próspero con este sustrato.
Leca reciclada
La leca reciclada, o leca plástica, ha tomado una gran popularidad como uno de los pocos sustratos que se componen de material 100% reciclado, en este caso, de plástico. Tiene múltiples usos y beneficios, destacando en mayor medida el que tenga una gran capacidad de drenado.
Aunado a esto, sirve también para mantener una temperatura estable en las raíces, que a su vez ayuda a balancear el pH de las raíces y mantenerlas oxigenadas.
Lana de roca
Para crear la lana de roca se emplea roca volcánica que, bajo ciertos procesos, se convierte en un material muy similar a la lana, de ahí el nombre de este sustrato. De todos los materiales que te hemos mencionado antes, este es quizá el que mejor retiene la humedad y todos los nutrientes que vienen en el agua o la solución del cultivo hidropónico.
Para usarla en tu cultivo, es necesario que pongas la lana de roca en un recipiente diseñado para la hidroponía o que tenga forma en la que se deje drenar el agua. Además, puedes añadir directamente en este sustrato los nutrientes con los que quieras alimentar tu planta de marihuana.
De preferencia, busca también algunos aditamentos o sustancias balanceadoras de pH, pues la lana de roca tiende a un pH alto.
Guijarros de arcilla
Los guijarros de arcilla son la mejor opción a la que puedas recurrir para que las raíces de tu planta de cannabis se encuentren llenas de oxígeno. Este material se compone de pequeñas piezas moldeadas de arcilla, con una gran porosidad y cierto grado de maleabilidad.
Por su forma, como de pequeñas piedras, requerirás de un recipiente con la suficiente capacidad de permitir el paso de agua, además de un nivelador de pH. Algunas personas también prefieren combinar los guijarros con algún otro sustrato que contenga nutrientes naturalmente.
Vermiculita
La vermiculita, como sustrato, es uno de los más costosos que vas a encontrar en el mercado, pero también va en proporción a los beneficios que ofrecerá a tu cultivo hidropónico de cannabis. Se trata de un mineral que contiene hierro y magnesio.
Por sus propiedades, es capaz de retener el agua o la solución nutritiva y mandarla hacia arriba de la planta, por lo que reparte de forma más equitativa los nutrientes que está recibiendo. Esto lo hace ideal para que lo ocupes como una mecha o pabilo. Al retener tanta agua, es preferible que seas cuidadoso con las cantidades que le proporcionas, por lo que se hace necesario que la combines con otro sustrato o con una bomba con temporizador.
¿Cuáles son los materiales que se usan para el cultivo hidropónico de marihuana?
Además del sustrato y de los aparatos que son propios del método en en el que pondrás en práctica el cultivo de marihuana en hidroponía, es probable que necesites de algunos otros materiales para el cultivo. Lo básico que necesitas conseguir es:
- Depósitos, en donde colocarás la solución con nutrientes o agua.
- Contenedor oscuro de alta capacidad, dependiendo de la modalidad de cultivo hidropónico que elijas.
- Iluminación, que puede ir por encima de la planta para complementar el trabajo de la hidratación.
- Piedras difusoras, que son las que brindarán ciertas cantidades de oxígeno al líquido y que después se transportará a las raíces.
- Macetas, una bandeja perforada o contenedores que puedan permitir el paso del agua de regreso al depósito y ayuden al ahorro de espacio.
- Medidores de pH y de temperatura.
Ventajas y desventajas del cultivo hidropónico de marihuana
Como en cualquier forma de cultivo, te encontrarás que hay ventajas y desventajas. El caso de la hidroponía no es diferente y, por eso, te contamos el lado positivo y negativo de esta práctica, para que consideres si es lo que necesitas para tus plantas de cannabis.
Ventajas
- El crecimiento de la planta es considerablemente más rápido, por lo que podrás cosechar antes del tiempo promedio de un cultivo tradicional en tierra.
- Por la forma en que llega los nutrientes a la planta, estos pasan directamente a las raíces del cannabis, por lo que disminuye el tiempo de absorción de nutrientes necesarios y el desperdicio de estos.
- Es un método ecológico, pues el agua que emplees llevará un ciclo hasta que sea utilizada por completo, y no existe el exceso que usualmente hay en el riego.
- Las semillas y las posteriores plantas que sean “hijas” de las que hayas cultivado en hidroponía serán más resistentes.
- Debido a la forma en la que se cultiva, la calidad del cannabis una vez que es cosechada tiende a ser superior a otros tipos de cultivo. Presenta sabores potenciados y efectos más claros.
- Hay mayor posibilidad de ausencia de plagas y enfermedades.
- Hay un mayor aprovechamiento del espacio por la disposición de los elementos.
Desventajas
- Debido a que necesita de depósitos, bombas de agua, bomba de oxígeno, sustratos especiales y otros materiales, la primera inversión que hagas para construir el cultivo será grande.
- Los métodos que requieren electricidad pueden tener un alto impacto ambiental y en la economía.
- Se requiere usar agua de la mejor calidad posible, lo cual también representa un gasto extra.
El cultivo hidropónico de marihuana es toda una novedad entre los cultivadores nuevos y algo que recomiendan quienes saben de formas de cultivo de la cannabis. ¿Te animarás a probarla? Te garantizamos que verás resultados increíbles en tu cosecha de hierba gracias a los beneficios del método.
Sigue explorando nuestra Guía de Cultivo de Marihuana para que encuentres muchas más alternativas para que las implementes en tu hogar. No olvides visitar el blog de La Marihuana para más consejos y formas de aprovechar tu cosecha.