¿Te gustas las golosinas? ¿Y el cannabis? Pues entonces la combinación de ambos te entusiasmará. Son además una gran opción con la que animar cualquier reunión o sorprender a cualquier amigo que comparta la misma afición. O también una manera muy saludable de consumir cannabis con fines terapéuticos.
Las gominolas, conocidas también como caramelos de goma, gomitas o pastillas de goma, son caramelos masticables elaboradas a partir de azúcar y gelatinas, con multitud de formas y colores. También se les suele añadir edulcorantes, saborizantes y colorantes alimentarios. Sin duda, una de las golosinas más universales y deliciosas.
INGREDIENTES
- 10 gramos de hachís
- 2 sobres de gelatina del sabor que quieras, unos 150 gramos en total
- 4 sobres de gelatina neutra en polvo de 10 gramos
- Medio litro de agua. También puedes usar leche o zumo de frutas
- Medio kilo de azúcar
- Azúcar para el recubrimiento
- Moldes pequeños de silicona
- Un poco de aceite para engrasar los moldes y evitar que se peguen
PREPARACIÓN
Comenzamos poniendo un cazo al fuego, en donde añadiremos todos estos ingredientes. Usaremos una temperatura baja, removiendo continuamente para evitar que llegue a hervir la mezcla.
Pasados unos 40-50 minutos, los cannabinoides del hachís se habrán descarboxilado y los ingredientes estarán perfectamente integrados, sin grumos.
Con un pincel mojado en aceite, moja bien los moldes. Ésto facilitará el desmoldado de las gominolas. También puedes usar una fuente y hacer una gran plaza de gominola, cortándola después en pequeñas porciones a tu gusto.
Vertemos la mezcla en los moldes y dejamos reposar unas 12 horas a temperatura ambiente. Tápalos con film transparente o con papel de aluminio previamente engrasado con aceite.
Pasado este tiempo, es hora de desmoldar nuestras gominolas cannábicas. El último paso es añadir azúcar en un plato o bandeja, y añadir las gominolas para darles un crujiente y dulce recubrimiento final.