Hace algunas semanas los diputados de México hicieron historia al dar media sanción a un dictamen para legalizar el cannabis pero que los senadores rechazarían.
Los ojos del mundo en torno al cannabis apuntaron a México en marzo pasado: no fue para menos, la cámara baja aprobaba por primera vez un dictamen de legalización.
La nueva legislación que, entre otras cosas, permitiría la posesión personal de hasta 28 gramos y el cultivo en casa, fue aprobada por 316 votos a favor, 129 en contra y 23 abstenciones.
Así, y con un gran apoyo civil figurado con el plantón 420, un cultivo con miles de plantas de cannabis instalado en un parque frente al Senado de México, el dictamen pasó a Senadores.
Durante la primera semana se desató una fiebre del cannabis en México, solventado en un dictamen que parecía acercar como nunca la posibilidad esperada durante años.
Aparecieron personajes de todo tipo que buscaron subirse a lo que, se prevé, puede ser la meca de la industria del cannabis en el mundo, tanto por producción como por consumo, ambos altos en México.
Sin embargo, el cuerpo del senado, que tiene tiempo hasta el 30 de abril para anunciar su decisión final, se mantuvo en silencio.
Ahora, el periódico El Universal asegura que el Senado de México tiene previsto rechazar el dictamen de cannabis que recibieron de Diputados.
La noticia de que existe un consenso en la cámara alta para regresar la minuta la dio el presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) y coordinador de la banacada de Morena, Ricardo Monreal Ávila.
Así es, el representante del mismo partido que llevó a la presidencia a Andrés Manuel López Obrador e ingreso el proyecto de ley que terminó en dictamen es quien baja el pulgar.
Según el legislador, hay consenso en el Senado de México para rechazar la minuta sobre la regulación del cannabis con los cambios que realizó la Cámara de Diputados.
Incluso, adelantó que se tendrían que corregir al menos 16 errores detectados y devolverlos a la cámara baja.
El testimonio del legislador zacatecano fue en rueda de prensa y aclaró que las tres comisiones dictaminadoras del Senado tienen la responsabilidad de decidir qué procede en este asunto.
Senado de México no le ve futuro a dictamen de cannabis
“Lo que sí veo es que hay un consenso completo de que no nos allanamos a las reformas o modificaciones que hicieron al proyecto enviado al Senado por la Cámara de Diputados”.
“Esta semana se reúnen las comisiones para determinar si podemos modificar el dictamen y regresarlo a la Cámara”, adelantó Monreal.
El hombre recordó que el Senado deberá tomar una determinación a más tardar el 30 de abril, día en el que concluye el periodo ordinario de sesiones.
También el plazo otorgado por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para regular el cannabis y su consumo recreativo.
“Entonces, nos quedan unos días para poder modificar el dictamen, regresarlo en los términos que lo habíamos comentado, mejorarlo y eliminar las inconsistencias constitucionales que pueden provocar recursos jurisdiccionales en los juzgados federales”.
“Eso es lo que estamos intentando hacer, pero todavía quedará de aquí a la próxima semana para poder dictaminar”.
Monreal subrayó que las comisiones dictaminadoras tienen todo el derecho, autonomía e independencia para decidir si se puede modificar la minuta.
Monreal Ávila insistió en que si los senadores modifican los errores del proyecto, se devolvería a la Cámara.
Aunque “eso ya es una facultad de las comisiones que están revisándola y que seguramente hoy o mañana determinarán, porque nos quedan tres sesiones solamente”.
Adelantó que el Senado está dispuesto a realizar las sesiones extraordinarias que se necesiten para desahogar el tema.
También aclaró que todavía no se decide si se solicitará a la SCJN una nueva prórroga ante el plazo que fijó para legislar sobre la materia.
Lo que el Congreso está discutiendo son las reformas legales que permitirían la regulación de tres usos de la marihuana: medicinal, industrial y adulto.
Farmacéuticas del mundo esperan dictamen de cannabis del Senado de México
Existen varios interesados en el mundo por la resolución del Senado de México acerca del dictamen de cannabis, además de los mexicanos y mexicanas, claro.
Entre ellos y ellas, los más ansiosos son los ejecutivos de las farmacéuticas multinacionales.
Según informó Milenio, son esas empresas las que más están pendientes del cannabis de México.
Las solicitudes de licencias que llegan a las autoridades de México por parte de las farmacéuticas apuntan a métodos de cultivo, invernaderos, cosecha y proceso de biosíntesis.
Es que todos en México saben -incluso el Senado- que el mercado del cannabis puede alcanzar 275,8 millones de dólares en 2025.
Esto encamina al país a ser el mercado legal más grande del mundo, por lo que las solicitudes de patentes por parte de farmacéuticas registra un crecimiento inusual.
Los solicitudes apuntan a métodos de cultivo, invernaderos, cosecha, post cosecha, tratamiento y control de plagas.
También extracción de cannabinoides, procesos de biosíntesis como los usados por bacterias, levaduras, purificación o separación de compuestos.
Todos quieren un poco de la torta cannábica que se cocina en México.
Los pedidos de licencias están dirigidos a los cannabinoides para aplicaciones médicas y terapéuticas, tratar alzheimer, parkinson, trastornos alimenticios, cáncer, pérdida de apetito, glaucoma o epilepsia.
Paulina Aguilera, consultora de ClarkeModet México, empresa especializada en temas de propiedad intelectual e industrial, advierte que, al definirse el uso lúdico de la marihuana, México tendrá el mercado legal-recreacional más grande del mundo.
“Contamos con una población de 127,6 millones de personas, de las que se estima que 2,3 millones son consumidores habituales”.
“En el caso de las solicitudes de patente, la mayoría va encaminada para usos médicos, que están legalizados”, sostuvo.
Asimismo, observó una tendencia similar en el mundo, por lo cual se espera que, próximamente, el número de solicitudes de patente en el país se incremente conforme avance la legislación, cuyo debate será en septiembre.
Para 2027 este sector moverá un mercado mundial de 76.000 millones de dólares, de acuerdo con distintos análisis.
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