Conoce cómo interactúa el cannabis y el VIH a través de medicamentos elaborados con CBD y si este puede o no ser un buen tratamiento alternativo.
Los posibles usos medicinales del cannabis son un tema que ha suscitado un interés creciente en los últimos años y en los que, gracias a los avances en la legalización de la marihuana, ha sido posible incursionar. Un área en la que ha ganado atención entre los investigadores es con respecto al VIH.
¿Es cierto que existe alguna relación entre el cannabis y el VIH y que puede funcionar como un tratamiento alternativo? En este artículo, explicaremos cuáles son las implicaciones de mezclar cannabis y el VIH y, en todo caso, los beneficios o riesgos asociados al consumo de cannabis para las personas que viven con esta enfermedad, tomando en cuenta las investigaciones actuales y los hallazgos que ha habido en esta área.
¿Cuáles son los beneficios del cannabis en el tratamiento del VIH?
- El THC reduce el deterioro cognitivo
- Alivia el dolor neuropático periférico
- Disminuye problemas estomacales causados por la medicación
- Inhiben la propagación del virus en su última etapa
- Favorece la relajación y sensación de bienestar
El THC reduce el deterioro cognitivo
De acuerdo con estudios publicados en el National Library of Medicine, el THC tiene potencial como tratamiento para eliminar la inflamación neuronal que sufren los pacientes de VIH, consecuencia del flujo de entrada de monocitos.
Este efecto antiinflamatorio del cannabis también serviría para disminuir hasta en un 47% el deterioro cognitivo que se observa comúnmente en las personas con VIH. En específico, ayuda a tener una mayor fluidez verbal y un mejor rendimiento en diversas áreas de aprendizaje.
Alivia el dolor neuropático periférico
Una consecuencia del VIH es la neuropatía periférica, que se presenta como una sensación de hormigueo o entumecimiento en manos y pies. Esto se debe a que el tratamiento antirretroviral, necesario para controlar la presencia del virus en el cuerpo, afecta el sistema nervioso periférico y puede dañar las fibras nerviosas que producen la sensibilidad de las extremidades. Al igual que funciona con dolores articulares, el aceite de cannabis ayuda a combatir este malestar.
Disminuye problemas estomacales causados por la medicación
Cuando se empieza un tratamiento para VIH, es común que se presenten malestares estomacales, entre ellos náuseas, vómito o diarreas, debido a que el organismo no está acostumbrado al medicamento.
En este sentido, una de las ventajas de mezclar cannabis y el VIH es que los activos de la planta son capaces de aumentar el apetito, lo que facilita la toma de medicamentos que requieren de una ingesta con alimentos y permite recuperar el peso perdido.
Cabe mencionar que, en el caso de las molestias generadas por quimioterapias para combatir el cáncer, ya existen medicamentos elaborados a base de CBD que pueden eliminar náuseas y mareos. Sin embargo, aún no se cuenta con productos específicos para pacientes con VIH.
Inhiben la propagación del virus en su última etapa
Investigaciones de la Facultad de Medicina del Monte Sinaí de Nueva York sugieren que los tratamientos con cannabis podrían ser una opción para pacientes que enfrentan la última etapa del SIDA, ya que ayudan a disminuir su propagación.
De acuerdo con esta investigación, se plantea que los cannabinoides presentes en la marihuana son capaces de bloquear el proceso en el que el VIH infecta las células T del sistema inmune, durante la fase terminal. Como resultado, podrían fabricarse antivirales que sean eficaces para suprimir la infección. Sin embargo, hace falta avanzar en estos estudios.
Favorece la relajación y sensación de bienestar
Según una encuesta llevada a cabo por el Centro Médico de San Mateo en California, más de la mitad de los pacientes con VIH que fuman marihuana lo hacen por motivos psíquicos en vez de físicos.
De un total de 58 encuestados que afirmaron haber usado cannabis en las últimas cuatro semanas, el 57% dijo utilizarlo para aliviar la ansiedad o la depresión, mientras que solo el 28% lo usa para disminuir el dolor.
¿Cómo interactúa el cannabis con medicamentos para el VIH?
Cuando se trata de cannabis y el VIH, el consumo de esta planta puede potenciar los efectos secundarios de ciertos medicamentos o disminuir la eficacia de los mismos, al interactuar con las enzimas responsables de metabolizar las medicinas ingeridas.
Algunos de los medicamentos con los que no tiene una buena interacción son:
- Atazanavir (vendido comercialmente como Reyataz). Se trata de un medicamento inhibidor de la proteasa, que se receta para tratar la infección de VIH, reduciendo la posibilidad de desarrollar SIDA o enfermedades relacionadas. Sin embargo, de acuerdo con investigaciones de la Universidad de Liverpool, si se mezcla cannabis y el VIH que está siendo tratado con atazanavir, la consecuencia es una disminución en la concentración de esta sustancia en el cuerpo.
Esto hace que pierda su efectividad terapéutica, y al mismo tiempo un aumento en los efectos psicoactivos de la planta de marihuana. Aunque las evidencias aún no son suficientes para afirmar que esta combinación es contraproducente, no se recomienda realizarla.
- Efavirenz (vendida como Sustiva). Es un antiviral cuyo objetivo consiste en evitar que el virus de VIH se propague por el cuerpo del paciente. Entre los efectos secundarios más comunes se encuentra la dificultad para dormir, mareos, náuseas o dificultad para concentrarse, síntomas que aparecen con más frecuencia al combinarse con cannabis.
- Etravirina (comercializada como Intelence). Las notas de este medicamento inhibidor de la transcriptasa inversa no análogo de nucleósidos (ITINANs, por sus siglas en inglés) advierten a los consumidores de cannabis acerca de posibles efectos secundarios como dificultad para respirar, sensación de debilidad o desmayo, mareos y problemas para mantenerse consciente al mezclar el THC con este producto.
Recomendaciones antes de combinar cannabis y el VIH
Si eres consumidor de cannabis, que vive con VIH, te recomendamos tomar en cuenta lo siguiente.
- Considera el aumento de efectos secundarios. Entre los efectos secundarios que pueden presentarse en mayor medida al mezclar cannabis con VIH se encuentran los mareos, somnolencia o cambios en la presión arterial.
- Realiza un control de la carga viral y el recuento de CD4. El control frecuente de la carga viral y el recuento de CD4 es crucial mientras se consume cannabis junto con medicamentos para el VIH. Esto ayuda a asegurar la eficacia de la medicación y a evaluar cualquier impacto potencial del cannabis en el control viral.
- Empieza con dosis bajas y ve poco a poco. Si decides consumir cannabis mientras tomas medicación para el VIH, empieza con dosis bajas y ve aumentando poco a poco según sea necesario. Este enfoque ayuda a calibrar cómo el cannabis puede estar afectando a tu cuerpo y permite realizar ajustes cuidadosos.
Existen reportes que plantean que los antirretrovirales pueden incrementar el efecto del THC y causar sensación de confusión o desorientación, que se conoce como un mal viaje.
- Elige métodos de consumo que no impliquen fumar. Fumar cannabis puede irritar el sistema respiratorio y puede ser motivo de preocupación para las personas con complicaciones pulmonares relacionadas con el VIH o inmunodepresión. Considera optar por métodos de consumo alternativos como vaporizadores o comestibles.
- Asiste a consultas médicas ante cualquier cambio que notes. Comunícate regularmente con tu médico sobre tu consumo de cannabis, tus preocupaciones y cualquier cambio en tu tratamiento del VIH. Solo un profesional puede orientarte, responder a tus preguntas y vigilar tu salud en general. Además, la confidencialidad del paciente obliga a los médicos a no denunciar casos de consumo ilegal, si esto te preocupa.
Antes de considerar realizar cualquier cambio en tu tratamiento o empezar a probar con cannabis para el VIH, es crucial consultar con un profesional de la salud con experiencia tanto en el manejo del VIH como en la medicina a base de marihuana.
Infórmate sobre los medicamentos específicos para el VIH que estás tomando y sus posibles interacciones con el cannabis, tomando en cuenta tu propio metabolismo. Recuerda que en La Marihuana encontrarás la información que necesitas para un consumo responsable.
