Este mes de junio es uno de los meses más importantes para el cultivo de cannabis en exterior. Por un lado, es la fecha límite para germinar semillas fotodependientes y en muchas zonas climáticas incluso autoflorecientes. Y por otro lado, pasado mediados de este mes se produce el solsticio de verano. Este día, el 21 de junio, es el día más largo de todo el año.
A partir de ahí, los días comenzarán a ser cada día un poco más cortos. Esta reducción de horas de luz, indica a las plantas de cannabis que el otoño se va acercando y deben florecer y madurar antes de la llegada del mal tiempo. Este cambio horario las plantas lo detectan lentamente. Se inicia así una fase de prefloración hasta que comienza la floración pasado mediado de julio generalmente.
También como hemos dicho, se termina casi la fase de siembra en exterior. Todavía queda más de un mes para que plantas germinadas a estas alturas del año, alcancen un tamaño decente antes de empezar a florecer. Si esperamos mucho más, las plantas crecerán hasta que el fotoperíodo natural las fuerce a florecer, pasadas unas 4-5 semanas, cuando las plantas alcanzan su madurez sexual. Tendrían por lo tanto un comportamiento similar al de una autofloreciente.
Si por ejemplo germinamos a principios de julio, hasta principios-mediados de agosto la planta no comenzará a florecer. Y lógicamente el final de floración se retrasará y no contará con las mismas horas de sol que en los meses de julio. Ésto afecta que directamente afectará a la cosecha. Tanto rendimiento, como la posibilidad de ataques de hongos típicos del otoño con humedades altas.
Así que por lo tanto, aún estás a tiempo de conseguir al menos unas plantas de tamaño pequeño-mediano que te proporcionarán buenas cosechas. Si partes de esquejes, igualmente también entramos en la fecha límite. Éstos alcanzarán mayor tamaño que las semillas, ya que cuentan con un cierto desarrollo. En cambio un esqueje a estas alturas florecerá antes, al contar con la misma edad sexual que su madre.
Durante este mes, también debemos garantizar a la planta los suficientes nutrientes para conseguir los ejemplares más sanos y mejor preparadas para la fase de floración. Son fechas para realizar un último trasplante, proporcionando un buen espacio para el desarrollo de las raíces para el último empujón. Ni que decir tiene que usar un sustrato muy enriquecido puede ser suficiente para garantizar alimento de primera calidad antes del comienzo de la nueva etapa de flora.
Sino, debemos usar un abono de crecimiento rico en nitrógeno, el nutriente más demandado por las plantas para su desarrollo. Y tampoco debemos descuidar las raíces. Unas raíces sanas son sinónimo de una planta sana. El uso de enzimas, estimuladores, bacterias y hongos beneficiosos contribuirán a un mayor desarrollo radicular y a mejorar la salud. Lo notaremos en una plantas que tendrán mayor capacidad de asimilar nutrientes, soportar condiciones adversas y como es lógico, se reflejará en una mayor producción.
Tampoco debemos olvidar la prevención de plagas y hongos. Si durante el crecimiento son un peligro, en floración lo son más. Los insectos comienzan su período de máxima actividad. Trips, mosca blanca, araña roja, gusanos, minadores… podemos mantenerlo a raya usando regularmente aceite de neem o jabón potásico. Contra los hongos, algún fungicida preventivo es la mejor opción. Siempre vale más prevenir que curar.
One Response
Hola gente como va, es mi primer cultivo y queria hacer unas consultas, germine mi planta y tiene una semana y media, la tengo en exterior en el balcon, la cagada es que le da la luz solar a la mañana hasta las 2 de la tarde despues me caga un edificio con el sol, eso le bastaria a la planta o es muy poco? y despues a la noche la dejo en el balcon tiene techito o la entro? espero respuesta graciass, saludso!!!