Conoce el top 5 de plagas en el cultivo de marihuana

Si hay algo que cause terror son las plagas en el cultivo de marihuana y sobre todo en estas fechas de calor en exterior .

En nuestro post de hoy os hablaremos de las peores plagas en el cultivo de marihuana. Desde como detectarlas, hasta como prevenirlas y dado el caso eliminarlas.

Top 5 de plagas en el cultivo de marihuana

El cannabis es una planta muy apetecible para muchos insectos que habitan cualquier exterior. La gran mayoría no se sentirán atraídos por nuestras plantas, tan sólo unas pocas podrán convertirse en un peligro para el cultivo.

Mosca blanca

La mosca blanca es un pequeño insecto que causa importantes daños en las plantas. Es una de las plagas más extendidas y dañinas para la agricultura.

Se trata de un insecto volador de un tamaño de 1-1,5 mm. Su color puede variar entre blanco o blanco-amarillo, de ahí su nombre.

Es una plaga que se extiende con rapidez. Una solo hembra puede llegar a poner hasta 500 huevos. Su promedio de vida alcanza los 55 días en condiciones óptimas.

Por su tamaño y color, es complicado detectarlos en las plantas. Pero sí será muy sencillo saber si la planta sufre ataques de mosca blanca por las marcas que dejan en las hojas.

Se alimentan de la savia de las plantas, y dejan unas marcas circulares muy características. Además producen un líquido azucarado que impregna las hojas con negrilla.

También como toda plaga, son portadores de virus. Si proceden de alguna otra planta enferma, es posible que transmita esa enfermedad a las plantas de cannabis de nuestro cultivo.

Trips

Los trips son una de las plagas más comunes en el cultivo de marihuana. Se trata de pequeños insectos neópteros, es decir que poseen alas que pueden plegar sobre el abdomen.

Suelen ser de color amarillo, castaño o negro con bandas alternantes claras y oscuras. Su forma es cilíndrica y alargada. Generalmente su tamaño es de unos 3mm, aunque pueden alcanzar los 6mm de longitud.

El ciclo biológico dura de 15 a 18 días. Esta variación depende principalmente de la temperatura ambiente. Son capaces de producir hasta12 generaciones por año y cada individuo puede vivir de un mes a un año.

Tienen un aparato bucal raedor-chupador con el cual raen y laceran la superficie de tallos y hojas de las plantas de cannabis. Después, succionan la savia derramada.

Hay especies sin alas y aladas. En este último caso las alas son muy estrechas y con un aspecto de plumas. En general no son buenos voladores pero sí pueden saltar.

Sus ataques son fácilmente reconocibles. Dejan unas marcas similares a las de la araña roja, en ocasiones formando pequeños surcos longitudinales.

Mosca del sustrato

Aunque es una plaga del cultivo de marihuana que se asocia sobre todo en interiores, también causa grandes problemas en cultivos de exterior.

La mosca del sustrato o sciaridae es una pequeña mosca de entre 3 y 5 mm. Son de color negro, delgadas, con largas patas, largas antenas y alas con venas muy marcadas.

Es una plaga que habita el sustrato. Y realmente las moscas del sustrato son inofensivas para las plantas. Lo peligroso son sus larvas.

Los adultos viven unos 10 días. Pero durante este tiempo, una hembra puede llegar a poner hasta 300 huevos en condiciones óptimas.

Les encanta los suelos húmedos y ricos en materia orgánica. Además la dieta de las larvas de mosca blanca incluye los pequeños pelos radiculares de las plantas.

Como consecuencia, se reduce la asimilación de nutrientes. La planta puede mostrar un marchitamiento repentino, pérdida de vigor, crecimiento lento y/o el amarillamiento de las hojas.

Orugas

Es una de las peores plagas, temida por los cultivadores de cannabis en exterior y especialmente en la fase de floración. Son muy voraces y en muy pocos días pueden causar graves problemas.

Las orugas son larvas de mariposas, tanto diurnas como nocturnas. Su actividad se desarrolla a lo largo de los meses de primavera y verano, lo que coincide con la temporada de cultivo.

Los adultos realizan las puestas de huevos generalmente en la propia planta. A los 7-14 días dependiendo de la especie, los huevos eclosionan y las pequeñas orugas comienzan a devorar las hojas.

En floración, las orugas se introducen en los cogollos para protegerse. Y una vez dentro no cesan de alimentarse. Sus excrementos además, son causantes del hongo botritis.

Los cogollos comenzarán a pudrirse desde dentro, aunque exteriormente no se aprecie. Incluso una vez la planta de marihuana se cosecha y se procede al secado, las orugas continúan su incesante actividad.

Araña roja

La araña roja es posiblemente la plaga más temida en el cultivo de marihuana. Tanto en interior donde es más agresiva, como en exterior.

Se trata de un ácaro también conocido con el nombre de ácaro de dos puntos. Y pertenece a la familia de los tetraníquidos o Tetranychidae. Los ácaros de esta familia, son capaces de tejer telarañas.

Es de muy pequeño tamaño, aproximadamente de 0.50 mm de largo y 0.30 mm de ancho. En primavera, con la subida de la temperaturas y el descenso de la humedad, comienzan su actividad.

Se sitúan en el envés de las hojas. Y ahí comienzan a aparearse y realizar las puestas de huevos. Cada hembra llega a poner de media 110-120 huevos durante su vida.

Se alimentan de los contenidos celulares de las hojas de cannabis. Los absorben dejando pequeñas marcas pálidas que contrastan con el color verde de la epidermis.

Aunque las lesiones que causa cada araña roja son muy pequeñas, cuando una planta es atacada por cientos o miles de estos ácaros, las lesiones llegan a ser importantes.

Las plantas pierden la capacidad para realizar la fotosíntesis. Esto se traduce en una gran reducción de la producción de nutrientes. En ocasiones y debido a los daños, las plantas pueden llegar a morir por desnutrición.

Mejor forma de prevención de plagas

La manera de no tener plagas es mediante la prevención a lo largo de todo el cultivo de marihuana. Desde la siembra, hasta unos 15 días antes de la cosecha.

Tengamos en cuenta que cualquier ataque de cualquier plaga supone un estrés para la planta. Empleará parte de su energía en reponerse de los daños en lugar de emplearlo en su desarrollo.

Una medida para prevenir plagas es mantener limpio el cultivo. Eliminaremos malas hierbas, no dejaremos que se acumulen hojas caídas en el sustrato y evitaremos cultivar cerca de especies propensas a plagas.

También en el mercado existen varios productos que nos irán muy bien en esta prevención. Por ejemplo el jabón de potasio, el aceite de neem o la tierra de diatomeas.

Todos ellos son ecológicos y además de prevenir, aportarán a la planta de cannabis nutrientes de calidad que beneficiarán su crecimiento.

En exterior, todas las plagas cuentan con enemigos naturales. Mariquitas, mantis religiosas, arañas, crisopas… siempre son interesantes en un cultivo de marihuana.

Si las encuentras alguna en tu cultivo, no la eches. Y si encuentras alguna en otro lugar y si es posible, llévatela y déjalas en tus plantas de cannabis.

¿Cómo eliminar plagas en plantas de marihuana?

Realizar revisiones periódicas a las plantas de cannabis es la clave para detectar a tiempo pequeñas plagas y evitar que se conviertan en una gran plaga.

No cuesta nada cada 3 o 4 días dedicar 5 minutos a revisar especialmente las hojas. Cualquier marca que veamos, puede significar que el ataque ha comenzado.

Antes de realizar cualquier tratamiento, conviene identificar el tipo de plaga que está atacando nuestras plantas de cannabis para usar un insecticida que sepamos con certeza que será eficaz.

Por ejemplo el aceite de neem o el jabón potásico llega a ser bastante efectivo contra trips o mosca blanca. Pero contra orugas o araña roja, resulta bastante ineficaz.

En cambio la tierra de diatomeas se muestra eficaz contra prácticamente todas las plantas que pueden atacar a un cultivo de marihuana.

Si optas por insecticidas químicos, deberás seguir siempre las dosis que indica el fabricante, respetando a rajatabla los plazos de seguridad entre la última aplicación y la cosecha.

Cómo recuperar tus plantas de cannabis después de una plaga

Si la plaga la hemos detectado y erradicado a tiempo, las plantas de cannabis seguirán su desarrollo con normalidad. Pero si no es el caso y muestran mal aspecto, se debería recurrir a algún tipo de producto reparador.

Por ejemplo un extracto de algas aplicado de manera foliar, hará que la planta recupere vigor y vuelva a desarrollarse como antes de sufrir la plaga.

Lo que no se debería hacer nunca es eliminar las hojas de las plantas de cannabis dañadas. La planta seguirá usándolas y hasta que no se caigan, resultarán de utilidad.

Conclusión

Una plaga siempre es un contratiempo en el cultivo de marihuana. Cuando se detecta a tiempo, los daños serán mínimos. Pero sino, los daños pueden llegar a ser considerables. Aprender a identificar el tipo de plaga ayudará a escoger el mejor tratamiento posible y eliminarla de una manera rápida, segura y eficaz.