Rugosos, extrafinos, grandes, pequeños, de colores, de sabores, con estrías, de efecto calor, de efecto frío, sensibles y retardantes. Existe una gama tan amplia de preservativos que es difícil pensar en algo que pueda faltar. Pero si, faltaba algo, se le ha ocurrido a una persona y ya se comercializa. Son los condones con sabor a marihuana.
Como suena. No contiene marihuana real, por lo que no produce los mismos efectos que fumársela pero si que sabe igual que un cigarrillo de esta planta. Son los cannadoms, unos condones que no dejan duda de qué están compuestos. Su envoltorio, verde chillón y la hoja de la marihuana bien presente. Para que nadie diga que ‘lo compró sin querer’.
Se venden en Europa y Estados Unidos por el precio de 1 euro y medio y prometen causar furor entre los amantes del cannabis. Se pueden comprar a través de su página web y tienen las mismas propiedades que los preservativos normales. Solo añade la experiencia de tener en la boca cierto sabor a marihuana, como si se estuviera probando un porro.
Sin duda, una experiencia diferente para los amantes de la marihuana en sus relaciones sexuales.