A pesar de ser el país pionero en la legalización, el cannabis medicinal en Uruguay tiene algunas trabas burocráticas que el Gobierno quiere resolver.
Es por ello que, tal como publica La Diaria, el ejecutivo anunció un nuevo “marco regulatorio” para agilizar los negocios en torno al cannabis medicinal en Uruguay.
Puntualmente, se busca aumentar la producción de la hierba que se usa para tratamientos terapéuticos y fomentar las exportaciones.
Los cambios que anunció el prosecretario de Presidencia, Rodrigo Ferrés, pasan por “facilitar procedimientos y registros”.
Ferrés, anunció en una conferencia de prensa que el presidente Luis Lacalle Pou firmó un decreto sobre la producción y comercialización de cannabis medicinal en Uruguay.
Concretamente, dijo que este nuevo texto sustituye el Decreto 46 del año 2015, o sea, la reglamentación de la Ley de Regulación y Control del Cannabis, aprobada en 2013.
Este es “un decreto fundamental en el que se actualizan las normas de producción y comercialización del cannabis psicoactivo y no psicoactivo para uso medicinal”, indicó.
“Tenemos la convicción de que este nuevo decreto es un paso más para el desarrollo de la industria del cannabis medicinal en Uruguay”, agregó.
Luego señaló que “este marco regulatorio va a fomentar mayor producción”.
“Se busca un funcionamiento más eficiente en los procedimientos de regulación y de fiscalización de las actividades de uso del cannabis, tanto para la investigación científica como para la producción e industrialización”, expresó.
Ferrés también dijo que “se facilitan mecanismos para obtener autorizaciones para la exportación tanto de materia prima como de productos semielaborados con cannabis, los cuales ya no requieren el procedimiento de registro ante el Ministerio de Salud Pública (MSP) como sucedía anteriormente”.
Por otro lado, “se estableció que los licenciatarios pueden tercerizar algunas de las etapas de la cadena de producción”.
“El decreto lo que hace es facilitar procedimientos, facilitar registros, que en determinadas cuestiones o etapas no necesariamente se hagan trámites ante el MSP, cuando todavía no hay un medicamento, sino ir directamente al IRCCA (Instituto de Regulación y Control del Cannabis)”, explicó.
Cannabis medicinal en Uruguay de cara a un nuevo decreto
El funcionario aclaró que este “no es el único decreto” en el que avanzó el gobierno.
“Ya estamos trabajando en un próximo decreto reglamentario de la Ley de Acceso al Cannabis Medicinal en Uruguay por parte del sistema de salud”, señaló.
“Cuando en 2020 el gobierno asumió esta administración decidió impulsar fuertemente la industria del cannabis medicinal, una industria no tradicional pero que sin dudas está generando inversión, recursos, puestos de trabajo y sobre todo innovación, ciencia y tecnología”, dijo Ferrés,
El cargo recordó que en agosto del año pasado “se dictaron dos decretos que permitieron la exportación de productos, que estaban sin poder ser comercializados, de zafras de años anteriores”.
La decisión del Gobierno al respecto del cannabis medicinal en Uruguay llega en el momento preciso.
Es que. desde la industria, se advirtió que Argentina y Brasil preparan regulaciones “más ágiles”.
Empresarios piden más competitividad para el cannabis medicinal en Uruguay
Muchos expertos saludaron al nuevo decreto del Gobierno al respecto del cannabis medicinal en Uruguay, incluso ven algunos avances en nuevo marco jurídico, pero lo creen “conservador”.
Uno de ellos es Marco Algorta, de la firma Khiron Life Sciences, expresidente de la Cámara de Empresas de Cannabis Medicinal.
El empresario aseguró a La Diaria que el nuevo decreto reglamentario de la Ley de Regulación y Control del Cannabis medicinal en Uruguay anunciado por el gobierno “es un paso adelante”.
Sin embargo, advirtió que se da “de forma muy conservadora”.
En la misma línea fue el ex secretario general de la Junta Nacional de Drogas (JND) Diego Olivera, quien dijo que el nuevo marco jurídico “es positivo”.
No obstante, afirmó que “Uruguay se está perdiendo la oportunidad de desarrollar un programa de cannabis medicinal con la mayor seguridad para los pacientes”.
Algorta manifestó que entre los principales cambios figuran algunas nuevas definiciones sobre qué es la materia prima de cannabis y qué es, en cambio, un producto semi elaborado.
Además, destacó que para “la exportación y la importación” de materias primas y productos semi elaborados habrá mayores facilidades, porque se eliminó el trámite ante el MSP.
“Ese siempre fue un punto clave, porque es muy difícil registrar las cosas en el MSP, porque ellos se basan en farmacopeas que no incluyen al cannabis como una planta de uso tradicional en salud”, explicó.
Por otro lado, dijo que “hay una pequeña flexibilización” en trámites ante la Secretaría Nacional para la Lucha contra el Lavado de Activos y el Financiamiento del Terrorismo.
También se refirió a un avance en “el tema de las investigaciones científicas”, que “ya no necesitan algún tipo de autorización del MSP”.
Algorta dijo que con esto las empresas ganarán “tiempo”, por lo que “es un paso importante”, pero “el partido se va a jugar en la regulación de la Ley 19.847”, del año 2019.
La misma declara “de interés público las acciones tendientes a proteger, promover y mejorar la salud pública” mediante productos basados en cannabis, así como “el asesoramiento médico e información sobre beneficios y riesgos de su uso”.
Cannabis medicinal en Uruguay, mejor que antes pero con desventaja
Algorta reconoce que con el decreto anunciado por el gobierno en materia de cannabis medicinal en Uruguay “estamos mejor que antes”.
Sin embargo, la “gran preocupación” es que “tanto en Brasil como en Argentina” hay proyectos de ley “que son mucho más ágiles que lo que permite este decreto”, evaluó Algorta.
“No es un decreto que nos pueda proyectar a largo plazo ni nada por el estilo”, subrayó.
También opinó que estos países “parecen estar caminando a una mayor velocidad”, pese a que “Uruguay está más adelante en su posición”.
“Lo que está mostrando es que sigue caminando, pero a un paso más lento de lo que parecen venir otros competidores regionales, que pueden llegar a ocupar los espacios que Uruguay no está aprovechando en este momento en el mercado del cannabis”.
“Uruguay no termina de abrazar la oportunidad cannábica con este decreto”, ya que esta reglamentación tiende a facilitar la tarea de las empresas, pero “a nivel pacientes” no implica avances, sostuvo Algorta.
Por todo esto, expresó que “es un decreto que va para adelante, pero de forma muy conservadora”.
“Al paciente uruguayo no le cambia nada”, finalizó.
Por su parte, Olivera dijo que la nueva reglamentación “establece un carril específico para la exportación de materias primas o productos semielaborados a partir del cannabis, que eso no existía en la normativa anterior”.
“Es positivo, diversifica las posibilidades de la industria”, agregó el ex cargo.