En la actualidad y especialmente en EE. UU., existe una fiebre por los concentrados cannabicos. BHO, Rosin, Crumble, Wax, Shater, Ice-o-Lator… En este artículo de hoy te hablaremos del Live Resin, uno de los extractos más curiosos que se pueden elaborar.
Qué es el Live Resin
El Live Resin es un tipo de BHO que se ha puesto muy de moda en los últimos años. Su principal diferencia es que en lugar de cannabis seco, se emplea cannabis fresco, es decir, sin secar.
El inventor de este término fue el famoso cultivador estadounidense y especialista en extracciones William “Kind Bill” Fenger, según señal la gran mayoría de fuentes.
Además, tiene el privilegio de haber dirigido el primer cultivo de cannabis legal en Estados Unidos, exclusivamente dedicado a la producción de todo tipo de concentrados.
A Fenger se le ocurrió un día hacer una extracción de cannabinoides con gas butano como el BHO (también se puede usar CO₂ como solvente), pero empleando una planta recién cosechada, sin someterla a ningún tipo de secado.
Su objetivo era intentar preservar algunos monoterpenos que se pueden apreciar en un cogollo de cannabis fresco. Pero que se pierden o se vuelven menos intensos durante el proceso de secado y curado.
El resultado obtenido le gustó tanto a Fenger, que decidió perfeccionarlo. Los primeros intentos no fueron del todo satisfactorios, en cambio, aunque ya sabía que todo era cuestión de mejorar cada paso.
La humedad de la materia vegetal recién cortada, hacía que el efecto solvente del gas butano no fuera del todo efectiva, por lo que decidió probar a congelar previamente los cogollos.
¿Por qué preservar los terpenos?
Los terpenos son compuestos orgánicos aromáticos y volátiles constituidos por la unión de un hidrocarburo de 5 átomos de carbono, llamado isopreno.
Los compuestos más pequeños y más volátiles son los monoterpenos, que están biosintetizados por la unión de dos moléculas de isopreno.
Y finalmente los compuestos más grandes y menos volátiles son los sesquiterpenos, formados por la unión de tres moléculas de isopreno.
Las extracciones que emplean cannabis seco o curado, son muy ricas en sesquiterpenos, pero, en cambio, carecen prácticamente de monoterpenos como el Live Rosin.
La universidad de Misisipi realizó estudios sobre esto, y concluyó que el Live Resin, además de contener mayor cantidad de monoterpenos que el BHO, contiene un número muy similar de sesquiterpenos.
Los monoterpenos son terpenos al ser más pequeños y más ligeros, se degradan antes y realmente no llegamos a disfrutar de ellos más que por el olfato.
Es por ello que al conservarlos cuando la extracción se hace con cannabis fresco, cada uno de los perfiles organolépticos de estos monoterpenos aportará un aroma y sabor único.
Algunos de estos son el mirceno, el terpineno, el linalool o el limoneno, contrastando con los sesquiterpenos cariofileno o humuleno, los más comunes en el cannabis curado.
Cómo se hace Live Resin
Pero hacer Live Resin es complejo, ya que se necesita tener un equipo de laboratorio. El primer inconveniente que se encontrará cualquier persona, es congelar la hierba a 195º bajo cero.
De ahí que sea muy complicado encontrarlo incluso en Holanda o dispensarios de EE. UU., donde llega a quintuplicar el precio del BHO.
Pero existe una variante mucho más sencilla y que cualquiera puede hacer en su casa. El resultado no será el mismo que usando gas o CO₂, pero es bastante similar:
- Selecciona cogollos frescos y sin secar. Asegúrate de que estén lo más limpios posible.
- Córtalos en trozos pequeños con una tijera y colócalos en un recipiente.
- Añade alcohol etílico hasta cubrir completamente los cogollos.
- Agita el recipiente con vigor durante unos minutos para extraer los compuestos del cannabis.
- Filtra la solución con una malla fina sobre un recipiente.
- Evapora el alcohol al baño María para dejar solo el aceite de cannabis verde.
- Envasa el live resin en un recipiente hermético y guárdalo en un lugar fresco y oscuro.
No olvides que es una extracción de cannabis con un contenido de THC muy bajo al no existir el proceso de descarboxilación. El THC se encontrará en su estado acido THCA, que no es psicoactivo, aunque tiene unos beneficios terapéuticos similares a los del THC.
Resulta muy interesante para consumidores que solo busquen las propiedades terapéuticas de esta planta, ya que su psicoactividad es muy baja siempre que no se descarboxile. No sucede lo mismo cuando se somete a la descarboxilación, pudiendo alcanzar niveles de THC del 95%.
