La regulación de la marihuana en Uruguay le resta un 18% de ventas al narcótico, por ahora.
De los ciudadanos uruguayos mayores de edad que dijeron haber consumido marihuana en el último año, uno de cada seis estaba habilitado para adquirir el cannabis de forma legal. Habían cerca de 26.000 personas censadas. La ley aprobada hace cuatro años que regulariza el cannabis ha restado el dieciocho por ciento de las ventas al narcotráfico.
El secretario de la Junta Nacional de Drogas, Diego Olivera, dijo que “Es un porcentaje adecuado para una primera etapa, pero es aún insuficiente si consideramos la demanda total”. Se calcula que 50.000 adultos son los consumidores uruguayos que la usan varias veces al mes, y esa es la cifra que se marcan alcanzar.
Las ventas de marihuana en la farmacia aún tienen problemas con las entidades bancarias,pero ya han adquirido un 63% de las personas inscritas y autorizadas.
“El volumen de registrados es sensiblemente mayor en las áreas próximas a las farmacias adheridas y mucho más limitado donde no las hay”, resaltó Olivera. “La Junta Nacional de Drogas procura una cobertura geográfica homogénea, eso permitirá cumplir de forma más completa con los objetivos que propone la ley”.
Por ahora, los avances han sido satisfactorios incluso con la problemática suscitada por los bancos, el etiquetado del producto y las pocas farmacias operativas para su distribución. “No ha existido improvisación y se ha avanzado con cautela, controlando los resultados, realizando ajustes y actuando seguridad y responsabilidad,” dice Olivera.
En la actualidad, la regulación del cannabis en Uruguay se enfrenta a dos nuevos desafíos, uno será los nuevos establecimientos que se deben autorizar para la venta de marihuana.
La segunda sería como caminará el proyecto durante el verano, momento en que los autocultivadores al aire libre no habrán cosechado todavía y llegarán turistas para adquirir en farmacias.
En la capital Montevideo se sitúan más de la mitad de los compradores y en el interior del país estaría la otra mitad mitad más abierta al tema de autocultivo y adquiriendo a través de clubs de cannabis.
La estadística en Uruguay también ha logrado derribar dos mitos:
Los consumidores de cannabis son todos unos vagos. De los 16.275 compradores, el 52% trabaja en el sector privado y el 12% en el público. Solo un 26% no trabaja, aunque normalmente son jubilados o estudiantes universitarios.
La marihuana está asociada a la pobreza y la falta de estudio. La mitad de los adquirientes de marihuana en farmacias son universitarios. Solo el 8% no entro ni en la escuela
