Los cultivos de cannabis en exterior siempre están sometidos a varios peligros. Plagas, animales domésticos, animales salvajes, animales de dos piernas, hongos… contra algunos de estos peligros podremos tomar medidas. Contra otros, desgraciadamente no. En este post hablaremos de los principales hongos que pueden atacar plantaciones de cannabis:
OÍDIO
El oídio es un hongo muy reconocible. Es como un polvillo blanco o de color ceniza que se puede ver sobre las hojas de las plantas. Se puede fácilmente confundir con suciedad, ya que cuando se pasa el dedo sobre él desaparece parcialmente. Especialmente ataca en condiciones de humedad alta, temperaturas templadas y mala ventilación. El viento transporta las esporas y éstas se depositan sobre las hojas de las plantas. El hongo enraíza y se va alimentando de los nutrientes hasta que éstas secan y mueren.
Por otro lado es uno de los hongos más fáciles de eliminar, pero sin olvidar que puede ser muy agresivo. Como es fácil de detectar, también se puede realizar un tratamiento rápidamente. Para combatirlo se puede usar cualquier fungicida específico, además de azufre o cobre. Las zonas afectadas por el oídio, quedarán ya dañadas para siempre, pero no llega a ser necesario hacer una limpieza de hojas una vez el hongo se ha erradicado.
BOTRYTIS
También conocido como moho gris, es un hongo parasitario que puede afectar en cualquier momento del cultivo, especialmente en las primeras fases de siembra, como en las últimas fases de floración e incluso durante el secado. Se caracteriza por manifestarse como una cierta humedad en las zonas atacadas, la pérdida del color verde a uno grisáceo, y una especie de pelusilla cuando ya está en su máximo desarrollo. Humedad alta, cambios bruscos de temperaturas, lluvias… son caldo de cultivo de la botrytis.
Especialmente se debe tener cuidado en floración, ya que puede causar una gran pérdida en las cosechas. Además de las condiciones ambientales, las orugas son también causantes de la aparición de este hongo. Cuando éstas atacan un cogollo, sus excrementos hacen que aparezca botrytis. Es bastante complicado de tratar una vez se ha instalado en la planta, y aunque hay productos específicos como Botrybel o Botryprot, la prevención es la mejor arma para combatirlo.
FUSARIUM
Es posiblemente el hongo más agresivo y temido por los cultivadores, causante de la muerte tanto de plantas recién germinadas, como en plantas de gran tamaño. Algunas cepas de fusarium parasitan el sistema radicular, mientras otros atacan el sistema vascular. Y en ambos casos con fatales consecuencias. El más temido es el vascular, ya que puede causar la muerte de plantas de gran tamaño en cualquier momento. Mientras la muerte de una semilla nos puede permitir germinar de nuevo, la muerte de una planta en floración es irreemplazable. Los síntomas son claros: la planta en pocas horas se seca total o parcialmente, como si le faltase agua.
Desgraciadamente es un hongo que no tiene un remedio eficaz. Para evitarlo en gran medida, se debe partir de sustratos de calidad y esterilizados, evitar excesos de riego o cultivar en zonas poco ventiladas. También evitar regar a pleno sol, ya que se crean condiciones favorables para su desarrollo. El uso micorrizas, un hongo beneficioso, ejercerá de escudo contra el ataque de hongos en las raíces y dará mayor vigor a las plantas.
PYTHIUM
Es uno de los hongos que mayor número de bajas durante los primeros días de cultivo. El Pythium incluye varias especies de hongos que habitan principalmente en el suelo. Algunos de ellos son causantes del llamado damping-off o marchitamiento fúngico. Es común encontrar la pequeña plántula recién nacida tumbada sobre el sustrato con el tallo doblado. Es una enfermedad muy común en invernaderos y en condiciones favorables se multiplica con gran rapidez. También libera esporas que infectan las raíces.
Los ataques iniciales de pythium se producen en el sistema radicular, donde produce lesiones e impiden una correcta absorción de nutrientes. También pueden observar algunos síntomas en la base del tallo, que adelgaza hasta no ser capaz de sostener la planta. Como la botrytis, el uso de un sustrato esterilizado es importante, ya que las esporas pueden permanecer es sustratos infectados. También se pueden usar micorrizas, así como evitar siempre encharcamientos en el sustrato.
MILDIU
Se trata de un hongo que produce de hifas fúngicas en los tejidos vegetales. Se puede confundir en ocasiones con el oídio, con varias diferencias. Al mildiu se introduce en los tejidos vegetales, mientras el oídio permanece es la superficie. Aunque el mildiu suele atacar el envés de las hojas, pequeñas manchas en su parte superior parecidas a manchas de aceite las van decolorando hasta crear zonas amarillentas. Estas manchas progresan hasta dar lugar a una capa polvorienta, fina y de color gris pálido, similar al oídio.
Pese a no ser uno de los hongos más comunes, se debe prestar atención cuando se cultiva cannabis en huerto, ya que algunas especies como calabazas, sandías o melones con muy propensas a contraer mildiu, y de ahí se puede extender a nuestras plantas. Es muy frecuente en climas húmedos, templados y con poca ventilación. Para combatirlo se puede usar Mildiuprot.